¿Qué es una tienda «pop up»? Puru Remangu apuesta por este modelo para aterrizar por «sorpresa» en Oviedo
LA VOZ DE OVIEDO
La marca, convertida en todo un símbolo de la cultura asturiana, acaba de abrir un local que ensalza el feminismo, la identidad y lo cotidiano a través de prendas de ropa y otros productos. La camiseta de «repunante» continúa siendo su buque insignia
16 nov 2023 . Actualizado a las 09:36 h.Al bajar por la calle Postigo de Oviedo un nuevo local comercial llama la atención del viandante. En la bifurcación con Paraíso, el bajo ha recuperado el color y ha reabierto sus puertas gracias a la marca Puru Remangu. El proyecto de la publicista natural de El Entrego Enar Areces ha llegado a la capital asturiana apostando por el factor «sorpresa» y la innovación. Y es que se trata de una tienda pop up, un modelo de negocio efímero que se ubica en un lugar estratégico y por un tiempo limitado.
El establecimiento se ha convertido en la primera tienda oficial de Puru Remangu y en el escaparate anuncian que estará abierta de noviembre a enero. Lo hacen en asturiano, porque son firmes defensores de la llingua y de valores como el feminismo, que llevan por bandera muchos de los diseños que tienen a la venta. Hasta ahora tenían una oficina en Gijón que hacía las veces de almacén y varios puntos de venta en otros comercios, aunque la gran parte de sus ventas se efectuaban a través de su tienda online. Ahora han dado un nuevo paso.
«Nos apetecía hacerlo en plan sorpresa. Al ser pop up tiene la ventaja de que no te pillas los dedos adquiriendo un local o haciendo una reforma. De cara al futuro quizá necesitaríamos algo diferente, pero ahora como va a ser temporal nos encajaba hacerlo de una manera más fácil, más flexible y con menos inversión», explica Enar Areces.
No obstante, no descarta que la tienda física haya llegado para quedarse en el proyecto Puru Remangu. En esta ubicación van a estar, seguro, hasta finales del mes de enero, coincidiendo con la campaña de Navidad. «Van a ser tres meses de prueba y error, para ver qué pasa, si funciona y cuál es la realidad de tener una tienda física», apunta. Una vez concluido este tiempo analizará si quedarse, instalarse en otro local o volver a lo que tenían antes: tienda online y puntos de venta.
Para dar este paso eligieron la capital asturiana porque no contaban con ningún punto de venta y tenían muchos pedidos de vecinos de la capital asturiana. «Nos apetecía venir a Oviedo porque nos gusta mucho la ciudad, el barrio, y creemos que en este entorno y en este sitio puede funcionar», admite la creadora de Puru Remangu. En el proyecto de Enar Areces está también su pareja, el gijonés Xicu Ariza, y Marina, una empleada a la que han contratado recientemente para atender de forma presencial el negocio.
La acogida está siendo «muy buena» en la primera semana de apertura, cumpliendo con su intuición. «Teníamos la sensación de que las cosas saldrían bien. Veremos a finales de enero, pero la respuesta está siendo muy buena no solo por las ventas, que son importantes, también por la acogida del barrio. Nos han dicho que qué bien que abramos aquí y que haya tiendinas como nosotros, que dinamizan la zona y aportan frescura», celebra Enar Areces.
Puru Remangu, más que una marca de ropa
En asturiano, remangu tiene que ver con fuerza, con la actitud para hacer algo. Una predisposición que te empuja a llegar donde tú quieras. Un término que a Enar Areces le llevaba a pensar en su madre y en su abuela, en lo cotidiano, en la familia y en la tierra que la vio crecer. Porque aunque Puru Remangu surgió fuera de Asturias, se ha convertido en toda una seña de identidad de la región, una especie de símbolo con el que defender la igualdad, la tradición y la cultura asturiana.
Nació en Madrid, como un proyecto personal de la publicista Enar Areces, que por aquel entonces trabajaba en la capital. Una idea con la que combinaba una parte más personal, de fuerte arraigo a su Asturias natal, con otra más profesional. «Se me ocurrió el nombre de Puru Remangu, pero en aquel momento no tenía mucho tiempo para sentarme y pensar qué quería hacer con la marca, teníamos un modelo de camiseta y ya», cuenta.
Pero un mes antes de la pandemia, sin saber lo que vendría, decidieron hacer las maletas y regresar a Asturias. Ella dejó su empleo en Madrid y Xicu tenía la posibilidad de teletrabajar, lo que les llevó a dar el paso. En esa situación irrumpió el coronavirus y su consecuente confinamiento, un momento que Enar Areces aprovechó para dar forma a su proyecto. «Me dije "no tengo nada que perder" y empecé a dedicarle un poco de tiempo a Puru Remangu», recuerda. En ese momento comenzó a alimentar las redes sociales y a hacer publicaciones y vio como «poco a poco iba creciendo».
En medio de una situación complicada pensó que no había «nada que perder» y empezó a producir sus primeros diseños. Al ver que funcionaba dio el paso para intentar vivir de ellos, creó la página web y lanzó nuevos productos. Hasta hoy, porque ese proceso «no ha parado nunca», reconoce Enar Areces mientras maquina nuevas colecciones y otro tipo de eventos culturales que puedan englobarse bajo el paraguas Puru Remangu.
El balance es positivo, de hecho Xicu Ariza no tardó mucho en unirse al proyecto de su pareja. Eso sí, el trayecto tampoco ha estado exento de dificultades. «Al final crear un proyecto desde cero no es solo las redes sociales y el diseño, también hay un engranaje detrás de temas fiscales, administración, logística, proveedores…», detalla. Todo ello supone dedicación «todos los días y muchas horas, porque si no, no sale», admite. Pero ha sido gratificante porque «a la gente le empezó a molar lo que hacía y hasta ahora», celebra.
De un solo diseño de camiseta han pasado a tener multitud de ellas, chaquetas, sudaderas, chubasqueros, gorros, bolsos, tazas o cachos (cuencos de madera para beber). Porque Puru Remangu «no es una marca de ropa al uso, intentamos hacer colecciones que partan de una idea». Una de ellas es Romería, un concepto alrededor del cual crearon varios productos como un mantel o platos «como los de antes», porque siempre tratan de «ir un poco más allá de lo normal».
Aunque sin duda el producto que «lo reventó» desde el principio fue la camiseta de repunante: «Creo que no hay ninguna persona en Asturias que no la tenga ya. Pero es que se sigue vendiendo», aplaude Enar. «Hay otras que igual no son para todo tipo de personas, igual quien se pone la de Asturias working class no se pone la de collacies, pero la de repunante llega a todos los públicos y a todas las edades, es como nuestro buque insignia», explica.
Rodrigo Cuevas, muy presente en la tienda
Uno de los grandes apoyos de Puru Remangu es Rodrigo Cuevas, con el que tienen una amistad desde hace tiempo. «Él tiene muchísimo alcance y se nota. Además para nosotros es un orgullo porque compartimos muchísimos valores con él», subraya Enar Areces. También Sofía Castañón o la ministra Ione Belarra han lucido sus diseños. Además, agradece a todos los que se sienten identificados con la marca y la han dado a conocer a través de recomendaciones o en conversaciones.
Gracias a todo ello Puru Remangu se ha convertido en una «seña de identidad» que une a asturianos incluso fuera de su tierra. Por eso el futuro es prometedor. Próximamente sacarán una colección de deporte y otra de Navidad para acabar el año. Y para el año que viene quizá la marca sume nuevo contenido, como el cultural. Están cargados de ideas y como defiende Enar Areces «mientras haya ideas hay proyecto».