Barbie se desinfla a favor de los disfraces de siempre: «Este año es un Carnaval normal, como los de antes de Netflix»

Cristina Centeno
C. Centeno REDACCIÓN

LA VOZ DE OVIEDO

Desfile de Carnaval en Oviedo el pasado 2023
Desfile de Carnaval en Oviedo el pasado 2023 Ayuntamiento de Oviedo

Las tiendas especializadas aguardan la llegada de compradores de última hora en un año que está siendo «raro» por las fechas tan tempranas en las que se celebra el Antroxu: «Mucha gente no es consciente, están acabando todavía de comer el turrón»

11 feb 2024 . Actualizado a las 09:25 h.

El fenómeno Barbie regresó con fuerza en el 2023 gracias a la película más taquillera del año, que devolvió la pasión por esta muñeca de Mattel a todas las generaciones. Camisetas, vestidos, pantalones, bolsos y un largo etcétera de ropa y complementos se tiñeron de rosa convirtiéndose en éxito de ventas. Por eso se pensaba que sería la gran estrella del Carnaval 2024, aunque finalmente no será así, al menos en Oviedo. El globo parece haberse desinflado y aunque hay quien reclama este disfraz, es un público minoritario.

Sin embargo, lo que están constatando las tiendas especializadas es la vuelta a los disfraces más tradicionales. En la capital asturiana, Patricia Santirso regenta El Toldo, con casi cuatro décadas de historia. Este año, cuenta, «no hay nada específico de moda» y Barbie se quedó por el camino, tanto que ella apenas tiene mercancía relacionada con la muñeca. 

Antroxu en Oviedo
Antroxu en Oviedo

«Este año estamos volviendo a un Carnaval más tradicional, como era antes de Netflix», asegura Santirso. Así, se venden disfraces clásicos como Caperucita y el lobo, animales para toda la familia o Alicia en el País de las Maravillas. Tampoco faltan grandes clásicos como Mario Bros y Luigi o Sonic, los personajes más demandados también en establecimientos como Juguettos, que estas semanas suman los disfraces a su oferta habitual. Miércoles y otros miembros de la familia Addams siguen siendo «muy recurrentes», al igual que el traje naranja de presidiario entre los adolescentes. 

Además, por las peculiaridades de la fecha en la que cae el Antroxu este año, los asturianos están primando los disfraces de abrigo. Por eso quizá también los animales sean lo más solicitado hasta el momento. «Cuando Carnaval cae tan temprano se presupone que va a ser frío, entonces siempre nos tiramos hacia cosas que abriguen: animales, vikingos o cualquier otra cosa de manga larga y calentita. La gente aquí en Asturias es presumida y no quiere poner el abrigo encima, prefieren meter capas debajo y que se vea el disfraz», comenta Patricia Santirso. 

Patricia Santirso, propietaria de Disfraces El Toldo
Patricia Santirso, propietaria de Disfraces El Toldo

Precisamente en su tienda de Viaducto Marquina tiene alrededor de 1.200 modelos de disfraces que hacen que cada año clientes llegados de toda Asturias busquen traje para el Antroxu. También cuenta con numerosos complementos como son caretas, pelucas, diademas y un largo etcétera. 

Este año, por el momento, la campaña está siendo floja y un tanto «rara». Patricia Santirso cree que es por las fechas. «Normalmente siempre que el Carnaval cae tan pronto es malo, se ha convertido hasta en un dicho del sector», asegura la responsable de Disfraces El Toldo. «La gente no es consciente, muchos están acabando todavía de comerse el turrón y ya tienen que empezar a pensar en el disfraz», manifiesta. 

Por eso, en tiendas como la de Patricia Santirso cuando el Antroxu se adelanta en el calendario las fechas de mayor actividad son las más próximas a los días centrales. «La gente lo deja para última hora, porque se dan cuenta tarde de que ya es Carnaval», admite. Por eso espera que el mayor volúmen de clientes llegue en los próximos siete días, ya que en Oviedo el gran desfile no se celebra hasta el sábado 17 de febrero. 

Si los compradores de última hora no cambian la tendencia, está claro que este año las calles de la ciudad recuperarán algunos de los personajes más clásicos del Carnaval y los animales serán los grandes protagonistas en todas las edades. Desde bebés bien abrigados hasta familias o grupos de adultos que forman un zoo o una granja.