Comarca Valle del Nalón, el encuentro entre la cultura minera y la riqueza natural

La huella de la minería

La extracción de carbón ha marcado profundamente el devenir de la cuenca del río Nalón. La huella de la actividad extractiva forma parte inseparable del paisaje y es una fuente inagotable de patrimonio industrial que se ha reconvertido como nuevos activos para la comarca.

En L' Entregu/El Entrego (San Martín del Rey Aurelio) se encuentra el Museo de la Minería y la Industria (MUMI), un equipamiento espacios diversos que muestran la actividad minera, la maquinaria o los minerales y dan acceso a la bibliografía e informan sobre la cultura minera en su conjunto. Entre todo lo que ofrece destaca, especialmente, la mina-imagen, un espacio en el que se reproduce con extraordinario realismo el interior de una explotación, a la que se accede por una jaula.

Y a pocos metros del museo se encuentra el pozo San Vicente, el primero que fue autogestionado por un sindicato minero durante los años veinte del siglo XX, y muy cerca el Pozo Sotón, declarado Bien de Interés Cultural y elegido entre los 100 elementos de patrimonio industrial más representativos de España. Precisamente este último ofrece visitas a la mina que incluso pueden llevarnos a bajar a las galerías del pozo, más de 500 metros para en una experiencia irrepetible.

En Langreo se encuentra uno de los equipamientos más destacados de la comarca: el Ecomuseo del Valle de Samuño, en el entorno del poblado minero de La Nueva y el Pozo San Luis, al que se accede en un ferrocarril de transporte de carbón recuperado para las visitas. El Valle de Samuño forma parte del Paisaje Protegido de las Cuencas Mineras de Asturias, y es precisamente en la antigua Casa de Aseos del Pozo San Luis donde se encuentra el Centro de Interpretación de este espacio que aúna riqueza natural con patrimonio industrial. Junto al Museo de la Siderurgia, también en Langreo la comarca del Nalón ofrece una de las propuestas más completas ligadas al patrimonio industrial de toda España y que va más allá de los equipamientos culturales y turísticos ya que la impronta de la mina es permanente en el paisaje y en el carácter de sus gentes.

El parque de Redes

El Parque Natural de Redes, cuyo territorio abarca los concejos de Caso y Sobrescobio, es una valiosa reserva natural, cultural y etnográfica. El parque se creó en 1996 y en 2001 fue declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO.

Redes cuenta con numerosos atractivos entre los que destacan sus abundantes cursos de agua y- especialmente- La Nalona, que no es una fuente más sino aquella que señala el nacimiento del Nalón.

En este territorio que ocupa una superficie de 377 kilómetros cuadrados, se pueden observar formaciones de origen glaciar como morrenas o circos, además de formas kársticas en cuevas, pero si hay algo que define este parque son sus bosques, que árboles ocupan el 40 por ciento de su territorio. El haya es el árbol predominante, pero también hay importantes poblaciones de roble albar.

En su paisaje se alzan cumbres como el Retriñón, la Peña'l Vientu, Cantu l'Osu y el Tiatordos, y la de máxima altitud, la Rapainal, con 2.002 metros.

En el Parque de Redes se encuentran todas las especies animales características del norte peninsular: el oso pardo, el urogallo y el lobo. En su territorio viven, asimismo, algunas de las mayores poblaciones de rebecos y ciervos de Asturias.

En el parque se encuentra uno de los puertos de montaña de Asturias más apreciados: Tarna. Es un lugar impresionante para disfrutar de las vistas del Alto Nalón, y cuenta con miradores a lo largo de su sinuosa carretera.

Otros lugares destacados del parque son el Tabayón del Mongallu, una cascada de más de 60 metros de altura, el lago Ubales, con sus vistas panorámicas, y la vega de Brañagallones, un lugar famoso por su belleza natural y su historia que cuenta con un refugio que fascina a quienes se alojan en él.

La capital de Sobrescobio, Rusecu/Rioseco, se encuentra a orillas de un embalse donde se pueden observar diversas especies de aves acuáticas. Allí podemos visitar La Casa del Agua, donde, entre otras cosas, tenemos la oportunidad de acercarnos de una manera distinta a este elemento de la naturaleza para comprender todo lo que representa para la vida en el planeta. En los alrededores de Rusecu/Rioseco, se encuentran numerosos pueblos que realzan el carácter rural del concejo. Algunas como Ladines y Campiellos ofrecen vistas impresionantes de las montañas de Redes. Además, el pueblo de Villamoréi tiene un torreón histórico y se encuentra cerca de un desfiladero del río Nalón.

Soto, otro pueblo de Sobrescobio, es conocido por ser el punto de inicio y final de la popular Ruta del Alba, una de las rutas de senderismo más populares de Asturias, que discurre paralela al río del mismo nombre.

Y en Caso se encuentra el desfiladero de los Arrudos, una garganta abierta en la formación caliza que discurre entre hayedos y pasa por majadas de una gran belleza.

Cultura, actividades

Uno de los mejores ejemplos del equilibrio entre las huellas de la actividad industrial y el paisaje natural está en el concejo de Laviana, en los llamados Senderos del Carbón, en los que se han recuperado paisajes que en su día albergaron explotaciones mineras para convertirlos en escenarios para el senderismo y la bicicleta de montaña. En el entorno del Picu La Vara, estos caminos permiten trazar un itinerario acorde con los propios niveles de dificultad recorridos más cortos o más largos, con diferentes niveles de dificultad, entre restos de las explotaciones mineras y con vistas a cumbres como Peña Mea, Los Picos de Europa o Peñamayor.

