Riazor sigue en obras desde el comienzo del verano
15 ago 2018 . Actualizado a las 02:38 h.El Deportivo ha admitido, a través de su presidente, Tino Fernández, que tendrá «problemas para dar entradas» al Real Sporting de Gijón en el encuentro correspondiente a la cuarta jornada de LaLiga 1/2/3, que se disputará en el estadio Abanca-Riazor el fin de semana del 9 de septiembre.
El club pidió jugar las tres primeras jornadas a domicilio por las obras de la cubierta del estadio, que no estarán finalizadas para el partido con el Sporting, lo que limitará el aforo de Riazor, obligará a mover a algunos aficionados del Deportivo de localidad y reducirá el número de entradas que el conjunto coruñés facilitará al conjunto asturiano.
El dirigente ha abogado por «apretar» a los encargados de la obra porque también implica la sustitución de la iluminación y es necesario que eso esté listo para el partido con el Sporting.
«Para jugar, lo más importante es el terreno de juego y la iluminación. Hemos estirado todo lo que hemos pedido, pero hay que apretar. La relación es buena con el Ayuntamiento y con Arias (la constructora). Es un tema que tiene que estar y tendríamos que intentar que esté con el máximo aforo posible», declaró.
Añadió que el aforo «no va a estar disponible al cien por cien» y anunció que tendrá que «mover» a algunos abonados del Deportivo y que «también habrá problemas para dar entradas a la afición de Gijón».
Fernández precisó que «la actitud es fenomenal por todas las partes», en referencia a la empresa que ejecuta la obra y el Ayuntamiento, titular del estadio, pero insistió en que es necesario «apretar».