La cruda realidad en las cercanías en Asturias: hasta una hora en tren de Oviedo a Siero
LA VOZ DE OVIEDO
La ovetense Guadalupe Pérez utiliza a diario este medio de transporte para acudir a su puesto de trabajo. Cuenta cómo hacer uso de la antigua FEVE en la región puede convertirse en una «auténtica odisea». Asegura que si no llega tarde a trabajar por los sucesivos retrasos o cancelaciones, queda tirada en la estación ante la ausencia de nuevas líneas
07 dic 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Trenes que no salen y otros que van con retraso; convoyes que se paran a medio camino sin motivo aparente y después de unos cuantos minutos echan a andar; algunos incluso dejan de funcionar de un momento para otro. Esta es la realidad con la que conviven «a diario» los usuarios de las líneas ferroviarias de cercanías en Asturias. Una situación que «acaba» con la paciencia de los pasajeros habituales, quienes reclaman soluciones pero sobre todo explicaciones.
«Me parece estupendo que ya contemos con el AVE, pero lo que necesitamos de verdad los asturianos es un servicio de cercanías fiable. Que sea puntual o por lo menos te informen de las cancelaciones, ya que así podrás buscarte la vida para poder llegar a la hora a tu puesto de trabajo, a una consulta médica o lo que sea», denuncia la ovetense Guadalupe Pérez, quien por desgracia sabe de primera mano cómo funcionan FEVE y Renfe en Asturias. Sin ir más lejos, «esta semana pasada el tren me dejó tirada tres días».
Esta vecina del barrio de La Corredoria en Oviedo utiliza a diario el tren para acudir a su puesto de empleo, en Pola de Siero. Hacerlo, confiesa, es una «auténtica odisea». Como tiene que entrar a las 13.00 horas, en un principio Guandalupe se montaba en el convoy que pasaba a las 12.10 por la estación de FEVE de Parque Principado, ya que en el caso de que hubiese algún retraso se aseguraba llegar a tiempo a su trabajo. Sin embargo, «desde hace aproximadamente un mes esta línea debió de ser suspendido porque ya no pasa».
«No hay día que llegue tarde a trabajar»
Por mor de esta cancelación, la ovetense se ha visto obligada a coger el siguiente tren. Este pasa por la estación a las 12.25 horas. Aunque le da tiempo de sobra a llegar a su puesto de trabajo, ya que si funcionase correctamente tardaría tan solo «22 minutos» en realizar el trayecto, la realidad es totalmente diferente. «No hay día que llegue tarde a trabajar», asegura indignada Guadalupe, a quien «por suerte» no le ponen ningún problema por entrar más tarde. Pero eso no es escusa, ya que tal y como asevera, «mi compromiso laboral es llegar a la hora».
Realmente, el tren que debería de pasar a las 12.25 por la estación de Parque Principado,«lo hace un día sí y tres no». «Si no va con retraso, te enteras allí sobre la marcha que está cancelado. Ni siquiera te avisan. Yo tengo de estar esperando más de 20 minutos y el tren ni siquiera ha pasado», lamenta, antes de denunciar también el «mal funcionamiento» de la aplicación FEVE-Renfe.
«En la app te informan que el tren ya ha salido de Oviedo cuando nunca llega al andén. Te pone en tiempo real que faltan X minutos para llegar a la parada, cuando es totalmente mentira. Y encima no te avisan de las cancelaciones, solo lo puedes saber in situ», asegura Guadalupe Pérez. Ante estos casos, la ovetense debe volver «a prisa» a su casa para coger el coche o apañárselas «como pueda» para poder llegar a tiempo a su puesto de trabajo. De saberlo, «no pierdo ni siquiera el tiempo en ir a la estación».
Una hora de llegar a Pola de Siero desde Oviedo
Si «por suerte» el tren pasa a la hora o lo coge aunque vaya con retraso la historia no acaba ahí. «Que se pare a medio camino sin venir a cuento ya es otro tema a parte. Puede estar parado 15 o 12 minutos tranquilamente y luego vuelve a arrancar y listo. También nos ha pasado un montón de veces tener que cambiarnos de vagón en El Berrón», cuenta indignada, antes de precisar que este trayecto que por lo general se puede hacer en 22 minutos, «hay veces que tardamos una hora». Es decir, más del triple.
Para la vuelta pasa exactamente lo mismo. En más de una ocasión, el marido de Guadalupe ha tenido que ir a buscarla a Pola de Siero tras finalizar esta su jornada labora debido a la suspensión de la línea de tren. Por suerte, asegura, allí en la estación hay una chica que está en cabina y avisa a los pasajeros si se ha cancelado el tren, pero aún así la situación es «indignante».
«Me pone de los nervios el saber que no voy a llegar a trabajar a la hora»
«La confianza que tienes en el servicio de FEVE, que yo casi lo tengo a la puerta de casa y también del trabajo, y que funcione así… no lo entiendo por qué. Y lo peor es que no dan explicaciones de lo que está pasando. Vacilan de que tenemos AVE, que viene el rey a inaugurarlo y que tenemos un supermega tren a Madrid, que está muy bien y a me parece estupendo porque es un hecho histórico para Asturias, pero en el día a día los asturianos también necesitamos el cercanías para comunicarnos. Sobre todo los que tenemos que ir a trabajar», implora.
En su caso, «por suerte», no tiene que realizar ningún trasbordo porque de ser así, asegura, «sería mortal». «No me quiero imaginar tampoco los que tienen que hacer un trayecto mucho más largo», señala la ovetense, quien en más de una ocasión he coincidido con gente mayor que estaba esperando el tren para ir a una revisión o una consulta al HUCA y este fue cancelado. «Aunque sea por ocio, si te ofrecen un servicio deberían de darlo. Vale que con esta nueva tarjeta te ahorres los viajes, pero es que yo prefiero que me cobren y me den un servicio fiable porque a mi me pone de los nervios el saber que no voy a llegar a trabajar a la hora», denuncia.
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