La entidad rojiblanca no entiende la falta de un criterio unificado
09 dic 2019 . Actualizado a las 18:03 h.La victoria del Real Sporting de Gijón sobre la Ponferradina no ha evitado que el VAR vuelva a ser objeto de crítica en el club asturiano.
Dejando a un lado las teorías de la conspiración, más habituales del puente aéreo entre Madrid y Barcelona, en Mareo preocupa la evidente y alarmante falta de un criterio común para el uso de la nueva herramienta arbitral. Este fin de semana se pudo observar una clara mano en el área de la Ponferradina que rápidamente fue descartada desde la sala VOR, una acción que ha colmado la paciencia sportinguista, puesto que, siendo cierto que el balón no generaba una ocasión manifiesta de gol y que el zaguero se encuentra el cuero en medio de un fallido intento de despeje, la misma situación supuso semanas atrás un penalti por mano de Borja López que restó 2 puntos al Sporting en su partido contra el Deportivo.
Otra jugada polémica se encuentra en la agresión de Francisco Javier Hidalgo Gómez "Son" sobre Manu García. Por ejemplo, en la jornada 1 Damián Pérez fue expulsado por una entrada más fuerte de lo habitual, pero bajo la clara intención de recuperar el cuero, hasta el punto de que en primera instancia no vio la tarjeta roja. Por contra, el futbolista de la Ponferradina se desentiende del balón y busca el contacto directo mediante un codazo desmedido.
Precisamente esas duras acciones sobre Manu García son otro de los motivos de enfado en el Sporting, donde no se comprende la falta de protección arbitral ante las agresivas entradas que recibe y que no suelen verse transformadas en tarjetas para el rival.
Desde el club se entiende como un avance la llegada de la herramienta a la categoría de plata, pero preocupa su mala utilización y la constante "falta de suerte" a la hora de juzgarse sus acciones. A escasos partidos de finalizar la primera vuelta, los sportinguistas todavía no han podido probar fortuna desde el punto de penalti a pesar de que se acumulan varias jugadas para la polémica en el área contraria.