La candasina, tras un año de obras, se muda a su nuevo chalet. Reconoce que se encuentra en medio del caos de la mudanza
10 may 2019 . Actualizado a las 19:50 h.La actriz asturiana Paula Echevarría tras un año siguiendo muy de cerca la construcción de su nueva casa, por fin, se ha mudado. Tal y como ella misma ha contado a las revistas, «ha sido un año de obras, pero se ha hablado tanto de ello que me han parecido como diez». Desde que se separó del cantante David Bustamante, tanto la candasina como su hija Daniella vivían en el domicilio conyugal. Finalmente, la it girl por abril de 2018 decidió dejar atrás todo lo relacionado con su matrimonio y para ello, inició la obra de un chalet en Villafranca del Castillo, a muy pocos metros de la que ha sido su residencia en los últimos años junto al cantante.
Como suele decirse, tras la tormenta llega la calma y eso es lo que parece que le está sucediendo a la asturiana. Se encuentra en un buen momento personal puesto que estrena: «La casa de mis sueños». Por otro lado, su relación con el futbolista Miguel Torres va viento en popa. En cuanto a lo profesional, también está viviendo un momento de gloria. Recientemente, ha acudido al desfile de Calzedonia, en Ibiza, donde ha coincidido con otras famosas como Sara Carbonero, que ya se ha incorporado a su vida profesional tras el susto por el infarto de su marido Iker Casillas.
En dicho desfile, le preguntaron a Paula Echevarría por su nueva casa y ella contestó sin reparos: «Ya estoy viviendo en la casa. Desde esta semana, me mudé el lunes. Llevo cuatro días». Además, comentó que se está haciendo a su nuevo hogar y que está viviendo el caos normal de cualquier persona que se muda, «sin mesa para poner la tele y con todas esas cosas que molan cuando estrenas una casa». Aunque ha confesado que no está sola en todo este proceso ya que le está ayudando la decoradora Miriam Alía, bromea diciendo que no sabe quién trabaja mano a mano con quién en el tema de la decoración.
Por supuesto, la interrogaron sobre Miguel Torres, su actual pareja sentimental, si irá a vivir con ella. La candasina respondió: «Si Dios quiere, claro que sí, el día de mañana, ojalá...».
Otra de las grandes incógnitas es qué va a suceder con la residencia que compartió junto a su exmarido David Bustamante y su hija durante los últimos años. Ella confesó que la vivienda está ahí y que no saben aun cómo y cuándo lo harán, pero que son cosas muy suyas y que, de momento, están en todo de acuerdo: «Todo lleva su tiempo y su proceso».
Debido a que se encontraba en un desfile donde iban a presentar las últimas tendencias en bikinis y bañadores la actriz asturiana adelantó que su verano se presenta «muy tranquilo», aunque seguro que deja algún que otro posado veraniego en su nueva casa.