Mónica Oviedo y la asociación ConBici dan sus opiniones a favor o en contra
29 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Las ciudades se enfrentan a nuevas formas de circulación debido a la aparición de nuevos medios transportes hasta ahora desconocidos o residuales. Los patinetes y bicicletas eléctricas están de moda y son adquiridas por más gente cada día. Ayudan a que los espacios urbanos estén menos saturados y contaminados pero, por otro lado, al no haber unas normas claras de seguridad vial podrían suponer ciertos riesgos. Las opiniones se dividen y el debate está servido: ¿Se debe apostar por este medio de transporte que apuesta por la sostenibilidad? ¿O es un peligro para la seguridad de los peatones?
Autonomía y seguridad
Mónica Oviedo. Presidenta autonómica del Comité de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI)
El CERMI (Comité Español de Representantes de las Personas con Discapacidad), es una entidad que trabaja diariamente por los derechos de las personas con cualquier tipo de discapacidad. Recientemente ha denunciado ante el Defensor del Pueblo la invasión anárquica de las aceras por patinetes y nuevos elementos de movilidad urbana. Últimamente, en nuestras ciudades y pueblos nos encontramos con una nueva forma de moverse. Los actuales estilos de vida imponen una nueva forma de deambulación más rápida y moderna, pero consideramos que es necesaria una reflexión sobre los beneficios saludables que derivan de su uso.
Las personas con movilidad reducida, entre las que nos encontramos las que caminamos con muletas, bastones o andadores, los miramos incluso con envidia y con el deseo de poder usarlos, pero la falta de equilibrio y/o la edad nos lo impiden. No obstante la realidad es que tanto nosotras como las personas con dificultades para oír, ver o entender empezamos a sentir que su uso nos produce falta de autonomía, pues nos preocupa no oírlos, no verlos o tropezar con ellos. Esta sensación da lugar a falta de seguridad cuando caminamos por cualquier acera; nos sentimos incómodos cuando pasan a nuestro lado, a veces demasiado cerca, a veces demasiado rápido y siempre sin sonoridad, lo que nos podría alertar de su presencia.
Con frecuencia en las asociaciones de personas con discapacidad recibimos quejas por el mal uso (conducción negligente) y estacionamiento (en el cruce de dos calles, en el acceso a un paso de peatones o en medio de la acera), lo que los convierte en un obstáculo que hay que sortear. En el caso de las personas ciegas o con baja visión aparecen situaciones de riesgo, que pueden producir accidentes de diversa consideración. Las ciudades han de ser amigables, tranquilas, seguras y cómodas para todas las personas, sea cual sea su circunstancia y por ello también para las personas con discapacidad y las personas mayores. Ya en el día a día nos encontramos con demasiadas barreras (arquitectónicas, urbanísticas, en el transporte y en la comunicación) en la ciudad, como pasos de peatones sin rebajar o mal rebajados, superficies deslizantes, aceras estrechas, falta de señalización, de pictogramas, de personas que se comuniquen en lengua de signos, falta de bucles magnéticos en espacios públicos, así como un total desconocimiento de cómo tratar o de cómo dirigirse a una persona con discapacidad.
Por ello desde el CERMI Asturias consideramos necesario llamar la atención sobre el uso de estos vehículos, llamados nuevos vehículos de movilidad personal (patinetes con y sin motor, monociclos eléctricos, Hoverboard, Segway) pues ha de regularse con carácter urgente por dónde pueden circular. A nuestro entender por las aceras no, por lo anteriormente expuesto. Me gustaría que quedase claro que no estamos en contra de los nuevos modelos de desplazamiento, pero por una mejor convivencia hemos de ser capaces de circular y movernos sin molestar a los demás. En la actualidad se está vulnerando la Convención Internacional de los Derechos de las Personas con Discapacidad y la Ley General de los Derechos de las Personas con Discapacidad y de su Inclusión Social, así como la obligación legal de que el 4 de diciembre de 2017 todos los bienes, entornos y servicios de interés tenían que ser plenamente accesibles.
Mientras esperamos a que el Defensor del Pueblo investigue esta situación e inste a la Dirección General de Tráfico (DGT) y a la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) a que impulsen medidas de regulación de estos vehículos orientadas a garantizar la seguridad, la accesibilidad y la movilidad de toda la ciudadanía, incluidas las personas con discapacidad, pedimos a las personas usuarias de estos vehículos que lo hagan de forma prudente, a una velocidad reducida y no los dejen aparcados en lugares que puedan perjudicar la accesibilidad del resto de ciudadanos que por diversos motivos pueden ver amenazada su autonomía, comodidad y sobre todo su seguridad.
En defensa de la bici en las ciudades
Asturies ConBici. Asociación autonómica de ciclistas urbanos y cicloturistas de alforjas
Desde Asturies ConBici consideramos que la bicicleta es un medio de transporte enmarcado dentro de un concepto amplio y global, la movilidad sostenible, donde priman aquellos medios de transporte más respetuosos con el medio ambiente y la calidad de vida en la ciudad. El uso de la bicicleta en las ciudades no es algo nuevo, sino que lleva utilizándose desde antes de los vehículos a motor. Hoy en día en grandes ciudades del mundo se utiliza la bici como medio de transporte saludable, barato y ágil.
Por lo tanto, animamos al consistorio a llevar adelante las mejoras necesarias, como hizo Pontevedra en los últimos años, que puso en marcha un valiente Plan de Movilidad poniendo coto al vehículo particular y dando prioridad al peatón con peatonalizaciones, aceras anchas y carriles estrechos. Estas reformas quitaron más de 500 coches del centro de la ciudad, reduciendo la contaminación. Además, al limitar la velocidad a 30 Km/h y calmar el tráfico, disminuyeron drásticamente los atropellos de peatones y aumentaron los desplazamientos en bicicleta. Las ventajas de usar la bicicleta son muchas:
1. Ahorro energético. La bicicleta es más eficiente que otros medios de transporte, gasta mucha menos energía que un coche y prácticamente no consume recursos no renovables.
2. Ahorro económico. Su compra es asequible para la mayoría de las personas y su mantenimiento es reducido.
3. Ahorro de tiempo. En trayectos cortos, los más habituales en desplazamientos urbanos, la bicicleta es el medio de transporte más rápido. Para desplazamientos de medio y largo recorrido puede utilizarse la combinación de bici+transporte público.
4. Ahorro de espacio. Una bici ocupa cinco veces menos que un coche aparcado y descongestiona las calles y carreteras.
5. Beneficios para la salud. Desplazarse en bici es un hábito saludable con efectos positivos para la salud y con ello se reducen los gastos de sanidad a largo plazo.
6. Reducción de la contaminación. Al desplazarse en bicicleta, se reduce la contaminación tanto atmosférica como acústica. Se mueve sin ruidos ni humos.
7. Beneficios sociales. mayor autonomía de desplazamiento y contacto con el entorno.
Es un medio de transporte sostenible y bueno para toda la población (no solo para las personas que se mueven en bicicleta), sin ruidos, sin humos, hace las ciudades más seguras y humanas, devuelve el espacio público a las personas y mejora la convivencia ciudadana. Las bicicletas, como vehículos que son, deben respetar la normativa de circulación y como tales nunca pueden invadir el espacio de las personas viandantes, sujeto principal de la pirámide de la movilidad sostenible. De la misma manera las bicicletas deben ser respetadas por los demás vehículos al ser el elemento más vulnerable en la calzada. La bicicleta es la opción más sana para moverse por la ciudad, más práctica y eficiente y además, ¡muy divertida! Únete al pedal, es fenomenal.