La crítica de los bajos de El Molinón a la fan zone del Sporting: «Nos hace daño y fuimos engañados por la Cámara de Comercio premeditadamente»
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Entrevista con La Voz de Asturias
06 nov 2024 . Actualizado a las 01:44 h.Berna Alonso, propietario de uno de los negocios de hostelería ubicado en los bajos del estadio de El Molinón, La Cañada Real, atendió la llamada de La Voz de Asturias para explicar cómo se gestó la nueva fan zone que el Real Sporting de Gijón, en colaboración con la Cámara de Comercio, puso en marcha este pasado fin de semana y hacer una valoración de qué impacto tuvo en los negocios y locales de la zona.
Lo primero de todo, ¿qué opinión os suscita a los que estáis allí y que tenéis negocios en la zona, que además se nutren en buena medida directamente precisamente de las previas de los partidos, la creación de esta fan zone?
«Pues en los bajos de hostelería estamos indignados. Por lo lógico, pero además porque hemos sido engañados de forma premeditada por parte de la Cámara de Comercio, que es una de las principales responsables de que esto haya llegado a un punto en el que estamos. Tenemos un malestar muy grande y ahora se da una situación complicada para gestionar. Lo gestaron a base de una mentira, porque ya se hablaba antes de terminar la temporada pasada de la posibilidad de crear una fan zone. En aquel momento el Sporting no tuvo ningún contacto con nosotros. Sabemos que la primera propuesta la llevó a la Cámara de Comercio el hijo de Irarragorri y nosotros nos enteramos por la prensa. Lo hablamos entre nosotros, porque nos pareció una noticia espectacularmente grave, llamamos a la Cámara de Comercio y en todo caso nos dijeron que era humo, que había ido por ahí el Sporting y lo había comentado, pero que no habían hablado de nada y que, en cualquier caso, para que existiera una fan zone, el Sporting tenía que ponerse de acuerdo con los bajos de El Molinón. Cosa que no ha pasado»
Entonces, digamos que la Cámara de Comercio llega a un acuerdo con el Sporting de alguna manera en representación vuestra, pero sin vuestro conocimiento..
«Lo que hace la Cámara de Comercio es mentirnos en primera instancia porque el Sporting, yo entiendo que no tiene que llamarnos a lo mejor para ese primer momento. Entiendo que tengan la idea de poder aprovechar un espacio y que se reúnan primero con la Cámara de Comercio. Todos los dueños de los locales de los bajos lo entendimos. Lo que pensamos es qué objetivo tiene esa actividad cuando nosotros estamos aquí pagando alquileres 365 días al año, siendo negocios familiares. En ese momento nos dicen que mientras el Sporting no pase por un acuerdo con nosotros, no hay fan zone. Claramente, o sea, de forma contundente, tajante. Y nosotros nos olvidamos. Hasta hace 15 días para atrás, que vuelve esta historia»
Es decir, que estuvisteis apartados nuevamente prácticamente durante todo el proceso hasta que ya estaba definido..
«Correcto. En este caso, 15 días antes de esta fan zone, en la semana del 15 de octubre, empezamos a recibir los locales de hostelería de los bajos uno por uno la llamada de Jorge Morales, director comercial del Sporting. En esa llamada nos dice que van a hacer una fan zone el día 2 de noviembre contra el Cádiz, de 11 y media de la mañana a 4. Y ahí puse el grito en el cielo, ¿cómo vas a hacer con el Sporting una fan zone si la Cámara de Comercio a mí me ha dicho que tenéis que hacer un acuerdo con nosotros? En ningún caso le dijimos que no a la iniciativa, al revés, le trasladamos que tendríamos que sentarnos, trabajar, desarrollar esa idea y tratar de hacer que exista con el menor impacto posible en los negocios que estamos ahí todos los días y crear algo juntos. Sin embargo, me dijeron que la fecha era inamovible, por 'los ritmos de la competición'»
¿Y recogieron el guante y os propusieron participar de alguna manera?
«Sí, en esa misma llamada me trasladaron que era para colaborar. Que si queríamos estar podíamos. Yo lo que le dije es que en 15 días, aunque quisiera, no podría. Ni yo ni ninguno. Porque me estás llamando con 15 días para que monte un equipo, una infraestructura, una empresa. No es viable. Nos llamaron con 15 días de antelación para informarnos, diciéndonos con una pistola en el pecho que hay una fan zone, la queramos o no. Es ahí cuando les dijimos que había que sentarse y desarrollarla. Porque realmente ya existe una fan zone en El Molinón. Desde hace muchos años. Ya tienes una de las mejores zonas de previa de fútbol de cualquier estadio en España. Y lo que estáis haciendo es intentar sacar a esa gente que todos los clubs quieren llevar a sus estadios, y llevarlos para otro sitio. Aun así, abrimos la puerta a negociar y entendernos para ver dónde llegamos con esto. En una primera conversación propusimos que las actividades fueran frente a los locales, donde podrían consumir, o por ejemplo acotar el horario para que cierre dos horas antes del partido, para que tengan su fan zone y que luego acudan a la zona de los bajos. Y nos dijeron rotundamente que no»
Pudisteis hablar entonces después de esa primera llamada..
