El derbi del área central

OPINIÓN

27 ene 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Anda estos días el consejero Fernando Lastra, presumible aspirante a ser candidato socialista en las próximas elecciones autonómicas, muy activo en defensa del área metropolitana del centro de Asturias. Se trata de una idea que reverdece de vez en cuando pero que nunca se plasma en nada efectivo, mientras el cogollo central crece y se desarrolla a tirones sin un plan que ordene las prioridades.

La idea sugerente es que juntos los principales municipios de esta zona (Oviedo, Gijón, Avilés, Siero, Llanera y algunos más) y el Gobierno autonómico serán más fuertes que actuando cada uno por su cuenta en materias claves como el urbanismo y sus derivados entre ellos el transporte. Pero hasta ahora este propósito de pura lógica no ha cuajado nunca por las reticencias municipales. Los Ayuntamientos temen perder competencias, dinero y votos. Hay muchas administraciones en España y cada una defiende lo suyo como puede.

Pero sobre todo el problema es el derbi. Una región que se pasa la vida pendiente de un partido de fútbol entre los equipos representativos de las dos principales ciudades y que usa una enorme cantidad de energías en debatir sobre él hasta el infinito difícilmente será capaz de organizarse en torno a una idea común. En cuánto se habla de Asturias como conjunto y del área central como lo que los geógrafos llaman conurbación enseguida resurgen el oviedismo y el sportinguismo que siempre están latentes en cualquier negociación interna. Y no es broma.

De esa rivalidad latente, en la que los demás (léase Avilés principalmente) son meros observadores, han vivido muy bien algunos de los últimos alcaldes (y no hablo solo de Gabino de Lorenzo que la exprimió hasta el final) imposibilitando cualquier acuerdo de principios. Si una parte del ingenio y el esfuerzo que se vuelcan informativa y socialmente en partidos como el de la semana próxima se dedicaran a potenciar el sentimiento común de Asturias hace tiempo que el área metropolitana estaría codeándose con prósperas regiones españoles y europeas.

Pero aquí estamos felices enfrascados con el famoso derbi. Si lo hay miel sobre hojuelas y si no lo hay esperando que llegue. Y mientras tanto los demás avanzan nuestro empeño se dirige desde siempre a vencer, empequeñecer y hasta humillar,  al rival, rara vez a colaborar o coordinarse con él. Así que las posibilidades de que Lastra, que es de Cangas del Narcea y veterano político, consiga algún avance son remotas pase lo que pase en el venidero Oviedo-Sporting. Pero si lo logra habrá dado un gran paso hacia la meta como candidato.