El pretendiente serbio acepta las condiciones rojiblancas
29 jun 2023 . Actualizado a las 18:03 h.Nuevo capítulo en la operación salida de Uros Milovanovic. Después de que el futbolista decidiera mantener congelada la posibilidad de salir en calidad de cedido hacia el SK Beveren tras el acuerdo alcanzado entre los clubes, la dirección deportiva del Real Sporting de Gijón mantuvo abiertas otras opciones como la del TSC Backa Topola, club perteneciente al país natal del delantero. Según avanza La Nueva España y ha podido confirmar este medio, el club serbio habría mejorado su oferta para cumplir con las condiciones propuestas por el Sporting, acercádose a cerrar un acuerdo.
El club rojiblanco ya había alcanzado un acuerdo previamente con el Beveren, con el cual buscaban prioritariamente recuperar lo invertido en el delantero el verano pasado. El conjunto de la segunda división belga había aceptado abonar el 100% del salario del jugador, realizar un pago asegurado por la operación para compensar en buena medida la amortización de su fichaje que le corresponde pagar a los asturianos esta temporada, como ya se hizo el pasado verano con la cesión de Fran Villalba al Málaga, incluir una opción de compra para su nueva escuadra y, en caso de adquisición, el Sporting mantendría un porcentaje sobre una posterior venta, una fórmula que también viene siendo habitual en anteriores ventas bajo la nueva gestión de Mareo, como sucedió en los casos de Manu García o José Gragera.
Las cifras de la operación contemplarían un pago fijo de unos 50.000 euros para cubrir parte importante de la amortización y una opción de compra por unos 400.000 euros. Además, existiría una cláusula de recompra a futuro. Condiciones que marcan el futurible acuerdo con el Topola serbio, que se mostró especialmente duro al negociar las condiciones del pago inmediato por la cesión. El delantero centro, de 22 años, tiene 2 temporadas más de contrato en tierras asturianas, además de un tercero opcional.
Una cesión que vuelve a dar un giro importante de guion, pues tan sólo faltaba el sí de Milo para terminar de cerrar la operación hacia tierras belgas, opción que el propio futbolista mantuvo a la espera consciente de que había opciones más atractivas para él en lo futbolístico. Un TSC Topola que disputará la fase previa de la Champions League al finalizar el curso liguero en segunda posición.
Milo había sido ofrecido en diferentes mercados para sondear intereses que pudieran existir sobre su cesión, teniendo además de las opciones en su país natal, otras posibilidades que nunca llegaron a avanzar lo suficiente, como el caso del Boavista de Portugal.
El delantero no tuvo el protagonismo deseado, especialmente en el tramo final de la temporada en el que no entró en los planes del cuerpo técnico de Miguel Ángel Ramírez, llegando a ver hasta los 11 últimos partidos al completo desde el banquillo de forma consecutiva. Su salida ha contado con el visto bueno de todas las partes desde un inicio, y ya parece cerca de cristalizar antes del comienzo de los entrenamientos del primer equipo la próxima semana.