Sergio Dalma: «Me siento muy cómodo y muy a gusto cada vez que vengo a Oviedo»
LA VOZ DE OVIEDO
El carismático cantante llega a la capital del Principado dispuesto a hacer sonreír a todos los asturianos con sus nuevas canciones. El artista catalán dará este sábado un concierto en el Auditorio Príncipe Felipe dentro de su gira «Sonríe porque estás en la foto»
10 ene 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Lleva más de tres décadas sobre los escenarios y todavía sigue sonriendo. Con esa energía y vitalidad que tanto le caracterizan, Sergio Dalma (Sabadell, 1964) continúa además «estando en la foto». El cantante catalán sigue conquistando a nuevas generaciones, mientras mantiene a sus fans más fieles, gracias a su capacidad única para reinventarse y a crear música cargada de romanticismo y emoción. Sin perder su esencia ni carisma, el autor de Bailar pegados recalará este sábado, 11 de enero, en Oviedo para hacer sonreír a todos los asturianos con sus nuevas canciones.
Los éxitos que le han acompañado a lo largo de toda su carrera también estarán presentes en el concierto que dará en el Auditorio Príncipe Felipe. Enmarcado dentro de su nueva gira «Sonríe porque estás en la foto», el artista busca con esta actuación reencontrarse con aquellos sonidos de los años 80. Tratará además de contagiar al público esa positividad que tanto lo identifica. «No nos queda más remedio que ver la vida desde este ángulo», asegura.
—Ha colgado ya el cartel de «entradas agotadas», ¿qué siente al saber que el público asturiano sigue siendo fiel a Sergio Dalma?
—Mucha felicidad después de tantos años. También mucha responsabilidad, porque ahora lo que hay que hacer es que aquella gente que ha apostado por comprar una entrada salga contenta, satisfecha y crea que ha valido la pena.
—Ha actuado en muchas ciudades pero, ¿qué tiene Oviedo que lo hace especial para usted?
—Son muchos años ya que llevo viniendo a Oviedo y realmente siempre ha sido una cita un poco obligada. Siempre ha habido muy buena reacción por parte del público y creo que siempre nos hemos entendido muy bien. Y pues sí, me siento a gusto cada vez que vengo. Hemos estado en varios puntos de la ciudad, en varios escenarios, y siempre nos hemos sentido muy cómodos y hemos estado muy a gusto con la gente.
—Si tuviera que dedicar una canción a Oviedo, ¿cuál sería y por qué?
—Sería alguna de las clásicas. O Solo para ti o Bailar pegados porque en el fondo hemos estado pegados durante mucho tiempo y espero no despegarme de ese público que siempre ha reaccionado bien.
—¿Tiene alguna anécdota o recuerdo especial de otras visitas a Asturias?
—Recuerdo que una vez teníamos un concierto en una explanada, en un campo, y era pleno verano. Cuando llegamos me dijeron: «Oye, cuidado con la sidra que no va muy bien para la voz». Te puedo garantizar que aquel día canté como nunca y efectivamente la sidra, creo, que sí, que va bien para la voz.
—El nombre del nuevo disco, Sonríe porque estás en la foto, es toda una declaración de intenciones. Pero, ¿cómo mira Sergio Dalma realmente la vida?
—Bueno no nos queda más remedio que verla desde este ángulo, de una forma positiva. Y, sobre todo, al final que la música sea realmente terapéutica y ayude a sobrellevar el día a día.
—En los tiempos que corren hace falta ese positivismo…
—Totalmente. Pienso que Sonríe porqué estás en la foto da esa idea global de este disco. De que a través de las canciones, de la música, puedes ayudar a la gente a rehacer su vida y también ayudarles en el día a día.
—¿Qué le hace sonreír últimamente, tanto dentro como fuera de los escenarios?
—Si miras alrededor y las noticias poco te hacen sonreír ¿no? La pandemia nos enseñó a precisamente a disfrutar de aquellas cosas pequeñas, que normalmente nos pasaban desapercibidas en el día a día y al final son la base de la vida y las que realmente luego nos hacen sonreír.
—¿Cómo elige las canciones que forman parte de un concierto en una gira tan especial como esta?
