Sí, las notas se inflan

OPINIÓN

Varios alumnos realizan este martes las pruebas de la EBAU de la Universidad de Oviedo
Varios alumnos realizan este martes las pruebas de la EBAU de la Universidad de Oviedo J. L. Cereijido | EFE

02 jul 2024 . Actualizado a las 08:54 h.

Próximamente será la convocatoria extraordinaria de la EBAU y seguimos con la misma cantinela, muchos colegios siguen buscando y buscando cómo ayudar a su alumnado, pero no con más horas de clases sino inflando sus notas, para elevar su puntaje, sin embargo, dicho en forma sencilla, la experiencia ha enseñado que entrar a la Universidad es muy simple, lo difícil es mantenerse en ella…, ante esto, no sacamos nada con ayudarlos a entrar, si al poco tiempo, igual surgirán las diferencias con el alumnado de colegios más exigentes, solo igualando desde el ciclo básico a los alumnos en sus conocimientos y oportunidades los preparará para sortear con éxito la educación superior, evitando la deserción, de una vez se debe entender que la supuesta empujada de notas, es solo pan para hoy y una gran decepción y mucha rabia para el mañana del alumnando «inflado en notas», para su ilusionada familia, y para todo el alumnado del sistema educativo.

Sí, la notas en España se inflan. Sí, las notas en Asturias se inflan. Es algo tan simple y demostrable como comprobar las desviaciones de un punto o punto y medio entre las notas que se ponen en el colegio, y los resultados en la EBAU. Hay que pedir explicaciones y aplicar controles, rigurosos, de calidad por parte de las administraciones. Y esto es muy diferente a la otra realidad de que en muchos centros se ven forzados a adaptar el nivel de exigencia a la media que sus alumnos tiene. Esto es más preocupante, pero la manta es muy corta, ya que solo logramos amplificar las diferencias y que muchos estudiantes llegue a la EBAU con calificaciones infladas en sus expedientes académicos, obedeciendo siempre al cliente, que busca esta alternativa para que no se frustren los sueños de sus hijos/hijas.

Sin embargo, tenemos que saber enfrentarnos con la realidad y, como todos sabemos, al final la realidad se empecina en ser la que es. Y sí, ojalá las infladas de notas no existieran, pero negar esta obviedad sería hacer un flaco favor a la profesión y lo que es más importante, al alumnado. Porque, la única manera de mejorar en educación es ver qué no funciona, qué problemas tenemos en el sistema e intentar, con datos y evidencias, que mejore.