Derrota de los de Herrera ante un Reus que entendió mejor el partido
05 nov 2017 . Actualizado a las 17:55 h.Ni la lluvia, ni el tipo de partido deben ser excusa para reconocer que este Sporting no debe perder en casa de un Reus que pudo llevarse la victoria gracias a dos cosas: aprovechar su opción y adaptarse mejor a un encuentro marcado por la lluvia. Esto es Segunda División: detalles. Mal los gestionó Herrera, que tiene una fe tremenda en jugadores como Viguera o Castro. El primero es cierto que lo pelea todo, pero aporta poco. Al segundo ni está ni se le espera. Llegará un momento en que esa paciencia con ellos se agote.
No supo adaptarse el Sporting a lo que pedía un césped muy pesado. Exigía el duelo ser firme, y sobre todo ser listo. La de Reus es una derrota rara: los rojiblancos no hicieron un partido malo, sino equivocado. Ese es el resumen más claro en un sábado que descuelga ?al menos un poco- a los asturianos del ascenso directo.
El bueno: Álex Bergantiños
El único que hizo lo que fue pidiendo el partido. Cómodo en el barro, en la brega, en la lucha. Está en un punto de forma interesante y ayuda en todo lo que puede al equipo. Estuvo muy bien tanto con la pelota como sin ella y dio empaque en ciertos momentos. Con Sergio mucho más discreto, el gallego comandó al Sporting en la medular en una coyuntura distinta. Si hay que ir al choque, Bergantiños es el primero.
Es una buena noticia que Álex siga creciendo, sobre todo para los encuentros de fuera de casa como el de Reus, que habrá más. El jugador cedido por el Deportivo ya se sabe la lección de este tipo de batallas. Ahora falta que la aprendan los demás.
El feo: Canella
Completamente extraño su partido teniendo en cuenta que tampoco estuvo demasiado exigido. Algunos errores de bulto y muy poca presencia. Al Sporting le ha ido bien cuando ha sido capaz de abrir el campo pero esta vez la aportación de los laterales ha sido nula. Su nivel alto de forma parece haber decaído en su vuelta a la titularidad y su incidencia en el juego, por los motivos que sean, no ha sido la esperada.
El malo: Calavera
La defensa en general ha presentado más dudas que en semanas anteriores, pero el catalán no encuentra la continuidad. Después de dos encuentros con algo más de luz, volvió a bajar el pistón en Reus. Mal en ataque y flojo en defensa; su partido, similar al de Canella, también mostró muchos oscuros. En un equipo que vive de la profundidad, Calavera tiene que dar, ya sí o sí, un paso adelante.