El Club Patín de La Corredoria exige soluciones ante el mal estado de su pista

Claudia Granda OVIEDO

OVIEDO

Mónica Lumbreras

Los charcos, los baños e, incluso, la propia arquitectura del campo agotan la paciencia de sus integrantes

01 feb 2019 . Actualizado a las 21:00 h.

Las lluvias de estas últimas semanas han sido la gota que ha colmado el vaso para los integrantes del Club Patín La Corredoria. El pasado sábado, apenas unas horas antes del encuentro contra el Centro Asturiano, eran varias las personas que tuvieron que deshacerse del agua que inundaba la pista valiéndose de una aspiradora. Ocurre cada vez que llueve y el viento viene de Galicia, la lluvia entra en la pista y el agua se estanca. «Esta situación nos hace perder un tiempo del cual no disponemos», lamenta Chus González, presidente del Club.

Cada vez que la lluvia amenaza, entrenadores, niños y padres echan la vista al cielo, esperando que el partido pueda seguir adelante y que el árbitro no se oponga a su celebración. «Supone un perjuicio grande, habría que parar el partido, pagar a otro árbitro y jugar durante la semana», explica González. «Llega un momento en el que se te quitan las ganas», asegura.

Según las palabras del presidente, la lluvia provoca que aproximadamente el 35% de la pista quede inutilizable. Para los entrenamientos, es necesario acotar las zonas con agua estancada con conos, para evitar que los más pequeños entren en los charcos. «Hoy seguro que la parte derecha está con agua», asegura mientras enumera los demás problemas con los que cuenta esta pista.

Ya son once años los que el club lleva entrenando en La Corredoria y prácticamente los mismos los que llevan reclamando mejoras para la pista. «Nos encontramos en una situación de desgaste. Los padres cada vez se cansan más, algunos se llevan a sus hijos a entrenar a Fozaneldi», lamenta Chus González. A parte de las lluvias, desde el club aseguran que el estado de la pista no es el adecuado. «Es excesivamente agresiva. Los críos hasta los 12 años usan casco y llevamos rodilleras, pero los chavales que juegan aquí al fútbol pueden hacerse mucho daño», denuncia González.

Las columnas que rodean la pista se encuentran a tan solo 30 centímetros y la proximidad del público es excesiva. Además, las medidas de la pista son insuficientes. «Lo ideal para la pista es que midiese 22 por 44 metros, la nuestra mide 34 por 19,60. Nos faltan seis metros de fondo», explica, antes de añadir que el estado de los vestuarios también deja mucho que desear. Además, su tamaño es insuficiente como para acoger a decenas de jóvenes jugadores cada fin de semana, sostiene.

Las soluciones

 «Lo más difícil es pensar en las ideas y yo las pensé por el ayuntamiento», asegura el presidente del club. Arreglar el polideportivo Yago Lamela fue una de ellas. «Si se construye una pista paralela habría dos pabellones en uno, lo que permitiría disputar torneos potentes e, incluso, celebrar campeonatos de España», explica. Otra de las soluciones, relacionada con el estado de los baños era colocar dos casetas de obra con baños en la antigua pista de petancas situada junto a la de patinaje. «Un proyecto presupuestado y homologado al que se negaron. «No se puede mezclar lo público con lo privado», decían».

El proyecto de rehabilitación de la pista de La Corredoria formó parte de los presupuestos durante dos años y contó con el apoyo de Izquierda Unida y Podemos. Finalmente, no salió adelante. «Siempre se queda todo en muy buenas palabras, pero luego nunca se hace nada» protesta González, quien está convencido de que, para cuando arreglen la pista, él ya estará jubilado.