Ramírez: «Amo profundamente al Sporting; estoy disfrutando, pero hubo momentos duros cuando llegué a Gijón»

SPORTING 1905

Miguel Ángel Ramírez
Miguel Ángel Ramírez Real Sporting

El técnico rojiblanco participó en una charla para padres y alumnos

10 nov 2023 . Actualizado a las 20:07 h.

Esta tarde, en un acto organizado por el colegio Corazón de María (CODEMA), de Gijón, el entrenador del Real Sporting, Miguel Ángel Ramírez, ofreció una charla a padres y alumnos del centro y demás personalidades del mundo del deporte gijonés sobre el liderazgo y gestión de grupos, explicando su experiencia aplicada al mundo del fútbol profesional. Además, el técnico rojiblanco se «sometió» a las preguntas de los más pequeños, pudiendo conocer diferentes aspectos del día a día del vestuario sportinguista.

Declaraciones de Miguel Ángel Ramírez:

«Cuando me llegó la llamada del Sporting reaccioné con una alegría muy grande porque un club gigante me abría las puertas para poder entrenar en mi país. Imagínate lo que pensé, estaba en Gran Canaria con un sol espectacular, y aquí, en mi primer entrenamiento; granizo (risas). Aun sabiendo que venía en un momento que no era para listos, me dije 'da igual, voy a ir'. Me lo tomé como una oportunidad de la vida y del fútbol para demostrar quién soy»

«En Gijón ha habido momentos duros. Cuando llegué la gente decía 'cómo se les ocurre a estos de Orlegi contratar a este tío, no tiene experiencia ninguna', pero lo estoy disfrutando... Que no os imagináis. Estoy trabajando mucho y amo profundamente al Sporting»

«Soy entrenador porque me gusta mucho dar clase y me gusta mucho el fútbol. Mezclando ambos puedo dar clase de la asignatura que más me gusta, el fútbol. Era un 2x1»

«No sé si me gusta el mundo del fútbol profesional. No me gusta la tontería, no me gusta lo mediático»

«Mi seguridad no depende de los resultados que obtengo, de la victoria o la derrota. Llevo muchos años tratando de conocerme para gestionar mis emociones y poder conocer a mis jugadores y gestionar un grupo tan amplio de personas. Cada uno con sus problemas y formas de ser. Debo ayudarlos a que gestionen esas emociones como líder. Se lidera a través de conversaciones. Las llamo 'conversacciones'; conversaciones que llevan a la acción. Trato de construir mi equipo con conversaciones de calidad. Nos prometemos, agradecemos, reconocemos, ponemos límites..»

«En el vestuario hemos creado un espacio seguro en el que poder expresarnos sin miedo a ser juzgados. Mis jugadores me han visto reír y llorar, unas veces más serio y otras callado, escuchando»

«Las relaciones entre los jugadores y el espíritu de equipo son más importantes que cualquier táctica. La táctica por supuesto que es importante, pero lo son mucho más las relaciones entre ellos y con el cuerpo técnico. Los equipos con alma construyen vínculos de confianza entre sus miembros para que esto les proteja cuando llegue la adversidad»

«Intento hablar semanalmente con casi todos. Y no sólo hablamos de fútbol, también de sus sentimientos, miedos, cómo le puedo ayudar como entrenador.. Así trato de liderar para que puedan alcanzar su mejor versión como profesionales y como personas. Trabajo también en mí mismo para poder crear esas relaciones de mejor calidad»

«No le puedo hablar igual a Varane que a Guille Rosas, por ejemplo. Porque son diferentes. Al llegar a Varane igual le saludo en francés y a Guille le hago una broma. A cada uno le hablo distinto porque cada uno es diferente. También para ello es importante conocerles mejor y conocer sus emociones»

«Deberíamos evaluar lo que depende exclusivamente de nosotros. Cosas medibles que pueden llevarte al aprendizaje y el crecimiento, pero el resultado no depende sólo de uno. Si un delantero no marca gol sólo nos centramos en eso y generamos ese estrés en él en base al resultado. Seguimos poniendo el foco en que Djuka no marca gol, y seguiremos diciéndolo todos. Claro que él quiere hacer goles. Todos quieren hacer goles. Pero a Djuka hay que medirle por las cosas que dependen exclusivamente de él, hay un montón de factores en el juego que no dependen de Djuka. Yo, como líder, tengo que evaluar lo que es medible. Vale para un entrenador, un profesor o un padre»

«Mi mentalidad para gestionar la frustración se basa en una frase que aplico como lema de vida: espérate lo mejor, prepárate para lo peor y acepta lo que venga»

«Yo soy un poco 4x4, como los coches. Voy a cualquier terreno. Fui muy feliz en Qatar, hice muchos amigos y tengo contacto con ellos. En Ecuador fui campeón con todo lo que eso supone, pero mi año más feliz allí fue como encargado del fútbol base, fue muy especial, era como el padre de todos los niños de allí. En Brasil, a pesar de las dificultades también me gustó, viví una presión muy, muy fuerte, mucho más grande que la de aquí, pero aprendí. En EEUU pude vivir en un país distinto y una cultura nueva para mí y también disfruté un montón. Pero te reconozco que aquí estoy muy, muy, muy, muy, muy feliz. Muy a gusto»