Cuentas y Maña, la tienda del centro de Oviedo donde comprar pulseras artesanas o hacerlas tú misma

LA VOZ DE OVIEDO

Sofía Rodríguez está al frente de un establecimiento repleto de abalorios en el que también pone a prueba su creatividad elaborando desde cero sus propios diseños de bisutería
23 jun 2023 . Actualizado a las 09:35 h.La crisis económica del 2008 dio un vuelco a la vida de Sofía Rodríguez, que acabó en el paro al cerrar el comercio en el que trabajaba. Lejos de conformarse y esperar, decidió lanzarse a la «aventura» de emprender su propio negocio y puso en marcha Cuentas y Maña, una tienda en la que vende miles de abalorios y la bisutería que ella misma crea. En su local de la calle Ramón y Cajal de Oviedo, que llama la atención desde el mismo escaparate, tiene cientos de cubos transparentes y botes de cristal repletos de cuentas ordenadas según sus tonos. También cadenas, cueros, cordones, fornituras y todo lo necesario para que sus clientas hagan en sus casas pulseras, anillos, collares, etcétera. Justo enfrente de todo ese material se encuentran las piezas que ella misma crea y vende.
Todo empezó en Pola de Siero en el año 2009. Tras hacer un estudio de mercado, se decidió a capitalizar el paro y «arriesgar». Así abrió su primera tienda con el amuleto de su creatividad al lado. «El recibimiento fue muy bueno, a la gente le gustó mucho, había talleres para aprender a hacer cosas y eso también animó», recuerda Sofía. Sin embargo, el bum de la bisutería hecha a mano se empezó a diluir y las ventas cayeron, por lo que se planteó moverse o dedicarse a otra cosa. «Como a mí esto me apasiona, decidí venir a Oviedo, aunque en ese momento había más competencia», cuenta. En un primer momento abrió en la calle Fruela, donde estuvo tres años hasta que se mudó al local donde a día de hoy mantiene su ubicación, desde la que llega también a los turistas, al situarse en pleno centro.

El modelo de negocio elegido tiene que ver con su pasión por personalizarlo todo. «Me gusta y siempre me ha pasado, cuando compro un jersey o unos zapatos tengo que hacerles algo, tengo amigas que me dicen: "¿no puedes dejar las cosas como están?" Pues no, tengo esa necesidad», confiesa. Por eso, antes de montar Cuentas y Maña compró en este tipo de tiendas y siempre sintió una admiración especial hacia ellas. «Me gusta hacer piezas más especiales y personalizadas; creo que además hoy en día, con la globalización y todos los estándares que existen para todo, hacer algo un poco más personal y particular es un punto de rebeldía, algo distinto que no lleva todo el mundo», defiende.
Su clientela está compuesta en su mayoría por mujeres, de todas las edades. «Desde chavalinas que con la pandemia se aficionaron al tema de los abalorios hasta gente bastante mayor», resalta Sofía. Una parte busca el material porque ya tiene una idea y se lo lleva para hacerlo; otras «quieren hacer algo, pero no saben muy bien, entonces hay que darles asesoramiento y alguna idea con los materiales que pueden utilizar». Por último, la artesana vende sus propios diseños, por lo que «una parte complementa muy bien a la otra». Eso sí, cree que todas sus clientas «buscan esa parte de atención personalizada, de que las escuches y des ideas; es lo que más destacan».

Todas y cada una de las piezas que ha hecho son especiales para ella, puesto que son únicas. «He trabajado mucho con alambre y con aluminio; eso me permite moldear, machacar… y de ahí salen piezas únicas y muy especiales», admite Sofía. Además, el «producto estrella» de la tienda es una medalla de nácar con la Virgen de Covadonga, que «gusta mucho tanto a la gente de aquí como a la gente de fuera».
Viajar en busca de abalorios
Intenta que los abalorios que ofrece a sus clientas sean totalmente diferentes a los que pueden encontrar en otras tiendas de Oviedo o a través de grandes plataformas de internet como Amazon. Por eso, aunque la red sigue siendo su punto de referencia para hacerse con la mercancía que luego vende, su sueño es poder «viajar por el mundo para conseguir piezas». «El año pasado, por ejemplo, fui a Marruecos como viaje personal, pero aproveché para traer piezas de allí. Me encanta viajar, y casar el trabajo con el placer sería lo mejor», confiesa.
Entre sus proyectos de futuro con Cuentas y Maña está también la creación de una página web —ahora tiene presencia en redes sociales— y adentrarse en el mundo de la alta bisutería. Además, su intención es recuperar a partir de septiembre los talleres que tuvo que paralizar a causa de la pandemia. Para poner en marcha todas sus ideas, y gracias a la buena acogida que su negocio ha tenido en Oviedo, ha podido contratar a una trabajadora con la que repartirse tareas y tener tiempo para poner en marcha todas las iniciativas que tiene en mente.