El artista ha participado en el certamen que es considerado el «más prestigioso» de Europa
17 abr 2023 . Actualizado a las 16:29 h.El fotógrafo asturiano Carlos Quirós, conocido como Caliq, ha quedado octavo en los premios que entrega la Federación Europea de Fotógrafos (FEP), en Praga. El ovetense, que ha sido el único representante de la región, ha competido en la categoría de ilustración/fine art con otros nueve fotógrafos europeos en este certamen que es considerado el «más prestigioso de fotografía profesional de Europa».
«No me lo esperaba para nada. Para mi ya es un premio estar entre los diez finalistas porque hay un gran nivel», asegura el artista, quien para participar en el certamen ha presentado un total de cinco fotografías. «Tres de ellas han sido las seleccionadas», señala el ovetense antes de detallar que las obras forman parte de una serie que lleva realizando desde el confinamiento «donde existe un componente emocional y conceptual que trasciende».
Bajo esta premisa, el fotógrafo ovetense resalta que «me gusta poner en valor la fotografía que conmueve y emocione de alguna manera al espectador». «Que no se quede solamente en una fotografía bonita», puntualiza el artista, quien desde la crisis sanitaria ha decidido dar un giro a su forma de trabajar, pero sin dejar de lado los reportajes de boda y la venta de fotografías en la capital asturiana.
Ser finalista de este concurso europeo es «realmente el máximo reconocimiento» que Carlos Quirós he tenido hasta ahora. A lo largo de sus 12 años como profesional ha sido nominado hasta en 10 ocasiones en alguno de los más prestigiosos premios de fotografía profesional en España, como el Premio Internacional Luces de Granada, el Quijotes o en los galardones concedidos por la Federación Española de Profesionales de la Fotografía y la Imagen, entre otros.
Además, a principios de este año «formé parte del equipo español que participó en la Copa del Mundo de Fotografía WPC 2023», apunta. Es por ello que optar a una de las medallas de los premio FEP «ya de por sí es mi mayor logro», reconoce orgulloso Caliq, quien seguirá trabajando «en la misma línea» debido al gran éxito de sus fotografías, en las que al fin y al cabo muestra la soledad, la introspección personal, así como la actitud materialista con la que conviven muchas personas.