Micu, un pequeño mono de tan solo 400 gramos de peso, se adapta a su nueva vida en el zoológico El Bosque

La Voz

OVIEDO

Micu, el nuevo habitante de El Bosque
Micu, el nuevo habitante de El Bosque

El ejemplar, que fue decomisado por la Policía, pertenece a una especie nativa de Brasil que suele ser víctima del tráfico ilegal por su reducido tamaño. «Al principio estaba desorientado, pero ahora vive de manera similar a como lo haría en libertad», explican en el centro ubicado en Oviedo

25 feb 2025 . Actualizado a las 12:38 h.

Micu, un primate pequeño nativo de Brasil, es el nuevo habitante del centro zoológico y de rescate El Bosque. Micu pesa unos 400 gramos y mide aproximadamente medio metro, con la cola incluida. Es un macho de entre dos y cuatro años de edad que, antes de ser reubicado en el zoo de San Esteban de las Cruces (Oviedo), fue decomisado por la Policía de un piso de fuera de Asturias en el que vivía con sus propietarios.

«Esta especie y todas las especies de primates están actualmente prohibidas por la nueva Ley de Bienestar Animal», explica el conservador zoológico Gonzalo Rubio, responsable de El Bosque, que también señala que la especie de Micu está catalogada por la  Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (Cites) para controlar su comercio.

«Dado su pequeño tamaño, esta especie es habitualmente víctima del tráfico ilegal. Es fácil de transportar y viajar con ella, reduciendo así los ejemplares de su hábitat natural», lamenta Rubio, que deja claro que primates como Micu no son animales para tener como mascota. «Son muy inteligentes y muy sensibles. En la naturaleza viven en grupos numerosos y, en cautividad, se suelen mantener solos y en espacios pequeños, por lo que la mayoría tienen conductas agresivas por privarlos de poder tener comportamientos naturales de la especie», explica.

Micu, antes de ser decomisado por la Policía, desayunaba y comía con sus dueños en la mesa. «Probablemente la dieta tampoco sería la correcta», dice el conservador zoológico. En la naturaleza, añade, estos monos se alimentan de insectos, savia, fruta, huevos o pequeñas aves: «La dieta es muy variada, pero difícil de imitar en un piso».

Ahora, tras su viaje de 10 horas para llegar a Oviedo, vive en una instalación apropiada, con dos iguanas y otros dos primates de una especie diferente pero afines ya que en su medio natural comparten hábitat y territorio, además de que la alimentación es parecida. El recinto tiene árboles, plantas, un estanque y una zona calefactada ya que estos primates suelen ser sensibles al frío.

«Hemos tenido que hacer una transición para introducirlo que ha durado varios días —señala Rubio—, la vigilancia es importante en este proceso para evitar en un futuro comportamientos agresivos. Estos pequeños primates son muy activos y tienen un temperamento fuerte, por ello la transición se hace indispensable». Tras ese periodo de transición, todos se han adaptado muy bien a vivir juntos. «Al principio el monito estaba desorientado. Son muchos cambios en poco tiempo, pero está claro que ahora vive de manera similar a como lo haría en libertad: en un entorno natural, con buena alimentación y en grupo familiar», explica el responsable de El Bosque.

El centro, en el que ya viven 300 animales de unas 88 especies diferentes, cumplirá 18 años el próximo 1 de febrero. Las instalaciones, que a lo largo del año reciben la visita de grupos escolares dentro de la labor divulgativa y educativa del centro, estarán abiertas precisamente a partir del 1 de marzo todos los días desde las 11 hasta las 20 horas aproximadamente. El centro se subvenciona a través de la venta de entradas y de las aportaciones de socios y padrinos.