Se buscan perros y gatos en Asturias para ser fotografiados por una buena causa

Con esa sensibilidad única y esa mirada experta, la asturiana Alma González coloca su cámara frente al ojo, mientras el bullicio que la rodea se desvanece. Solo piensa en el encuadre. Sus dedos rozan con delicadeza el obturador, preparados para actuar en el instante exacto en que encuentre el punto perfecto. Entonces, pulsa el botón y, con un solo clic, logra plasmar la personalidad de los animales de compañía a través de su mirada y su lenguaje corporal.

Así es como esta ovetense captura la esencia y la magia de los peludos de cuatro patas, con el objeto de que sus propietarios conserven un recuerdo especial. Pero también lo hace, sobre todo, para que aquellos perros y gatos que han sido abandonados puedan tener una segunda oportunidad. Conocida artísticamente como Verde Bonito Blanco Polar, transforma su pasión en un apoyo real: con sus instantáneas recauda fondos para financiar iniciativas destinadas al rescate y cuidado de animales.

Para cumplir parte de este propósito, la fotógrafa busca perros, gatos o cualquier otro animal de compañía en Asturias para retratarlos y así contribuir a la creación de la nueva edición de Tails Of The World. Se trata de un libro solidario en el que figuran, principalmente, perros y gatos que han sido inmortalizados por fotógrafos de todo el mundo. La venta de estos ejemplares está destinada íntegramente a la protección animal.

Que este libro vea la luz depende en cierta medida del trabajo que realice Alma González. La ovetense debe realizar diez sesiones fotográficas para ayudar así a conformar el cuarto volumen de Tails Of The World. Hasta la fecha, solo ha podido completar la mitad de su misión, ya que todavía no ha encontrado a cinco animales de compañía cuyos propietarios quieran inmortalizar su esencia. Es por esta razón que está realizando un llamamiento para poder completar cuanto antes las cinco plazas que le quedan disponibles. Si algún lector de La Voz de Asturias tiene en su familia un peludo de cuatro patas y quiere formar parte de este proyecto solidario, tan solo debe rellenar el siguiente formulario.

Estas sesiones fotográficas se llevarán a cabo en lo que queda del mes de abril y durante los meses de junio, julio y agosto. Se realizarán tanto en horario de mañanas como de tardes, de cualquier día de la semana, en una zona exterior de Asturias. No obstante, en el caso de que haya algún animal que, por el motivo que sea, no pueda salir de casa o estar al aire libre, la toma de instantáneas se llevará a cabo en el domicilio de sus propietarios. «En el espacio dónde él se siente más seguro y cómodo», señala Alma.

De todas formas, la artista asturiana «siempre» busca aquellas localizaciones en el exterior que garanticen el bienestar del peludo de cuatro patas. «Todas mis sesiones de fotos son adaptadas a las necesidades de cada animal», resalta ovetense, quien es experta en retratar perros y gatos. Por tanto, «no hay de qué preocuparse». Cabe también señalar que si algún propietario a la hora de hacer las fotografías no quiere quitarle la correa a su perro por miedo a cómo actué o para evitar problemas «no es necesario» hacerlo.

El precio por participar en estas sesiones es de 60 euros. Todo lo recaudado va «íntegramente» a parar a las arcas de la Fundación Protectora de Animales de Asturias. «Gracias a las familias que participan ya les hemos donado 1.200 euros», asegura Alma, quien colabora de manera voluntaria con esta entidad desde hace tres años. La ovetense se encarga de hacer fotos a los perros y gatos que se alojan en sus centros para ayudarles a encontrar cuanto antes un nuevo hogar.

Al participar en estas mini sesiones no solo se contribuye a una buena causa, en este caso a mejorar la vida de los peludos albergados en el «único refugio privado» de Asturias que «se parece más a una guardería canina que a un albergue municipal». Como una de las instantáneas de cada reportaje fotográfico aparecerá «sí o sí» en Tails of The World 2025 también, en cierta manera, se coopera a financiar las iniciativas que lleva a cabo Geelong Animal Welfare Society. 

Todos los beneficios de la venta de esta obra internacional son destinados a esta organización sin ánimo de lucro, ubicada en Australia y que se dedica a velar por el bienestar de los animales de compañía. «Cuidan y re alojan a mascotas perdidas o abandonadas y brindan educación y servicios comunitarios que permiten la tenencia responsable de animales», explica Alma González. Pero, que tu animal de compañía figure en esta obra internacional, no quiere decir que vayas a tener un ejemplar del mismo. «El libro no está incluido en la donación», asegura la fotógrafa.

Quien desee tener en su poder un ejemplar de la nueva edición de Tails of The World 2025 deberá comprar la misma a partir del 1 de noviembre y haciendo previamente un desembolso de casi 70 euros. «Podrás escoger entre la edición de tapa dura o la de tapa blanda y el envío se realiza a todo el mundo», asegura la ovetense, antes de señalar que también existe la oportunidad de comprar fotografías de recuerdo. «Así tendrás obras de arte de tu sesión de fotos única», apunta.

Sobre la entidad con la que colabora con su talento

Corría el año 2015 cuando la reconocida fotógrafa Caitlin J. McColl decidió crear un grupo con otros profesionales para contribuir con sus trabajos al rescate animal. Fundó así Tails of The World Collective, una entidad a la que año tras año se suman artistas internacionales que quieren contribuir a «marcar la diferencia para los animales necesitados y celebrar el amor universal por ellos».

Cada año, este colectivo consigue recaudar miles de euros gracias a editar el libro solidario Tails of the World. «El 2024 fue nuestro año más grande hasta el momento. Logramos recaudar más de 75. 000 dólares con 855 perros, 80 fotógrafos y 16 países», aseguran desde la entidad que destina toda la colecta a organizaciones benéficas de animales. 

De casi el centenar de fotógrafos de animales de todo el mundo que contribuyen a la causa, la ovetense Alma González es, por el momento, la única profesional de nuestro país que un año más ha sido seleccionada para formar parte de la nueva edición de esta iniciativa benéfica. Ser representante nacional es para ella una «enorme alegría».

«Poder poner mi trabajo al servicio de una causa tan bonita y ver cómo las familias se suman con tanta generosidad me emociona », confiesa la artista asturiana, quien espera poder completar cuanto antes las cinco plazas disponibles para contribuir un año más al rescate de animales. «Por ahora todos los apuntados son perros, así que sería maravilloso si algún gatete se sumara, porque siguen siendo los grandes invisibles», manifiesta.

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