La victoria de Nigeria ante Islandia reaviva a la Albiceleste pero no acalla las críticas desde todos los frentes, incluso de parte del Cholo Simeone
23 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Argentina se acostó el jueves con dolor y rabia después de la decepcionante y sonrojante derrota frente a Croacia que ponía a la Albiceleste al borde de la eliminación. Los futbolistas abandonaron el estadio agrupados y mayormente mudos, al tiempo que en su país atronaban ya las críticas, más ácidas y duras con Sampaoli y con la estrella del equipo, Messi, a quien apenas se ha visto todavía en el Mundial.
Argentina amaneció el viernes rezando a Nigeria porque una eventual victoria africana frente a Islandia le permitiría llegar a la última jornada con mucha vida. Y así sucedió. A pesar de los pesares, los octavos de final están al alcance de la mano. Pero las matemáticas no acallan ni el malestar de la afición ni las dudas que suscita el colectivo.
Tras la debacle frente a Croacia, uno de los primeros en saltar a la palestra, a través de la redes sociales, fue Oswaldo Ardiles, campeón del mundo en el 78. Cargó contra el seleccionador: «Sampaoli es un arrogante y un ignorante. Con el mejor jugador del mundo no fue capaz de conformar un equipo competitivo».
Héctor Enrique, campeón en el 86, apuntó a los futbolistas: «¿Quien carajo es Messi para no correr?». Y abundó en su reflexión: «Le echamos siempre la culpa a los técnicos, Batista, Martino, Bauza... ¿Y los jugadores?».
El error de Caballero que propició el primer gol de Croacia no fue pasado por alto por Fillol, campeón del mundo en el 78: «El arquero tiene que saber jugar con las manos, antes que nada, porque está para atajar».
Pero quizás las reflexiones más aceradas fueron las que acabaron saliendo a la luz pública pese a que no era ese el propósito, por el contenido y quien lo firma, Simeone. Estos son varios de los pasajes de los mensajes de whatsapp del técnico del Atlético de Madrid: «Lo que está pasando en estos momentos es lo que le pasó a la selección en estos cuatro años, desgraciadamente»; «Veo que el equipo está perdido»; «Messi es muy bueno, pero es muy bueno porque está acompañado de extraordinarios futbolistas. Si tenés que elegir entre Messi y Ronaldo para un equipo normal, ¿a quién elegirías?».
Y parece que no hay comunión entre el vestuario y el seleccionador. Le preguntaron a Agüero: «Dice Sampaoli que los jugadores no se adaptaron al proyecto, que el proyecto fracasó». Respuesta: «Que diga lo que quiera».
La soledad de Sampaoli, que está más en entredicho que nunca
Sampaoli forzó su salida del Sevilla cuando la Federación Argentina de Fútbol lo escogió para que se hiciese cargo de la selección. El sueño se está convirtiendo en pesadilla, aunque todavía puede alcanzar un final feliz. Sampaoli está en entredicho, tanto que durante unas horas cobró fuerza el rumor de que pudiese cesar y que Burruchaga se hiciese cargo del grupo, en la que sería una maniobra parecida a la de España con Lopetegui y Hierro. No fue el caso. Pero si pierde ante Nigeria, ese será, más que probablemente, su último partido con la Albiceleste.
Ganar, y por dos goles más que Islandia si también vencen los nórdicos
Las cuentas de Argentina se han simplificado. Ni siquiera depende de terceros. Pero necesita inexcusablemente la victoria ante Nigeria. Le basta siempre que Islandia no gane en su duelo con Croacia. Si ganan Islandia y Argentina, ambos sumarían cuatro puntos. El primer criterio de desempate es la diferencia entre goles a favor y en contra, que ahora mismo es de -2 y -3, respectivamente. En consecuencia Argentina necesitaría una mayor diferencia de goles en su triunfo. Si es de dos más que los nórdicos, pasa Argentina. Si es de solo uno más, empatarían. El siguiente criterio de desempate son las tarjetas. Y Argentina parte en desventaja, porque suma tres, por ninguna penalización su rival.