Gaspar tira abajo la puerta para ser el primer «fichaje» del Sporting en verano

A.V.M.

SPORTING 1905

Gaspar Campos
Gaspar Campos Real Sporting

El extremo ya suma 4 goles en Burgos

06 dic 2022 . Actualizado a las 23:05 h.

Gaspar Campos sigue progresando adecuadamente en su cesión en Burgos, donde está ofreciendo un rendimiento superior al de los propios extremos del Real Sporting de Gijón. 

El gijonés logró ayer otras dos dianas ante la Ponferradina de David Gallego, una de ellas anuladas, y ya acumula 4 goles en su casillero particular en unos 800 minutos de juego con el hasta ahora conjunto revelación de la categoría de plata. Gaspar ha jugado como extremo por ambos costados e incluso como mediapunta, aunque donde más continuidad está teniendo es desde el flanco izquierdo.

La calidad técnica del jugador nunca se puso en duda en la SAD, y tal como se contó en La Voz de Asturias, su cesión tenía un objetivo claro, liberarse mentalmente y demostrar en el estadio todas las cualidades que enseñaba en los entrenamientos de Mareo a sus compañeros y entrenadores rojiblancos. Por ahora lo está logrando y en julio regresará a la pretemporada sportinguista.

Gaspar cuida la parcela mental con especial atención desde 2020, justo el año en el que debutó con el primer equipo. El canterano charlaba todas las semanas con diferentes profesionales de esta área del club, como Emi González Nosti -ahora empleado de la Federación Española-.

Semanas atrás, el propio protagonista lo confirmaba y explicaba en los Deportes de Cope Asturias:

“No tengo ningún problema en reconocerlo. Se nota, yo creo. El primer partido que jugué con el Burgos, salí a jugar y parecía que pesaba 20 kilos menos. Era una sensación que llevaba mucho tiempo sin tener. Disfrutar de salir a un campo. Salía con muchísima presión encima a jugar con el Sporting. Eso se trabaja y seguro que el año que viene voy a mejor. Estando fuera de casa, jugando en otro equipo... Le das menos importancia a la presión de un equipo o un escudo.”

“Solo jugué en el Sporting desde los nueve años. Siempre quieres llegar al primer equipo, pero luego cuando llegas y estás tiempo, el escudo pesa más que otra cosa.”

"El objetivo era liberarme mentalmente y también futbolísticamente. Quería volver a la versión buena de la temporada pasada, de los primeros meses. El año pasado fuimos de capa caída todos y yo incluido. Demasiado bajón en mí."

"Estaba atascado, no estaba a gusto. No conseguía tener confianza en mí mismo en acciones de uno contra uno, no tiraba a puerta, no llegaba al área. Creo que estaba atascado y más luego cuando se me informa de una posible cesión. Es difícil no pensar en ello y yo ya pensaba en qué opciones tenía. Al final decidimos que saliera cedido y no me arrepiento para nada. Estoy muy feliz en Burgos, la temporada está yendo muy bien.”

"Era simplemente tener un cambio de aires. No más que eso. Cambiar de ciudad, ver otro estadio... Soltarme mentalmente y disfrutar del fútbol, que al final es como se consiguen las cosas."

“También vengo a Burgos a soltarme emocionalmente, mentalmente, coger confianza y volver con más fuerza y ya habiendo aprendido a darle menos importancia al fútbol. Le damos mucha importancia y hay muchas cosas más importantes. Te puede salir mejor o peor un partido de fútbol y yo el año pasado me lo llevaba mucho más a lo personal, lo que me acabó afectando dentro del campo.”

"Hablo casi todos los días con compañeros del vestuario del Sporting, que en verdad son mis amigos. Es imposible no seguir en contacto. Y del club sí he recibido mensajes de Gerardo y de David Guerra. Sobre todo cuando marqué el otro día. Se lo dije a ellos que es un detalle. Es importante notar ese apoyo desde el club. Que no se olvidan de mí."