El modelo de transporte público al que aspira Oviedo

Luis Fernández
Luis Fernández REDACCIÓN

OVIEDO

Autobuses de la empresa TUA
Autobuses de la empresa TUA

El Ayuntamiento trabaja en un plan de movilidad en el que la red de autobuses gana terrerno. La ciudad brasileña de Curitiba es el paradigma a nivel mundial

12 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Peatón- bicicleta- transporte público- moto y coche. Ese es el orden de prioridades. Oviedo aspira a ser una ciudad sostenible y por ello desde el Ayuntamiento de la capital trabajan en un plan de movilidad en el que los vehículos a motor pierdan importancia a favor de medios menos contaminantes y más eficaces. El objetivo es potenciar la red municipal de transporte para que gane atractivo entre la ciudadanía y corregir la situación actual de un servicio ineficiente. Para ello, el modelo actual de autobuses debería sufrir una modificación de calado. El ejemplo a seguir es el de la ciudad brasileña de Curitiba, en Brasil, el paradigma mundial de la movilidad sostenible.

«Si vas desde Lugones hasta Oviedo es posible que tardes menos en bici que en autobús», asegura Ignacio Fernández del Páramo, concejal de Urbanismo de la capital, consciente de que la red actual necesita un cambio profundo. En la actualidad, y esa línea es solo un ejemplo, el trayecto puede tardar aproximadamente media hora, algo que, según el edil, «no es competitivo». Este motivo provoca que una gran parte de los vecinos rehúse usar el servicio público. 

«Las consecuencias del cambio van a ser duras para la gente», adelanta el concejal, quien es consciente de que algunas medidas pueden ser polémicas. En la actualidad, la paradas de autobús están a 400 metros, pero eso en términos de frecuencia no es eficiente porque resta velocidad a los vehículos. En otras ciudades con modelos más prácticos, esa distancia aumenta hasta los 700 u 800 metros. «Cuanto más alejadas estén, más rápido es el autobús», indica Del Páramo, quien asegura que «prefiero un bus cada 5 minutos que uno cada 15». En su opinión, es preferible caminar un poco más porque es tiempo que se gana luego. 

El concejal pone más ejemplos de lo que funciona mal en la capital. «En algunas líneas y en festivos o domingos, tenemos autobuses cada 60 minutos», un periodo excesivo. «En ese tiempo caminas más o menos 4 kilómetros y con poco más cruzas Oviedo de punta a punta». En su opinión, si pierdes el servicio en domingo te compensa ir caminando. Todos estos son ejemplos de la «ineficiencia» del transporte público en la capital.

El plan de movilidad todavía está en fase de desarrollo, pero el concejal aporta algunas pinceladas de cuál puede ser la línea de actuación. Salvador Rueda ha sido el encargado de diseñar planes como el de Vitoria o Barcelona y el de Coruña (aunque este no llegó a desarrollarlo). Entre otros muchos aspectos, el autor de esos planes defiende que para que el transporte público sea eficiente el tiempo de espera no puede ser superior a 7 minutos. Esa es una referencia para el modelo al que aspira Oviedo.

Curitiba, el paradigma de la movilidad

Aunque pueda parecer sorprendente, el gran referente en cuanto a movilidad está en Brasil. La ciudad de Curitiba es el paradigma mundial. Se trata de una localidad de 1,8 millones de habitantes que ha apostado por un modelo que sigue a raja tabla y que, según Del Páramo, «les funciona de maravilla». En plan fue aprobado en 1965 y todavía sigue vigente. Entre otros aspectos, utilizan autobuses articulados y bi-articulados, así como los que denominan Interbarrios, con líneas directas. Además, utilizan una tarifa única e integrada y tienen frecuencias que hace que sean atractivos para los usuarios.