La intérprete de «Camera Café o «Yo soy Bea» hizo un repaso por su momento vital y sentimental en el pódcast de Vicky Martín Berrocal
20 nov 2024 . Actualizado a las 17:34 h.Ana Milán dice sentirse «serena». «La calma es lo más parecido a la felicidad». Así comenzaba el repaso por su vida la actriz en A solas con, el pódcast de Vicky Martín Berrocal. Recién cumplidos los 51 años -«cumplir 50 me ha parecido un horror»- la intérprete de Física o Química, Amar es para siempre, Paquita Salas, Yo soy Bea o Camera Café se mostraba más vulnerable de lo que suele transmitir en sus apariciones públicas. «Soy fuerte, pero a la vez soy muy permeable, las cosas me dejan huella, lo que me hace daño, me lo hace mucho, pero las cosas que me dejan huella son cosas pequeñas y emocionales».
Al margen de su carrera en la interpretación, la actriz alicantina tiene a día de hoy un pódcast con Sebastián Gallego, La vida y tal, y es muy conocida por sus contenidos en las redes sociales. «El dolor me gusta pasarlo en soledad, no soy tan valiente como para exponerlo», explicó durante la entrevista. «Me ha ido muy bien y muy mal. Lo que pasa que no cuento cuándo me ha ido mal. Enredarse en ser víctima es una trampa», dijo sobre su trayectoria.
Lo más íntimo
Una charla en la que Ana Milán se sinceró sobre su momento vital. «Uno de los problemas de la menopausia es que te pilla con un marido que llevas treinta años y no te gusta nada, pero cuando esto no es así, el cuerpo es sabio y se activa», comentó con humor.
A nivel sentimental asegura estar soltera y en un momento muy diferente «tras años muy sexualizados».
«Yo llegué a estar, en un momento de mi vida, casi tres años, dos años y medio, sin tener ningún tipo de sexo, ni de besos con nadie. ¡Qué etapa más tranquila!», sentenció. «A mí particularmente, el sexo por el sexo me cuesta mucho. El intercambio de fluidos me da perecita, no me gusta. Yo soy bastante demisexual; tengo que estar emocionalmente vinculada», explicó sobre la orientación afectiva en la que se necesita tener un vínculo emocional para sentir atracción sexual. «El deseo lo tengo vinculado al amor. Yo en la próxima vida no quiero ser demisexual», continuó. «¿Y en la primera noche un beso? Pues a los veintitantos...de tardar semanas. No sé por qué te estoy contando eso».
«A mí un hombre no me puede resultar atractivo solo por ser guapo», siguió, aclarando que le gustan los hombres «muy corteses».
Ana Milán definió ese momento «en el que te gusta alguien» como «bastante milagro». «Me parecen bonitos los nervios de una primera cita, sentir el deseo de un primer beso...», añadió.
Con todo, asegura que ha tenido parejas «muy interesantes» y se ha casado en dos ocasiones. «Estar casada es muy distinto a lo que yo pensaba de estar casada». La actriz contrajo matrimonio en el 2014 con el también actor Fernando Guillén Cuervo. Previamente, en el 2011, se había casado con Jorge Juan Pérez, de quien se separó al año de su enlace. «Yo creo que me casaré otra vez».
En el 2023 a Milán se la relacionó con el gallego Luis Gestal, aunque su primera pareja conocida de la artista fue el cantante Paco Morales, con quien tiene un hijo de 23 años, Marco. «No he hecho nada más difícil en mi vida. Me considero una madre tan torpe. He sido tan soberbia con mi madre pensando que era facilísimo. Para que la maternidad sea fácil, necesitas toda una tribu alrededor», sentenció al tiempo que añadió. «Nada ha sido tan difícil, pero tan bello tampoco. No todas las mujeres por el hecho de poder parir estamos preparadas para ser madres. Yo no lo estaba y creo que sigo sin estarlo».