El alcalde reconoce que no está contemplada la labor representativa de los cónyuges de las autoridades pero que a estos se les suele cumplimentar con invitaciones a algunos actos institucionales
04 dic 2019 . Actualizado a las 18:35 h.Alfredo Canteli tiene la conciencia tranquila. Considera que su actuación no merece ningún reproche y que los gastos pasados al Ayuntamiento de Oviedo por su viaje a Madrid para promocionar el Desarme se ajustan a la legalidad. Pero ha reculado y ha querido aclarar sus palabras. El alcalde ha defendido que la presencia de su mujer en el acto «no supuso la imputación de ningún gasto a las arcas municipales», a pesar de que hay tiques de cafés, refrescos, pinchos y una caja de suspiros. Pese a la polémica, el regidor ha adelantado su intención de que su esposa siga acompañándole a estos eventos y ha dejado claro que «eso no supondrá gastos al ayuntamiento». Por tanto, ha mostrado su intención de pagar de su bolsillo esas facturas.
La polémica por los gastos ha ido creciendo con el paso de las horas. La tensión vivida en el pleno ha ocupado las portadas de los principales medios de comunicación y la noticia ha sido recogida por la prensa nacional. Por eso, y para intentar salir al paso de las críticas, el alcalde ha matizado sus declaraciones. El regidor ha citado las «desafortunadas declaraciones» realizadas durante la sesión del pleno y las achacado al «calor del debate político». A partir de ahí, ha insistido en los mismos argumentos utilizados en varias ocasiones para defender su actuación, aunque con «aclaraciones».
«Es cierto que en España no está contemplada la labor representativa de los cónyuges de las autoridades (alcaldes, presidentes de autonomías e incluso el presidente del Gobierno), pero no es menos cierto que de facto se les suele cumplimentar con invitaciones a algunos actos institucionales», ha argumentado Canteli. El primer edil ha añadido que la labor de su mujer «se ceñía única y exclusivamente a ese papel», y ha vuelto a mostrar su deseo de contar con su presencia en estos eventos. Eso sí, ha incluido un matiz sustancial: su esposa acudirá «a los actos protocolarios que lo permitan, y de acuerdo a los usos sociales establecidos».
El epígrafe del comunicado que queda menos claro es el relativo a los gastos de su esposa abonados por parte del ayuntamiento. Hasta ahora, Canteli había reconocido esos pagos. Pero ha reculado. «Quiero dejar claro que la presencia de mi esposa en este acto no supuso la imputación de ningún gasto a las arcas municipales» ha afirmado, y ha apuntado que su presencia tampoco supondrá coste alguno «en el futuro». Los tiques demuestran la compra de varios refrescos, pinchos, cafés y suspiros en el viaje de ida y productos similares en el de vuelta. La oposición había denunciado que esos gastos sí son de su mujer.
Por último, Canteli ha querido aclarar que «los gastos realizados durante ese viaje fueron, exclusivamente, los menores posibles para representar a Oviedo en el evento organizado en Madrid con motivo del Desarme. Y como prueba de transparencia en mi gestión, lo primero que hice fue aportar las facturas de dichos gastos». Con estas matizaciones el alcalde ha querido dar por finalizada la polémica.
Críticas a la oposición
Las palabras de Canteli son las segundas del alcalde sobre este asunto en el mismo día. Su primera intervención se centró en reafirmarse punto por punto en sus primeras afirmaciones y en cargar contra la oposición, PSOE y Somos. «Parece que a la oposición no le gustan las familias ni los matrimonios que funcionan bien», ha espetado.
Los gastos pasados por el alcalde al ayuntamiento han llamado la atención de la oposición especialmente por dos motivos. El primero, que junto a los gastos del alcalde, también se incluyen los de su mujer. Los cafés, refrescos, pinchos y suspiros en una estación de servicio y las dos noches de hotel -de las que finalmente solo utilizaron un día- junto a Canteli. El primer edil ha argumentado que «mi mujer estuvo con la esposa del embajador de Rusia atendiéndola. ¿Es malo eso? ella fue ayudarme», por lo que no entiende la crítica.
El segundo punto polémico es que Canteli cenó en Madrid junto a otras tres personas. No ha identificado quien eran los otros tres comensales, y Somos ha criticado que las botellas de vino que bebieron costaron 30 euros cada una. El regidor se ha limitado a decir que se trató de una reunión «de un tema que puede ser importante». La formación morada ya ha anunciado su intención de llevar el caso a los tribunales, pero el alcalde ha reiterado que «que hagan lo que quieran, yo no voy a cambiar».
Canteli ha aprovechado su penúltima intervención para detallar su viaje a Madrid. Según ha explicado, el día de la presentación se encontraba mal, pero a pesar de ello acudió al acto. «Estaba empastillado porque no me temía derecho y lo saben los que me vieron. Decidí que alguien me trajera el coche y volver a Oviedo», ha afirmado. Ese estado de salud es el que le llevó a no quedarse en Madrid y a no cancelar la reserva. «Eso es todo. Son ganas de retorcerlo todo», ha añadido.