«San Mateo 2022 puede ser la tumba política de Canteli», asegura Somos

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El concejal de Somos Oviedo, Ignacio Fernández del Páramo, en una imagen de archivo
El concejal de Somos Oviedo, Ignacio Fernández del Páramo, en una imagen de archivo EUROPA PRESS | EUROPAPRESS

Nacho del Páramo sostiene que «una gran parte de los concejales de gobierno acabarán sentados ante los tribunales por delitos de prevaricación administrativa»

18 sep 2022 . Actualizado a las 13:50 h.

El grupo municipal Somos Oviedo ha advertido que San Mateo 2022 puede ser la tumba política del alcalde Alfredo Canteli. Así lo ha manifestado el edil Nacho del Páramo, que ha indicado que «todo apunta que Covadonga Díaz no solo se ha cargado las fiestas de Oviedo, si no que puede haber sentenciado el futuro político de Alfredo Canteli, Nacho Cuesta y el resto de concejales de su equipo».

Y es que según Somos la «improvisación continua» del gobierno de Canteli en el que «ya es conocido por ser el peor San Mateo de la historia, está dejando un reguero de actuaciones que conducirán, casi con total seguridad, a que una gran parte de los concejales de gobierno acaben sentados ante los tribunales por delitos de prevaricación administrativa».

Afirma el edil de la formación morada que las consecuencias del terremoto causado por la nefasta gestión de la concejala de festejos pueden terminar haciendo que, de un plumazo, se termine la vida política de Canteli y su equipo, todo por su sectarismo y sumisión a los intereses de la patronal hostelera. «Ante las advertencias de denuncia de la asociación hostelera «Asturias de Noche» por la decisión de la Junta de Gobierno de aumentar el horario de las casetas, el viernes por la tarde el concejal de urbanismo, a la desesperada, mandó redactar una resolución para ampliar el horario de los bares. Ningún funcionario debió querer participar dado que la terminó redactando un cargo político, el director general de urbanismo, firmándose casi con las campanadas, el viernes a las 23:30 horas», explica Somos.

Así, añade Del Páramo que la improvisación hizo que ni los hosteleros conociesen los cambios, «una chapuza en toda regla que hizo ineficiente la decisión, pero que va a ocasionar, con casi toda probabilidad, que otras asociaciones y entidades sean las que ahora denuncien», informa Europa Press.