Las criticas acechan al exentrenador rojiblanco
23 dic 2018 . Actualizado a las 01:37 h.Paco Herrera regresó a la Segunda División española menos de 12 meses después de ser cesado por el Real Sporting de Gijón, pero tras llegar como un posible salvador de Las Palmas, donde había ascendido años antes a la categoría de oro, se está convirtiendo ahora en un lastre en forma de resultados.
El entorno canario ya cuestiona duramente su llegada, que no está siendo avalada por victorias hasta la fecha. Las Palmas, que partía como candidato al ascenso directo, todavía no conoce el sabor del triunfo con Herrera en el banquillo, pese a que ya acumula 5 jornadas al frente.
Esta tarde perdió en casa del Córdoba por 4-1, acumulando así una media de 4 goles encajados por partido como visitante, además de 14 goles en contra en total, por los 12 de Manolo Jiménez en 15 jornadas. Las siguientes fueron las declaraciones de Herrera en sala de prensa:
"No pienso tirar la toalla. La primera solución es seguir trabajando y corregir un montón de cosas. Se lo hemos puesto muy fácil a ellos y eso es muy duro".
"Todo se convierte en una contra. Hay que parar esa sangría. Quiero tener una idea definitiva de juego y conseguir esa seguridad que nos está faltando".
"Con la intención de ir a ganar el partido estamos teniendo problemas terribles atrás sin que el otro equipo sea mejor que nosotros. Hemos tenido más oportunidades de conseguir gol".