Momento ideal

OPINIÓN

Vista de la calle Uría desde el escenario del encendido de Navidad.
Vista de la calle Uría desde el escenario del encendido de Navidad. Ayuntamiento de Oviedo

05 ene 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Parece que hoy no tendremos buen tiempo, y es una pena porque es de lo más bonito que hay ver en las calles las caras de ilusión de las niñas y los niños en las cabalgatas. Quienes hemos participado en alguna ocasión en una sabemos de sobra que esa emoción se ve recompensada cuando ven pasar a su lado a Gaspar, Melchor y Baltasar. Me alegro que en Gijón/Xixón no se vayan a utilizar dromedarios. Vi en televisión que se trata del mismo propietario de los renos que, lamentablemente, sí callejean desde hace dos años en Nochebuena durante tres horas por Oviedo/Uviéu. Los ayuntamientos tienen ahora un momento ideal para revisar, dentro de sus festejos, qué se puede hacer y qué no con las nuevas normativas (como la ley de bienestar animal).

No todo el mundo ha aprovechado estas fechas para disfrutarlas con quienes más felices nos encontramos (en contra de la corriente consumista que nos hace inundar las áreas comerciales) y pienso sobre todo en quienes consideraron que pasar la Nochevieja en las cercanías de la sede del PSOE en la madrileña calle de Ferraz era lo más conveniente. Son vidas tristes y llenas de rencor y odio, y aunque hay quien considera que estamos en un momento ideal para que ocurran estas cosas (en beneficio de Pedro Sánchez, de cara a escenificar el horror que suponen estas acciones y los comentarios que allí se hacen), yo solo pienso en la que nos hemos librado de leer en el BOE cada una de sus medidas regresivas.

No me parece un momento ideal para fiestas al aire libre pero en Fuente Álamo (Murcia) llevan varios días con una fiesta «rave» que, según parece, no hace daño a nadie. Lo llamativo del asunto es que en las quedadas que hacen sus promotores solo hablan del inicio (con fecha, hora y lugar), pero jamás desvelan cuándo es el final. La verdad es que tiene mucho mérito que sepan congregar a tantísima gente, porque así es muy difícil planificar un desalojo (lo más efectivo para los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado es esperar a que se cansen y se marchen por su propio pie).

Mañana tendremos la segunda y última oportunidad de esta Navidad para conseguir algún pellizco en la lotería del Niño (una vez invertido el dinero obtenido en la sorteada el 22 de diciembre) y volveremos a ver las estaciones de tren y los aeropuertos repletos de gente regresando a sus hogares (aunque las personas que hayan elegido a Iberia se van a haber afectadas por la cancelación de más cuatrocientos vuelos). Es invierno y lo lógico es que haya abundantes lluvias acompañadas de nieve y frío y, por causa efecto, un momento ideal para los virus respiratorios. Se han juntado la gripe A, el coronavirus y la bronquiolitis a la vez y los expertos señalan que todavía no hemos alcanzado el pico, así que lo habitual en estos días es estar rodeado de gente con algún tipo de convalecencia. Preocupa mucho la saturación de las urgencias de los hospitales, provocadas muchas veces por la tardanza de la primera línea (los centros de salud) en atender de manera rápida a toda la población afectada. Lo bueno que veo en mucha gente es que ha adquirido el hábito de utilizar mascarillas si se encuentra mal para no propagar al resto estas enfermedades.