El exduque de Palma acudió a buscar a su novia, Ainhoa Armentia, al trabajo muy nervioso y rompió a llorar durante veinte minutos
17 ago 2022 . Actualizado a las 18:55 h.Hace siete días las revistas dejaron la imagen de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin juntos de nuevo en la playa de Bidart donde pasaron los mejores veranos de sus vidas como familia. Este año se reunieron allí de nuevo por unas horas para estar con sus hijos y vivir con normalidad a su proceso de separación. Este miércoles es el exduque de Palma el que protagoniza la portada de Diez Minutos con unas imágenes desgarradoras. En ellas puede verse al todavía cuñado del rey Felipe VI llorando de forma desconsolada en plena calle en el interior de su coche.
Según cuenta la revista en exclusiva, la escena del llanto se produjo a las puertas del despacho de abogados donde trabaja Ainhoa Armentia y donde él mismo prestó sus servicios cuando obtuvo el tercer grado penitenciario. El exdeportista acudió a ver a su novia al trabajo en mitad de la jornada laboral. En cuanto ella subió al vehículo, el exmarido de la infanta se mostró muy nervioso y alterado mientras le detallaba a su pareja el motivo de su preocupación. Su estado de angustia provocó que se deshiciera en lágrimas en plena calle.
La revista relata que Ainhoa Armentia, la mujer con quien fue fotografiado por primera vez el pasado mes de enero, intentó por todos los medios tranquilizar al exduque, pero este no parecía tener consuelo. Así permanecieron en el coche por espacio de veinte minutos. Transcurrido ese tiempo, su novia se despidió de él y salió del coche para regresar a su puesto de trabajo, mientras Urdangarin arrancaba y se alejaba del lugar.
Se desconocen las causas del desasosiego de Iñaki Urdangarin, pero la escena desvela que no está atravesando un buen momento en el terreno personal después de estos meses convulsos en los que su matrimonio con la infanta Cristina saltó por los aires tras salir a la luz unas imágenes suyas paseando de forma romántica con Ainhoa Armentia.
El proceso de divorcio sigue adelante desde que la pareja firmó a finales de marzo el documento que regula las condiciones económicas ya definitivas de la disolución del matrimonio. Esto puso fin a su vínculo económico con la disolución de las capitulaciones matrimoniales, que habían firmado antes de su boda en Barcelona en octubre de 1997.
Ambos se casaron en régimen de separación de bienes y acordaron en un documento cómo se procedería en el caso de un supuesto divorcio, asesorados por abogados del Estado al servicio de la casa real. Una vez cerrados los términos económicos, el divorcio está en estos momentos pendiente de la resolución judicial que deberá decidir sobre la custodia de Irene, la única de los cuatro hijos de la pareja que es todavía menor de edad. Cumplirá 18 años en el 2023 y por el momento estudia en Suiza, por lo que la infanta residirá en este país mientras ella concluye su formación.
Según precisó en su momento la revista Semana, Urdangarin no deberá pasar una pensión alimenticia a la infanta ni tampoco recibirá pensión compensatoria a pesar de las diferencias económicas entre ambos miembros de la pareja. El exjugador de balonmano, que está en estos momentos sin empleo conocido, explicó hace meses en una entrevista que está intentando «construir un nuevo futuro» y terminando su formación como entrenador.