El técnico asturiano ha sido sustituido en el primer equipo y ha querido expresar ante los medios de comunicación su visión al respecto
17 jun 2019 . Actualizado a las 15:44 h."Desde el momento en que se surgen los primeros rumores sobre la decisión de que Rubén Biempica deje de ser el responsable de la preparación del primer equipo del Real Sporting de Gijón, y por tanto dejar de pertenecer al cuerpo técnico liderado por José Alberto López, he recibido varias llamadas de teléfono de diferentes medios de comunicación interesados en recabar más información sobre el asunto y pulsar mis opiniones y sentimientos. Es lógico. Las preguntas siempre son las mismas: "¿Es eso cierto? ¿Cómo y cuándo te enteras de la decisión? ¿Cuál o cuáles son los motivos? ¿Te ha sorprendido? ¿Cómo te encuentras?..." En todos los casos he tratado de ser cauto en mis respuestas: por encima de las personas debe de quedar el Club, al que no quiero perjudicar. Por otra parte creo que me es lícito mostrarme sincero y ser digno conmigo mismo y hacer un alegato: por dignidad personal y profesional. Creo que vuelve a ser lógico. He tenido unos días para asimilar la situación y reflexionar sobre el asunto. Quiero que este escrito sirva para dejar claras ciertas cuestiones y dar al menos una primera respuesta a varias de aquellas preguntas: a las que considero más relevantes o más me preocupa encontrar respuesta. Con el tiempo corresponderá responder más en detalle a todo, quizás tanto de forma pública como, eso sí, seguro, fundamentalmente de forma interna (es decir, dentro del propio Club).
¿Que cómo me encuentro? Es normal: fastidiado y en parte sorprendido. De nuevo creo que se entenderá que vuelvan a ser respuestas lógicas. Fastidiado, porque no soy de piedra. Sorprendido, porque no me lo esperaba después de haber pertenecido estos tres últimos años a este cuerpo técnico del que ahora se me desliga (pero digo sólo en parte porque con el paso del tiempo, y más en el mundo del fútbol, mi capacidad de asombro cada vez se ve más reducida). Reconozco que ha sido una temporada culminada con un fracaso para el primer equipo de nuestro Club: no se han conseguido los objetivos propuestos. Hace unos días reflexionaba con mis compañeros de fatiga de estos últimos meses (algunos de ellos lo recordarán) y les decía: "ha sido una mala temporada: alguien al final de la misma lo va a pagar"; ahora tengo la sensación de que he sido uno de los elegidos.
Sobre los motivos que han llevado a tomar esta decisión a mi no me compete responder. Al respecto sólo puedo (y creo que debo, por dignidad personal y profesional) de nuevo hacer un alegato a mi favor, aludiendo a mi honestidad profesional y compromiso con mi trabajo y el cargo que representaba (los que me conocen lo saben). Tampoco voy a permitir que cualquiera juzgue y/o califique mi trabajo. En mi vida ya he sido muchas veces examinado por gente con competencia demostrada para ello: soy Licenciado en Educación Física con maestrías en Atletismo y Fútbol (calificado en esta última materia con Matrícula de Honor), Doctor en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte (mi tesis fue calificada Cum Laude por unanimidad) y poseo un título de Máster Universitario de Preparación Física en Fútbol. Así mismo, allá por el año 1989 obtuve el número uno en el concurso oposición para el ingreso en el cuerpo de Profesores Agregados de Bachillerato para la asignatura de Educación Física. Mi experiencia profesional es dilatada, he pasado por todas las categorías del fútbol en este Club (desde benjamines hasta la primera división), son más de 15 años prestando mis servicios en el mismo, y de nuevo quienes me conocen saben de mi grado de implicación y compromiso. Además los éxitos del Sporting B de estos últimos años están ahí, éxitos tanto a nivel de resultados de equipo como de promoción de futbolistas (aspecto ésta más importante, pues no olvidemos que los activos del Club son sus futbolistas).
No quiero terminar este escrito sin pasar la oportunidad de dar las gracias públicamente a quienes durante todos estos días me han reconfortado el espíritu con sus llamadas de apoyo, que se agradecen enormemente: amigos, compañeros, excompañeros y futbolistas, a algunos de los cuales conozco desde hace pocos meses. Al final lo más importante que tenemos en la vida es nuestro tiempo, y me enorgullece haberlo empleado en conocer a gente maravillosa tanto humana como profesionalmente.
Dar igualmente las gracias a todos los que en estos últimos meses han compartido esta experiencia conmigo (auxiliares, futbolistas, trabajadores del Club...) para los que sólo tengo palabras de elogio y de agradecimiento, y a los futbolistas del Sporting B de estos últimos años, sin los cuales no me hubiese resultado posible haber disfrutado de esta experiencia que ahora termina. Finalmente quiero compartir la siguiente reflexión: este Club es grande básicamente por tres motivos: su afición, sus modales, señorío y su historia. Defendámoslos y no los olvidemos. Muchas gracias a todos".