A propósito de la nueva Ley de Educación
02 may 2022 . Actualizado a las 11:59 h.Hoy. Estos días las tertulias, la tele, en la radio y hasta los periódicos impresos se llenan de agoreros. De gente lista, de gente despierta, saben de lo que no saben y hasta de lo que no saben piensan que lo saben todo, aunque no tengan ni idea por eso esta crónica la enfatizo con el título: «Sabenlotodo».
Señores periodistas, ustedes dedíquense a su digna y útil profesión que es la de la información. Informen, con ello ustedes cumplían con sus deberes y el ciudadano tendrá la información que requiere para formarse la idea sobre el tema y del asunto, de la discusión real.
Ustedes, dedíquense a su oficio, a informar, y el profesor a darse conciencia, coraje, empatía, análisis y, siempre al pie del cañón, para ver cómo progresa el alumno cómo avanza en su maduración…
Y, luego, sólo en ese momento, pasarán o no pasarán (promocionarán) a otro nivel con una o dos suspensas, siempre con la valoración adecuada de aquellas personas: profesores, claustro profesores, y todo lo que realmente puede evaluar el progreso, la madurez y los méritos del alumno correspondiente.
Y. no se preocupen, que puede haber alumnos con dos asignaturas sin el guarismo del cinco (5); pero que han obtenido la valoración, evaluación igual a la de otros compañeros/as con guarismos superiores al cinco (5).
Calificamos o medimos la temperatura, los grados del mar, del sol, la velocidad de un coche, del avión con números, con notas cuantitativas. Y, las máquinas, todo se puede medir en esos números, en cantidades, en cifras; pero no el avanzar de la persona y su promoción de un nivel a otro.
No se puede circunscribir a meros datos estadísticos. Hay otros aspectos que son los que tienen que marcar la «nota». No vale con decir el sí o no de la promoción.
Eso tiene que centrarse en las personas y, después, nos diferenciamos por los valores, las actitudes, las capacidades, el esfuerzo, la comprensión, la empatía.
Estos son todos los valores que hay que tener en cuenta para promocionar a un alumno, sobre todo en las etapas básicas.