En el inicio de dos de las rutas de los Senderos del Carbón, en la Campa la Tazá, se encuentra el Flow Trail de Laviana, el primer circuito de BTT homologado de España, con tres kilómetros y medio de descenso.

Tanto los Senderos del Carbón como el Flow Trail están diseñados de manera sostenible, recuperando los antiguos caminos que los mineros recorrían para transportar el carbón tras su extracción.

Laviana cuenta, además, con dos pump tracks, circuitos cerrados de asfalto hechos para disfrutar sobre ruedas (en bicicletas, monopatines, patines, etcétera).

El río Nalón ha marcado la historia de la comarca y es hoy su principal arteria, así como uno de sus mayores atractivos. Para disfrutarlo, existe una senda fluvial que se encuentra entre las más largas de Asturias, de 14 kilómetros de longitud. Discurre paralela al río por un paisaje de contrastes, que van desde bosques hasta castilletes de minas, y puede hacerse en varios tramos, ya que tiene salidas e incorporaciones a lo largo de su recorrido.

Uno de los atractivos del río y sus afluentes es la gran cantidad de puentes que discurren sobre su cauce. Entre ellos destacan el puente Villoria y el puente d’Arcu, ambos de origen medieval, y el puente de La Chalana construido el siglo pasado, que entronca con a una de las canciones populares más enraizadas en Asturias, «Chalaneru». Estos tres puentes están en el municipio de Laviana.

Y las aguas del río son protagonistas de una de las fiestas más singulares de Asturias, el Descenso Folclórico del Nalón, en Pola de Laviana, declarada de interés turístico nacional. Es un desfile acuático cargado de humor en el que varias peñas construyen embarcaciones y tratan de mantenerlas a flote, no siempre con éxito. Al descenso sigue una multitudinaria celebración por las calles de la villa que no deja indiferente a nadie.

La comarca, dada su ubicación y su orografía, cuenta con numerosos recursos para actividades de aventura: además de disfrutar de las innumerables rutas para senderismo o bicicleta de montaña, montar a caballo, remar en un kayak o practicar escalada.

Y los amantes de la cultura tienen también muchas opciones. Una de ellas es visitar Entrialgo, el pueblo natal del escritor Armando Palacio Valdés, en el concejo de Laviana. La casa donde nació el autor se encuentra en excelente estado y ha sido convertida en un museo dedicado a su vida y obra, que ofrece una recreación del contexto histórico y personal en el que vivió el escritor. Entrialgo conserva su encanto rural, con casas tradicionales, hórreos y un busto de Armando Palacio Valdés. Además, hay una ruta teatralizada que permite interactuar con personajes de su novela «La Aldea Perdida», y muestra la Asturias de finales del siglo XIX y principios del XX. Esta ruta conecta Entrialgo con Villoria, otra histórica aldea de Laviana.

En el concejo de Langreo se encuentra la Pinacoteca municipal Eduardo Úrculo, ubicada en un antiguo matadero, donde se exponen obras de autores asturianos desde la Guerra Civil hasta nuestros días, entre ellas, varias del pintor langreano que le da nombre.

Hay, asimismo, dos espacios devotos de gran interés en la comarca. En Langreo, la ermita de El Carbayu, situada en lo alto de una atalaya con unas vistas excelentes del valle del Nalón. Son habituales desde hace muchos años las peregrinaciones a este santuario, que cada 8 de septiembre celebra una romería con procesión que ha sido declarada de Interés Turístico.

Gastronomía

La Comarca Valle del Nalón tiene una gastronomía rica y singular, y un espíritu siempre dispuesto a compartir en celebraciones por todo su territorio.

Es aquí donde se produce el queso Casín, un producto con Denominación de Origen Protegida cuya calidad tiene un prestigio enorme, y que a finales de agosto celebra su certamen en la localidad de El Campu, considerado Fiesta de Interés Turístico Regional.

Hay otras fiestas gastronómicas con gran raigambre en la comarca. Todas se celebran en otoño en San Martín del Rey Aurelio. La primera es la Fiesta de los Nabos, en Sotrondio. La tradición en la preparación de este alimento se remonta al reinado de Aurelio. A continuación se celebra la fiesta de les Cebolles Rellenes, en L’Entregu/El Entrego, donde se inventó este plato, y más adelante tiene lugar la Fiesta de los Pimientos Rellenos, en Blimea. Las tres fiestas han sido declaradas de Interés Turístico Regional.

Finalmente, la localidad de La Felguera, en Langreo, celebra la Fiesta Gastronómica «Su Excelencia la Fabada», en homenaje a este gran plato asturiano.

En la comarca hay además dos dulces típicos: los suspiros del Nalón, pastas exquisitas cuya fama está muy extendida, y los bartolos, postre de Laviana elaborado con almendra. A ellos se suman otros típicos de toda Asturias como el arroz con leche, los frixuelos o les casadielles.

En el Valle del Nalón conviven como en muy pocos lugares la naturaleza y la huella de la industria, el peso de una historia minera y siderúrgica con los valores y la belleza de los espacios naturales, en torno a un río cargado de historia y presto para ser disfrutado. Con una gastronomía y unas gentes acogedoras como en pocos lugares, la comarca ofrece una experiencia única, diferente, inolvidable a quien la visita.

Cinco concejos la componen: Caso, Langreo, Laviana, San Martín del Rey Aurelio y Sobrescobio.

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