Vivía para la moto

Javier Díaz Pan EXPILOTO GALLEGO DEL MUNDIAL DE MOTOCICLISMO

OPINIÓN

04 ago 2017 . Actualizado a las 08:08 h.

Ángel Nieto es el motociclismo en sí. Todo lo que conocemos hoy en día de este deporte, en España, es gracias a él. Luego hubo otros pilotos como Santiago Herrero, Ricardo Tormo, Jorge Martínez Aspar, Champi Herrero... Pero quien comenzó a escribir la historia fue él.

Tuve el placer de verle las últimas carreras en activo, iba en una derbi, y lo recuerdo como un piloto muy listo, muy cerebral sobre la moto, si tenía que jugarse algo esperaba siempre a la última vuelta. Hay que destacar que en los circuitos que él corría no son los de ahora. Él era un piloto de cilindradas pequeñas y su pilotaje tampoco tiene nada que ver con el que ahora vemos en televisión. Antes, los pilotos no se descolgaban ni rozaban el asfalto como lo hacen ahora gracias a la tecnología.

Luego, una vez retirado, también hay que destacar la gran labor que tuvo de ayuda con los pilotos que empezaban. En el paddok es como un padre para todos. Incluso las vacaciones las pasaba muchas veces con Valentino Rossi en Ibiza. Era una persona muy amable, muy alegre, que le gustaba mucho la fiesta, como a todos. De hecho, él cuando tenía los campeonatos ganados se iba a Ibiza a disfrutar de la isla. Era una persona muy respetada por todos y, por su carácter, también muy querida.

A mí me lo presentaron y todavía guardo muy buena imagen de él. Muy simpático, muy afable, un tío normal, campechano. Porque la gente de las motos es muy sencilla. Al final, aquí todo el mundo sabe quién ha sido piloto y quién se ha subido una moto a 200 kilómetros por hora y por eso nos respetamos mucho entre nosotros. Y en ese sentido, Ángel Nieto siempre estaba dispuesto para cualquier cosa que le pidieras. Vivía para la moto. Para el Mundial y para todo aquel que lo necesitara.

Javier Díaz Pan. Expiloto gallego del Mundial de motociclismo