El proyecto ha sido aprobado con el apoyo de los 13 concejales del PP y Ciudadanos, con los 13 votos en contra del PSOE, Somos Oviedo y Vox, y se ha decidido gracias al voto de calidad del alcalde, Alfredo Canteli
18 dic 2020 . Actualizado a las 16:48 h.El Ayuntamiento de Oviedo ha aprobado en un pleno extraordinario las ordenanzas de tributos, precios públicos y prestaciones patrimoniales para 2021, que contempla un descenso del IBI y de varias tasas, así como la congelación de otros precios públicos, pero que no ha contado con el apoyo de los grupos de la oposición, para los que la propuesta es insuficiente y esconde el incremento de varios tributos.
El proyecto ha sido aprobado con el apoyo de los 13 concejales del PP y Ciudadanos, y con los 13 votos en contra del PSOE, Somos Oviedo y Vox, y que se ha decidido gracias al voto de calidad del alcalde, Alfredo Canteli. Esta propuesta ya salió adelante en el pleno ordinario de octubre, aunque se ha sometido a su aprobación definitiva tras la inclusión de las enmiendas de los grupos políticos de la oposición y de asociaciones vecinales, entre las que destacan las bonificaciones a familias numerosas y a la hostelería, así como la congelación de las tasas de agua y alcantarillado.
El concejal de Economía, Javier Cuesta, ha defendido un proyecto que «busca el equilibrio» entre la reducción de la presión fiscal sobre los sectores afectados por la pandemia y la cobertura de los servicios municipales. Cuesta ha resaltado que se aplica un descenso del 3,5% del IBI general, así como una reducción del 50% en las tasas de licencia de actividad y del 25% en las de licencia de obras y de terrazas. Asimismo, ha subrayado la mejora en el tratamiento fiscal para las familias numerosas, monoparentales y para los servicios sociales domiciliarios, así como las bonificaciones para entidades deportivas y para las instalaciones solares, entre otras medidas.
Por su parte, la concejala socialista Ana Rivas ha alertado de que el descenso en las tasas solo se lleva a cabo en «algunos sectores y actividades», mientras que se aplican subidas de «casi el doble» en otras tasas municipales y se anuncia una «falsa» bajada en el IBI, que en realidad es una «congelación». A su juicio, este año el equipo de Gobierno «tenía la capacidad» para utilizar todos sus recursos y reducir la presión fiscal «de verdad» y favorecer la recuperación. Sin embargo, ha lamentado que el bipartito no haya utilizado todos sus recursos ni haya aplicado «los criterios de progresividad y proporcionalidad» en este proyecto de ordenanzas, lo que demuestra su «incapacidad para entender la situación».
A estas críticas también se ha sumado el concejal de Somos Oviedo Rubén Rosón, que ha acusado al equipo de Gobierno de «retroceder en progresividad fiscal» y llevar a cabo «recortes en becas, escuelas infantiles y cooperación al desarrollo», entre otros servicios municipales, así como de incrementar un 1% el IBI para los ciudadanos de Oviedo mientras «se lo perdona a los 200 grandes propietarios». También ha denunciado que la propuesta plantea una subida en la tasa de recogida de recogida de basura, en el coste de los aparcamientos municipales y en el servicio de enterramientos, por lo que supone «un Robin Hood a la inversa» para la formación morada.
El proyecto tampoco ha contado con el apoyo de la portavoz de Vox, Cristina Coto, para quien «el Ayuntamiento se ha quedado corto» en una ocasión en la que se podría haber sido «más ambiciosos» y en la que se debería haber aplicado reducciones fiscales «en consonancia con la gravedad de la situación». Cuesta ha negado los incrementos denunciados por el PSOE y Somos Oviedo, y se ha defendido de las críticas sobre la falta de ambición argumentando que «es fácil plantear medidas agresivas y proponer la eliminación de tasas desde la oposición», informa EFE.