No se piensa en una destitución
08 feb 2022 . Actualizado a las 22:59 h.Después de atravesar un mercado invernal de especial relevancia, sobre todo para las arcas del Real Sporting de Gijón, la planificación a futuro de la entidad rojiblanca pasa por la gestión de las renovaciones de cara al próximo curso.
El Club ha realizado una apuesta importante este mes de enero con la contratación de tres futbolistas, con el nombre de Jony como principal inversión. Movimientos en busca de reforzar la plantilla a disposición de David Gallego con el objetivo de revertir lo antes posible la nefasta dinámica de resultados de los últimos meses y la situación clasificatoria del conjunto asturiano, que se encuentra muy lejos del objetivo marcado desde la propia entidad el pasado verano.
Todo se resolvió en las últimas horas del mercado, pero en el encaje presupuestario para traer a Jony de vuelta, así como los refuerzos de Jordi Calavera y Eric Ramírez, apuestas directas de Javi Rico, han venido a remarcar la confianza de la propiedad en la figura del director deportivo. Solo a partir de este vínculo se pueden entender las tan relevantes apuestas realizadas, a pesar de que sobre el papel se apunta a una campaña de transición por la notable distancia con la promoción de ascenso. Por ejemplo, en una situación similar, Miguel Torrecilla solo pudo sellar la cesión de Murilo a un bajo coste semanas antes de abandonar la escuadra asturiana en favor del propio Javi Rico.
Bien es cierto que no ha sido un camino fácil hasta aquí. Después de un mercado de verano donde quedaron algunas posiciones por reforzar, la dirección deportiva continuó trabajando de cara a un mes de enero que se antojaba clave, con sus contrataciones bajo lupa. En este contexto, la relación de Javi Rico y del que él mismo denominaría como su "mano derecha" Noé Calleja ha vivido sus altibajos, con las discrepancias habituales que puede haber en un cargo de responsabilidad. Según varias fuentes consultadas, ambos siguen trabajando con normalidad y con vistas al futuro.
Sin embargo, el hermano de Noé, Javi Calleja, se despedía este fin de semana en Mareo al no poder continuar con su cargo como preparador de porteros de los equipos juveniles del Sporting, alegando una incompatibilidad horaria con su trabajo. Un motivo personal, y no de desconfianza, ha hecho que el técnico abandone la entidad.
De todo ello se deriva que, dentro de la normalidad en la secretaría técnica rojiblanca, Rico no haya pedido el cese de Calleja, al igual que desde el club, con el beneplácito de Javier Fernández sobre la figura del director deportivo, no se plantean ninguna destitución ni movimiento en estos momentos en las oficinas de Mareo. Después de la apuesta realizada en enero, ahora se cuenta con un margen de tiempo suficiente para revaluar la situación en base a la dinámica que tome el equipo en los próximos compromisos ligueros. Rico, que tiene contrato hasta junio de 2023, tiene por delante los meses clave de la temporada antes de conocer el futuro inmediato del Sporting de cara a su planificación.
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