Las actuaciones

OPINIÓN

 Carteles de tráfico en Bimenes, primer ayuntamiento en declarar el bable como lengua oficial
Carteles de tráfico en Bimenes, primer ayuntamiento en declarar el bable como lengua oficial Paco Paredes

30 ago 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Las ciudadanas y los ciudadanos españoles, a través de la Constitución y las leyes, hemos renunciado al llamado «uso de la fuerza» para que sean las Fuerzas y los Cuerpos de Seguridad del Estado quienes nos garanticen nuestra propia seguridad. En teoría hay protocolos de actuación que autorizan, de manera legal y en determinados disturbios, el empleo de medios coercitivos para restablecer la paz pública (y su resultado en la práctica puede ser satisfactorio o no). Medir la proporcionalidad y el riesgo en un hecho determinado opino que debe ser muy complicado, pero con el paso del tiempo supongo que la experiencia ayuda a perfeccionar las actuaciones. En este sentido yo quiero aplaudir y valorar la excelente actuación de los agentes de la Guardía Civil que se encontraron en Frenegal de la Sierra (Bajadoz) con un hombre violento que, en un momento dado, les amenazó con un cuchillo de grandes dimensiones. Imagino que vivir algo así en tus propias carnes debe ser horrible y muy tenso porque es imprevisible cómo va a reaccionar el individuo que está teniendo un comportamiento disruptivo (esta persona terminó siendo detenida y está en prisión provisional, acusada de cinco delitos), pero me voy al final del suceso: ninguno de los dos agentes le dispararon, aun estando en peligro sus vidas, y acabó siendo detenido en el transcurso de las horas. Sé que ha habido por redes sociales miles de comentarios críticos (al más puro estilo de bar, incluso de gente reputada) deseando violencia y poniendo de ejemplo lo que pasaría en Estados Unidos, donde cabe recordar que allí la policía acumula no pocas denuncias de abusos (que en algunos casos llegan hasta producir la muerte, como ocurrió con la asfixia grabada a George Floyd pese a que se le escuchaba perfectamente ‘I can't breathe’ [no puedo respirar]). A mi entender, para mantener la mejor salud posible en nuestra democracia es imprescindible contar con profesionales policiales que actuen con sangre fría en cada una de sus intervenciones.

Tengo que hacerme una camiseta, que se la he visto a varias personas, que ponga «gracies al bable toi podre de perres», porque lo de «vividor del bable» ya está demasiado utilizado. Hay que tomarse los ataques a la lengua propia de todas las asturianas y de todos los asturianos con temple, con sosiego y tranquilidad, porque caer en las mismas tonterías que dicen determinadas personas, por mucha relevancia que puedan tener, acaban por convertir un debate en un barrizal sin salida. A mí que Arturo Pérez-Reverte se mofe de las señales en nuestra comunidad autónoma estén en nuestro idioma autóctono no me preocupa en absoluto, aunque sí que lamento que su paso por la Academia de la Lengua Española no le haya servido para entender que el castellano es una lengua más de nuestro país, no la única, y que cada territorio tiene su forma de comunicarse y de hablar. Como sociedad plural que somos, considero que debemos cuidar y mantener todo nuestro patrimonio (y los idiomas lo son) e introducirlo en todas las partes, incluidas las señales de tráfico. De hecho lo que es lamentable es que en la inauguración de una obra nueva, como es el caso de la nueva glorieta de Santullano/Santuyano (el primero en castellano y el segundo en asturiano) en Oviedo/Uviéu, a ningún dirigente del PP local le preocupe la ausencia de una de las lenguas que, sin ser oficial, sí que tiene un estatus legal desde 1998 para su promoción y protección. Me molesta más el pasotismo institucional (porque puedo aceptar que se tratase de un error, pero obviamente lo que ocurre es que reniegan del asturiano y se niegan a difundirlo) que las actuaciones o publicaciones que puedan hacer perfiles contrarios a la pluralidad lingüística.