
Los trabajadores mantienen los paros y aseguran que el etilómetro es una «cortina de humo» de la empresa para ocultar su negativa a ceder en derechos como el descanso en jornada
01 dic 2018 . Actualizado a las 09:15 h.Oviedo parece abocado a una huelga de sus autobuses. La segunda de las reuniones de las partes ante el Servicio Asturiano de Solución Extrajudicial de Conflictos (SASEC) no solo no dejó acercamientos sino que ahondó los desacuerdos entre la empresa y el comité, que mantiene por tanto su convocatoria de paros para los días 4, 13, 18 y 27 de diciembre y 2 y 4 de enero. Los convocantes aseguran que la empresa está utilizando el rechazo de los empleados al uso de 'Alcolocks' -extremo que ellos niegan- como «cortina de humo» para ocultar lo que consideran la auténtica «línea roja» marcada por la gerencia: el «control disciplinario» y el incumplimiento del derecho de los conductores « a descansar media hora en las jornadas de más de 6 horas y 45 en más de nueve».

Así lo recoge el comunicado emitido tras el encuentro, en el que los trabajadores recalcan que «No habrá negociación sobre el descanso en jornada». El resto de los puntos quedan condicionados a que se someta este al arbitrio del SASEC. Para los convocantes, esa posición ha quedado clara tras «la oferta clara y contundente por parte del comité respecto a la instalación, utilización y regulación de los etilómetros con el objetivo 0,0 alcohol y el rechazo frontal de la Empresa a aceptarlo».
«Parece ser que trasladar durante estos días a la opinión publica que los trabajadores se negaban a “soplar” el tan traído y llevado “Alcolock” intentando tacharnos de irresponsables e insensibles a la seguridad de los viajeros, no ha resultado suficiente para cumplir las expectativas de la empresa de menoscabo de la credibilidad de sus trabajadores.», añade el comunicado, que espera que «la rectificación de la dirección de la empresa y que vuelva a sentarse a la mesa de negociación con una verdadera voluntad de diálogo».