Por normativa al respecto de extracomunitarios
23 jun 2022 . Actualizado a las 09:20 h.Hay muchas ventajas que se extraen derivadas de formar parte de un conglomerado empresarial intercontinental, cuestión que atañe al Real Sporting de Gijón en el momento en que se oficialice la compra del principal paquete accionarial por parte del mexicano Grupo Orlegi. Una de estas situaciones provechosas se encuentra en la posibilidad de compartir información entre todas las partes, teniendo acceso y capacidad para llegar a más puntos en el planeta en cuestión de ojeo y conocimiento de ligas y estructuras sin el desembolso que supondría para un club por sí mismo. Sin embargo, también en este sentido, otra gran ventaja es la de poder intercambiar jugadores para elevar el nivel competitivo de los equipos del grupo.
El que puedan llegar futbolistas mexicanos procedentes de Santos Laguna o Atlas, equipos propiedad del Grupo Orlegi, al Sporting es una opción real. Sin embargo, existen ciertas normativas que impiden el libre flujo de estos intercambios. La normativa de la Real Federación Española de Fútbol en su disposición tercera, que aplica a los clubes de La Liga de Fútbol Profesional, es clara al respecto: "Los clubs de Primera y Segunda División podrán obtener hasta un máximo de veinticinco licencias de futbolistas en su primer equipo. En la primera de dichas categorías podrán inscribirse, formando parte de la referida plantilla, hasta tres jugadores extranjeros no comunitarios y, en la segunda, hasta dos; pudiendo, en ambos casos, alinearse simultáneamente".
Esto plantea un nuevo interrogante: ¿A quiénes se les considera futbolistas extracomunitarios? La Ley Bosman, de 1995, cambió el paradigma en este sentido, cuando el fútbol era mucho más restringido en la inscripción de jugadores con nacionalidad extranjera. Básicamente, por reducir diferentes procesos en los últimos años, todo futbolista con pasaporte de la Unión Europea es considerado comunitario. Además, existen diferentes asteriscos a la norma: Hay países que no están dentro de la Unión que son aceptados como comunitarios en estos términos, cuestión que aplica por ejemplo a Serbia o Montenegro y que regulariza la situación de Uros Djurdjevic en el Sporting como comunitario, además, acuerdos previos de índole comercial también facilitan estas labores, pues los acuerdos de Cotonou hicieron que muchos futbolistas de numerosos países africanos sean considerados comunitarios, aliviando así las restricciones.
El principal problema, por tanto, proviene del continente americano y asiático. Para estos futbolistas, solo cabe la posibilidad de convertirse en comunitarios si obtienen la doble nacionalidad, para lo cual, jugadores que llegan de países de latinoamérica lo tienen más sencillo, teniendo que residir durante dos años en España o bien teniendo algún vínculo familiar directo con personas con nacionalidad europea. Esto incluye a los futbolistas mexicanos, que mientras no tengan la doble nacionalidad, contarán a todos los efectos como extracomunitarios y el Sporting solo podrá incluir a 2 en su lista de 25 jugadores a inscribir en el primer equipo. La temporada pasada, a modo de ejemplo, los dos futbolistas que cubrían estas plazas dentro de los futbolistas inscritos en la primera plantilla fueron Eric Ramírez y Puma Rodríguez, ambos ya fuera del club.
El caso de Denilson Mena
El cierre del último párrafo no es insignificante. Sonado fue el caso del Real Madrid, fichando a jugadores como Rodrygo o Vinícius por más de 40 millones de euros e inscribiéndolos en su filial, el Real Madrid Castilla. Esta fue la manera para evitar incumplir la norma, que en su caso en Primera División permite hasta 3 jugadores extracomunitarios inscritos. En 2019 el club contaba con Keylor Navas, Casemiro y Valverde como extracomunitarios, con lo que ninguno de los extremos brasileños tenía cabida en el primer equipo, llegando a jugar partidos en la Segunda División B. Sin embargo, sí fueron convocados y sumaron minutos con el primer equipo cuando alguno de los 3 inscritos no estaba en la convocatoria. Esto es lo que podría ocurrir en un hipotético caso con el futbolista Denilson Mena, aún edad juvenil en la cantera del Sporting y que cuenta con pasaporte colombiano.