El Sporting reclama la expulsión de Mandi; crónica y video resumen del Córdoba 1 - Sporting 1

Fisherman

SPORTING 1905

10 dic 2012 . Actualizado a las 20:23 h.

-La entidad rojiblanca anuncia que ha tomado las medidas pertinentes para que Mandi pueda jugar el domingo a las 17:00 contra el Xerez, si así lo requiere Sandoval.

Las acciones giran sobre el acta arbitral, en el que se expone lo siguiente: "Armando Sosa Peña (Mandi) fue amonestado por el siguiente motivo: no respetar la distancia reglamentaria en la ejecución de un tiro libre". En base a esta descripción de los hechos el Sporting ha enviado unas imágenes en las que se trata de mostrar que Mandi intentaba retroceder y el rival lanzó el balón contra el centrocampista a mala fe, con la intención de que el arbitro se viese forzado a sacarle la tarjeta por molestar el saque del tiro libre.

-Parte medico del partido:

Cases con un esguince en el tobillo izquierdo.



CÓRDOBA: Alberto(1); Fernández(1), Gaspar(1), Kiko(1), Fuentes(1); López(1), Caballero(1); Pedro(2), Fede Vico(1), Dubarbier(2); y Renella(0)

SUSTITUCIONES: Pepe Díaz(1) por Vico, Abel(sc) por Pedro y Ayina(sc) por Caballero

SPORTING: Juan Pablo(1); Luis Hernández(0), Iván Hernández(0), Borja López(1), Canella(1); Nacho Cases(0), Mandi(1), Trejo(1); David(1), Sangoy(0) y Carmona(2)

SUSTITUCIONES: Bilic(0) por Cases, Barrera(0) por Sangoy y Lora(1) por Iván.

GOLES: 1-0 Pedro min 34. 1-1 Canella, min 83.

INCIDENCIAS: Arbitró Sureda Cuenca, del colegio balear.


Empate agónico del Sporting, con 9 hombres, ante un Córdoba que pudo sentenciar y al final lo pagó caro. Los de Sandoval volvieron a mostrarse como una caricatura de equipo, incapaces de imponerse a su rival y que sólo mostraron carácter cuando la situación era ya insostenible tras unos cambios del míster difíciles de entender. El Sporting finaliza la jornada a dos puntos del descenso y ya van 6 jornadas sin conocer la victoria.

El mal momento del Sporting convertía la visita a Córdoba en un partido vital para que los gijoneses se alejaran de la zona de peligro. Sandoval buscó la verticalidad con David y Sangoy en punta, con Trejo por detrás y Carmona caído hacia la izquierda. En defensa, Iván sustituía a Gregory y Cases y Mandi volvían a formar pareja en el centro del campo. Los asturianos, completamente de rojo, comenzaron el partido con intensidad, presionando al Córdoba y buscando dar primero. Dos jugadas a balón parado en ambas áreas desataron las hostilidades, aunque el que realmente sacó su fusil fue el colegiado Sureda Cuenca, que al cuarto de hora ya había sacado 3 tarjetas amarillas totalmente injustificadas.

En ese momento el Córdoba había dado un paso hacia delante, aprovechándose de la debilidad del Sporting por las alas, con Canella y sobre todo Luis Hernández, superados por los flancos una y otra vez. en el centro del campo, solo Mandi resistía las acometidas blanquiverdes mientras Cases volvía a evidenciar su pésimo estado de forma, incapaz de dirigir y mucho menos de cortar juego. Las líneas, muy separadas suponían otro obstáculo más para un equipo que sufre tanto más con él balón que sin él. Sureda Cuenca echó un capote a los asturianos, expulsando a Rennella de forma rigurosa tras un rifi rafe con Borja que le costó la segunda amarilla. Como suele ser natural en árbitros de esta estirpe, la ley de la compensación no tardó en llegar y Mandi, fue el blanco fácil en una roja tan injusta como estúpida. De nuevo en igualdad, fue el Sporting quién más acusó el cambio de piezas, entrando Barrera por Sangoy para reforzar el centro del campo.

Desde ese momento los de Sandoval desaparecieron del campo, dejando metros al Córdoba, que sin prácticar un buen fútbol, apretaba las tuercas de un equipo sin carácter y poco respondón ante las dificultades. Un saque de esquina evidenció todas las penurias de los gijoneses, pasando por una salida a por uvas de Juan Pablo y una pasividad defensiva total qwue permitió hasta tres remates de los cordobeses en plena área pequeña, que desembocaron en el gol de Pedro tras remachar un rechace del larguero. Eran los peores minutos del Sporting, totalmente vulnerable en todos los ámbitos, sin salida del balón y con los delanteros convertidos en islotes a la espera de una oportunidad que solo David tuvo al borde del descanso con un remate que se fue a las nubes.

Bilic ingresó por Cases tras el descanso, volviendo Sandoval a acumular efectivos arriba pero penalizando a Trejo, reconvertido en medio centro con Barrera. El desgobierno era evidente y por mucha pólvora que se amontonara, hacía falta una mecha que detonara los explosivos, algo inesperado dadas las imprecisiones de los asturianos. Un error en el pase de Iván obligó a Barrera a parar una contra del Córdoba, ganándose la segunda amarilla y dejando al Sporting con 9 jugadores. El Córdoba se sintió reforzasdo, encontrando muchos más espacios y recreándose por momentos, eludiendo la sentencia, error que pagaría al final. Lora sustituyó a un nefasto Iván Hernández y los asturianos pasaban a jugar con defensa de tres, jugándose el todo por el todo, con el equipo partido por la mitad. El árbitro aportaba lo suyo dando un recital de tarjetas encomiable para un partido de guante blanco.

El corazón derrochado por los futbolistas gijoneses acomplejó al Córdoba, incapaz de remachar el encuentro, sin recursos para superar a un equipo en inferioridad numérica y que poco a poco anunciaba peligro. Bilic buscó su momento de gloria, desaprovechando dos faltas peligrosas enviándolas al limbo. Con Trejo fuera de sitio, Carmona se erigió en el bastión rojiblanco en el reducto cordobés, tirando de un equipo sin rumbo que se movía por bandazos de supervivencia, sin hoja de ruta establecida. Así llegó el gol, tras un saque de banda a plenó pulmón que le cayó a Canella que sin dejarla caer alojó el balón en la meta de Alberto. Incredulidad en el Arcángel y un punto que dadas las circunstancias, sabía a gloria. Los rojiblancos no sabían si seguir apretando o guardar la ropa, lo que convirtió los últimos minutos en un correcalles en el que el cansancio y la inferioridad gijonesa, favorecía a los locales. Los blanquiverdes, atónitos por el resultado, intentaron recomponerse lanzando balones al área, donde Juan Pablo y la defensa se apretaron los machos mostrándose inexpugnables y salvando un punto que solo buscaron cuando la situación era de máxima exigencia y necesidad, tirando por la borda una hora de partido y manteniendo la racha de 6 partidos sin vencer que obliga a los asturianos a no perder de vista el pozo del descenso. 4 puntos de 18 y la semana que viene el Xerez, al que se recibirá con el centro del campo en cuadro, sin Mandi ni Barrera y con Nacho Cases siendo duda por un esguince de tobillo.

Sergio Pinto
@dikembe