«Sí, a raíz de lo que pasó con la última llamada de Jorge para la fan zone se organizó una reunión que presioné para que se hiciera, porque hablamos con la Cámara de Comercio, y nos seguían queriendo hacer ver que no iba a haber esa fan zone si no había un acuerdo, todavía hace 15 días, nos siguió mintiendo. En esa reunión estuve yo como representante de los bajos de El Molinón, Álvaro Alonso, como secretario de la Cámara de Comercio, Javier Martínez, el ex vicepresidente del Sporting como representante de OTEA, y Jorge Morales en representación del Sporting. En esa reunión en ningún caso el Sporting se planteó negociar la fecha. Se plantó en esa fecha. Querían ver primero cómo salía y luego ya hablaríamos. Esa fue su actitud. Nos decían que era un espacio muy humilde y que no había nada que negociar. No teníamos nada que hacer allí. La Cámara de Comercio nos decía que la fan zone serviría para mejorar la zona y la oferta, pero no nos iba a afectar, cosa que estamos viendo que es mentira. Y OTEA dejó claro que es un intrusismo y que si nos veíamos afectados, como está siendo, ellos estarían en contra. Javier Martínez me dijo en esa reunión que no habrían podido hacer esto en la etapa en la que él estaba en el club. Rotundamente, no. Si gente de Gijón, cuando dirigían el Sporting, veían claro que no se podía haber hecho, por qué esta gente sí. ¿Dónde está la ética?
El Sporting no negoció nada en aquella reunión, pusieron claro lo que había encima de la mesa y no negoció con nadie. No aceptó nada. Es más, la única medida que el Sporting nos puso encima de la mesa no la cumplió. Era una especie de sellos para que la gente de la fan zone fuera a luego los locales de los bajos de El Molinón y tuviera que sellar en tres sitios; la fan zone y otros dos bares de El Molinón a través de una consumición para poder participar en sorteos posteriores, así tratarían de incentivar que la gente fuera hacia los bajos. Pero puedo asegurar que no se hizo»
¿Habéis podido medir el impacto de esta primera fan zone en vuestros negocios? ¿Os ha afectado mucho?
«Sí que ha hecho daño, porque estamos hablando de que solo en cerveza se han vendido 25 barriles allí. Cada barril son 30 litros de cerveza. Sabiendo lo que cuesta cada uno y el beneficio que obtenemos de ellos ya sabemos un primer impacto que ha repercutido en todos los locales de los bajos. Y ha sido un club deportivo el que ha vendido esos espacios a otras empresas de Gijón que no están en el entorno de El Molinón como el Raw Coco o el Patanegra. Ese dinero se lo han llevado unos negocios que no están allí. Y a nosotros el Sporting nos vendió que era una fan zone muy humilde, muy pequeñita, muy de andar por casa. Generaron eso sólo en cerveza, más todo lo que hayan podido vender allí en comida, por ejemplo. La nueva propiedad del Sporting ha venido a explotar todo lo que puedan pisando a todo lo que sea de Gijón»
Entiendo que habrá impactado también a más locales hosteleros de la zona que no estén en los bajos, ¿habéis hablado con ellos?
«Seguramente sí les ha impactado también, pero no hemos hablado con ellos. Se me ocurre por ejemplo Casa Aurora o La Tonada, que son sitios referentes para los días de partido. Sería elucubrar el impacto que ha tenido para ellos porque no hemos hablado, pero los consumos que ha habido en la fan zone están claros y son los que comenté anteriormente. Eso nos repercute a todos»
Ya por cerrar, con otro tema relacionado, ¿qué opinión te merece las obras de carácter urgente que el Ayuntamiento ha puesto en marcha el pasado fin de semana en el estadio?
«En este caso concreto desconozco todos los detalles. Sí puedo decir que no nos afecta al día a día en la actividad comercial de la zona, pero tampoco nos han comunicado nada ninguna de las partes. El estadio sólo hay que entrar y verlo; hay goteras, en los bares cae agua si llueve con viento racheado o si hay granizo. Después del verano ya he habido dos veces con goteras, al menos en La Cañada, y me consta que no soy el único. Nosotros no hacemos nada, porque son goteras leves que no van a ningún lado, entonces ni siquiera llamamos, no molestamos, pero están ahí. Es un problema, pero el estadio lleva estando así desde que estoy allí hace siete años, o diez en caso de otros locales»