Los asturianos siguen con su mala dinámica
13 nov 2021 . Actualizado a las 00:50 h.Era el día. El día para ver debutantes, para las caras nuevas -por obligación- y para obtener la victoria que cortase de raíz la vorágine de malos resultados en la que estaba inmiscuido el Real Sporting de Gijón. Y la cita cumplió con todos estos requisitos salvo el más importante, el último. Los de David Gallego cayeron ante el filial donostiarra en un encuentro con alternativas -esperadas, por otra parte- para dos equipos que querían mandar desde el control del esférico, pero donde los de Xabi Alonso lograron imponerse en los momentos clave.
Hasta 4 cambios en la foto inicial del Sporting por las numerosas bajas fruto de las convocatorias internacionales y las lesiones, que dificultaban la elección de Gallego especialmente en la parcela ofensiva. El de Súria apostó por caras conocidas, sin que ninguno de los 7 futbolistas con ficha del filial convocados -sin contar a un Pablo García que a todos los efectos trabaja con el primer equipo- arrancaran el partido sobre el verde. Así se dio la primera titularidad de Christian Rivera como sportinguista, además de la inclusión de Nacho Méndez y Berto como principales novedades junto a un Marc Valiente que recuperaba su sitio al lado de Babin en detrimento de Berrocal.
El partido comenzó con ambos proponiendo un fútbol similar, de gusto por la tenencia del balón, aunque con el paso de los minutos fue aumentando el porcentaje de pelota que pertenecía a los visitantes, que se acercarían primero con peligro a las inmediaciones de Mariño en dos acciones similares, de centro lateral, una en jugada y otra a balón parado. Primero Sangalli remataría fuera por poco totalmente solo en la frontal del área pequeña, mientras que en la segunda, de nuevo desde la banda derecha rojiblanca, Martón no llegaría a dirigir un remate forzado en la misma zona. Ya superado el cuarto de hora llegaría una nueva ocasión para el Sanse, tras una gran combinación en área visitante que terminaría con Mariño salvando el remate de Navarro, que terminaría encontrándose con el larguero. Arrancaba muy frío el Sporting.
A partir de entonces el Sporting comenzó a crecer, y es que tampoco le quedaba otra. El dominio de balón iría decantándose progresivamente en favor de los locales, aunque de inicio les costaría superar la buena presión planteada por los donostiarras con un ritmo de circulación muy bajo. Esto no impidió que los locales fueran carburando y empujando al Sanse a su propia mitad de terreno. Fue en un ataque vertical, ya con un Sporting mejorado, que un gran pase de Pedro encontró el desmarque al espacio de Berto, que tras escorarse para evitar la marca rival remató centrado ante el meta blanquiazul, que bloqueó su chut. Fue la única ocasión clara rojiblanca del primer acto, pero los asturianos llegarían mejor al descanso con el 0-0 aún campeando en el marcador.
Arrancaba sin cambios el segundo tiempo, aunque en la dinámica del partido las fuerzas se equilibraban. El filial donostiarra comenzaba a tener algo más de balón que en los minutos previos, aunque también sumaban alguna pérdida comprometida que abría opciones al Sporting al contragolpe. Sin embargo, el tiempo pasaría sin que florecieran las ocasiones mientras la pelota iba perteneciendo cada vez más, como ocurriera en el inicio del encuentro, a los de Xabi Alonso.
Fue en esta mejor versión de los visitantes con la que llegó la primera ocasión tras el paso por vestuarios, cerca de la hora de partido. La Real elaboró una jugada desde atrás en la que lograría avanzar por derecha y enviar un gran balón al espacio al desmarque de Martón, que haría estirarse a Mariño que sacó una buena mano abajo. Avisaban los donostiarras.
Instantes después, ese aviso se convertiría en realidad. De nuevo con un desmarque a la espalda, esta vez de dos jugadores blanquiazules, encontrarían con un preciso envío largo de Blasco el espacio para la incorporación de Olasagasti, que solo ante Mariño y con un Bogdan que no logró frenar su avance, definió con comodidad para abrir el marcador en favor de los visitantes. Brazos cruzados y de nuevo los fantasmas de la mala racha actual haciendo acto de presencia.
Comenzaría a mover el banquillo Gallego apostando por juntar a Kravets y Pablo García en banda izquierda con el canterano por delante del ucraniano. El cambio tuvo su efecto en la primera jugada que intervino, pues tras una combinación por ese sector, Villalba lograría entrar en el área y poner un balón al área pequeña que Berto remataría en pugna con uno de los centrales blanquiazules y forzó la intervención de un Marrero que salvaría a los suyos bajo palos.
Ya con el marcador en contra, y con el debut de dos canteranos como César y Santamaría, el Sporting comenzó a tener más el balón acercándose al área rival, especialmente ganando línea de fondo por ambos costados y con pases atrás a los que solo les faltó más acierto para elevar el empate al marcador. Especialmente claro fue un remate de Pablo García con su pierna no dominante que salvó un defensor cerca de la línea de gol.
Seguiría el Sporting apretando hasta el final en unos últimos minutos que dieron para un debut más, el de Álex Oyón. Sin embargo, los locales fueron incapaces de hacer el gol, a pesar de sumar una nueva ocasión clara en botas de César, que también tuvo que emplear su pierna no dominante para acabar la acción sin éxito. Los visitantes pedían la hora, pero resistieron ante un Sporting sin gol y con largos tramos superado en juego. De nuevo una versión desmejorada en una derrota ya por desgracia habitual en un mes negro para los asturianos.
Alineaciones del partido
Real Sporting: Mariño; Bogdan, Babin, Valiente, Pablo García (Oyón, 85'); Rivera (César, 76'), Pedro; Nacho Méndez, Villalba, Aitor (Kravets, 62'); Berto (Santamaría, 76').
Real Sociedad 'B': Marrero; Blasco, Larrañaga, Pacheco; Alkain, Sangalli, Olasagasti, Martín; Roberto López Maguna (81'), Navarro (Aldasoro, 67'), Martón (Garrido, 81').
Amonestaciones: Babin (34'), Villalba (91') | Sangalli (80').
Goles: 0-1, Olasagasti (63').
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