—Cada vez es más complicado porque son ya unos cuantos discos y cada vez hacer el tracklist cuesta más. Pero, al final, de una gira a otra refrescas canciones que a lo mejor hace tiempo que no cantas y otras que evidentemente estás obligado a hacerlas porque tú necesitas hacerlas, porque son tu base y porque el público también las quiere escuchar. Lógicamente en esta gira le damos mucha importancia y prioridad a lo que sería el nuevo trabajo. Hacemos también un repaso por estos 35 años que evidentemente hay momentos de cierta nostalgia y momentos donde la gente ya no puede más y se pone de pie, baila y lo siente a tope. Al final lo que uno busca es esto, que un concierto se convierta en una fiesta.
—En el momento que ve que el público se levanta y conecta realmente con usted, ¿qué siente? Imagino que tiene que ser muy emocionante.
—Sí, totalmente. Es lo que te digo, nosotros intentamos que la gente cuando está allí, lo que dure el concierto, pues lo pase bien. Cuando notas que esa gente, además de todas las edades, lo disfruta y se levanta, sientes que realmente está a gusto y es como que el objetivo está cumplido. Al final cuando termino el concierto también quiero tener esa sensación de que he conseguido que la gente lo pasara bien, sino yo no me sentiría bien.
—Son ya más de tres décadas sobre los escenarios, ¿qué balance hace de todos estos años?
—Después de 35 años realmente me siento un poco un superviviente. Tal y como ha ido todo, ha ido cambiando la sociedad, con lo cual eso también hace cambiar la música, siento que realmente sigo disfrutando con lo que hago. Todo ha cambiado mucho, pero bueno, uno se tiene que ir amoldando y acomodando a las nuevas situaciones, pero realmente mientras hay ese público que quiera escucharme y que quiera seguirme pues tendrá sentido el que yo siga de gira.
—Cada vez hay más público joven que le sigue, que vibra también con sus canciones, digamos. ¿Qué siente al ver que hay ese relevo generacional?
—Yo nunca he pretendido llamar la atención o hacer una música para ese público joven, porque realmente sería antinatura. Yo tengo un público con el que hemos crecido juntos, desde que yo empecé. Pero, a raíz de aquellos padres o de hermanos mayores se ha sumado a ese público gente joven. Cuando ha sido así de una forma espontánea y natural, pues bienvenidos son. Es además muy gratificante cuando estás en el escenario y ves varias generaciones que lo disfrutan totalmente.
—¿Qué canción de todo su repertorio siente que sigue resonando con usted como el primer día?
—Hay muchas canciones de aquella primera etapa como sería Solo para ti, La vida empieza hoy, Galilea o Bailar pegados, que nunca he dejado de cantar y que la gente quiere escucharlas. También yo sería incapaz de bajar del escenario y no cantarlas. Son canciones que me han acompañado y espero que me acompañen hasta el último día.
—Después de Sonríe porque estás en la foto, ¿qué otros proyectos tiene en mente? ¿Está ya trabajando en algo?
—Sí, sí, estamos ya en un próximo proyecto. Nosotros terminamos la gira a finales de marzo en Argentina y luego nos tomamos unos pocos días de descanso porque ya empezamos en el nuevo proyecto. Seguramente, si todo va bien, habrá una gira en el 2026. Aunque da cosa hablar ya de 2026, va todo tan rápido que uno tiene que seguir esa pauta de velocidad.
—Digamos que el 2025 va a venir cargado de buenas noticias en cuanto a lo profesional se refiere.
—Sí, sí, vamos a terminar esta gira, que ha sido una gira muy larga. Y, evidentemente, seguiremos disfrutándola porque esa es la clave: disfrutar con el público.
—Imagino que también seguirá sonriendo.
—Eso siempre. Y hacer también sonreír a la gente y a la gente que tienes a tu alrededor.
—Por último, si pudiera dejar una fotografía de su trayectoria musical, ¿cómo le gustaría que se recordara su carrera artística?
—Creo que sonriendo, porque tanto a nivel personal como profesional, siempre he intentado llevar una sonrisa. Creo además que lo bueno de esto es contagiarla. Por eso me identifico tanto con este último trabajo.