Buen partido de los rojiblancos que empató en el 87 con gol de Isma Cerro
31 oct 2017 . Actualizado a las 18:07 h.Burgos CF y Sporting B se enfrentaban hoy en El Plantío, con la presencia de ojeadores del Watford de la Premier League en la grada, y la intención de abrir un pequeño hueco clasificatorio entre dos conjuntos que, hasta la fecha compartían puntuación, veinte puntos, puesto de play off por el ascenso y un comienzo de temporada prácticamente impecable, dejando sensaciones de solvencia y dominio en sus choques ligueros precedentes. Cuarto contra segundo, menos goleado contra máximo goleador: en definitiva, uno de los partidos más interesantes de la jornada de la división de bronce del fútbol español, en un escenario que destila fútbol por sus cuatro costados.
El partido comenzó eléctrico y aunque la primera fue del Burgos tras un disparo de Andrés que salió rozando el palo, Traver con un cabezazo por encima del larguero tras un córner puso el empate a ocasiones sin haber dado tiempo a los espectadores a asentarse en sus localidades.
No quiso sentirse el Sporting dominado e intentó llevar el peso desde el inicio, haciendo que el equipo local tuviera que multiplicarse para intentar dominar el balón y controlar el choque. El encuentro era intenso, de ida y vuelta, con dos equipos que querían ser protagonistas. Tras algunas embestidas de los locales Pablo pudo culminar tras un robo de balón pero la rápida llegada de Andrés impidió que el candasín finalizara con éxito la jugada.
Poco a poco el Burgos empezó a tomar los mandos del encuentro, con alguna ocasión y bastantes amagos, aunque los de José Alberto se mantenían firmes en defensa y rápidos en ataque cuando el balón caía en sus pies. El partido exigía máxima concentración y parecía dictar que el que la perdiera lo pagaría con un tanto en contra. El Sporting B ponía la pausa y la tranquilidad en el encuentro ante un Burgos que empezaba a sentir la ansiedad, en forma de pérdidas de balón, al ver escaparse el tiempo sin lograr perforar la portería de Dani Martín.
Con un Burgos más incisivo cuando logró contemporizar un partido de ida y vuelta en el que no se sentía cómodo y con un Sporting que fue de más a menos y que pasó por apuros en el tramo final de la primera mitad, aunque siempre atentos y peligrosos en la contra, los dos equipos consumieron la primera parte sin lograr perforar la portería de su rival, pese a acumular ambos ocasiones para hacerlo.
La segunda mitad comenzó con un Sporting mejor plantado en el terreno de juego y, por tanto, más dominante aunque con un Burgos que seguía sin perderle la cara al encuentro. Los locales ya sabían cómo dominar el encuentro y lo comenzaron a calmar, sin permitir que los rojiblancos buscaran su juego, más vertical y más eléctrico. Tal fue así que Youssef y Adrian tuvieron una doble oportunidad frente a la portería de Dani Martín que se solventó sin novedades para los interese rojiblancos.
El Burgos mandaba. Tras un enésimo corner concedido por la defensa rojiblanca Abel remataba en el área pequeña un balón que se colaba de no ser por la mediación de Dani Martín, que empezaba a tener más trabajo de lo que le gustaría. Por su parte, los rojiblancos
seguían siendo peligrosos a la contra, manteniendo inquieta a la parroquia burgalesa en botas de Pablo y Traver.
Pero en el minuto 62, el dominio burgalés se materializó en gol tras un penalti excesivamente riguroso de Carlos Cordero, que se llevó tarjeta amarilla por ello, sobre Adrián Hernández que el propio futbolista se encargó de materializar. Los locales habían conseguido el premio a una puesta en escena globalmente mejor, jugaban en casa, que la de los de José Alberto.
La respuesta del técnico asturiano fue inequívoca y Claudio entró en el terreno de juego para intentar equilibrar el marcador en sustitución de Bertín. El castigo del gol quizá había sido excesiva y José Alberto transmitió con el cambio que la posibilidad de no salir de vació de El Plantio era viable. El encuentro entró en un impase con el Sporting intentando reaccionar y el Burgos acomodándose en el terreno de juego. Cayarga lo intentaba y Patxi Salinas enfriaba el partido haciendo el último cambio del que disponía. Faltaban 10 minutos y nada estaba decidido, con el técnico rojiblanco quemando naves y sacando al pasto a otro delantero, Joel Sanabria, en lugar de Mateo Arellana. La suerte estaba echada.
La presión gijonesa logró meter al Burgos en su área y el fruto de ello fue el penalti de Beobide que Isma Cerro transformó en gol a poco menos de tres minutos para el final del choque. La justicia regresaba al electrónico de un Plantío enmudecido.
El Sporting no se conformó con el empate y siguió achuchando a un Burgos noqueado que ya se veía con los tres puntos en su casillero. El árbitro decretó tres minutos de descuento que fueron insuficientes para desnivelar el marcador, en un partido bonito y disputado que se decidió desde los once metros.
Alineaciones:
Sporting B: Dani, Adri Montoro, Cordero, Juan Rodríguez, Víctor Ruíz, Cristian, Isma Cerro, Mateo (Sanabria, min 80), Bertín (Claudio, min 77), Pablo, Traver (Cayarga, min 58)
Burgos C.F.: Saizar, Andrés, Zabaleta (Sergio Esteban, min 70), Rico, Borda, Cruz, Abel, David (Beobide, min 77), Al-Watani (Javi Cantero, min 57), Iker, Adrian
Árbitro: XABIER GÓMEZ LANDAZABAL del Comité Territorial Vasco, asistido en las bandas por RUBÉN CACHÓN LAFUENTE e IVÁN RODRÍGUEZ MARTÍN.
Goles:
1-0 Adrián Hdez (min 62 de penalti), 1-1 Isma Cerro (min 87 de penalti)