El «reality» se ha visto obligado traer a los concursantes a España e improvisar un última parte del programa alternativa
28 may 2020 . Actualizado a las 00:06 h.La crisis sanitaria provocada por el coronavirus ha obligado a reinventarse en muchos sectores, también en la televisión. Atrás quedan las semanas del confinamiento más duro en las que programas como Zapeando, El intermedio, Late Motiv y Lo de Évole se hacían desde casa. Hasta El Hormiguero tuvo que parar una semana para reinventarse y valerse de las videollamadas para seguir con sus entrevistas. La academia de OT tuvo que cerrar sus puertas, y hace apenas dos semanas que los concursantes volvieron a ellas. Únicamente los programas de corte informativo, Sálvame y Supervivientes resistieron en la parrilla, aunque con estrictas medidas de seguridad (sin público, acortando galas y sin servicio peluquería y maquillaje). Y en el caso de Galicia apenas han seguido emitiéndose Luar, Malicia Noticias y Land Rober en el prime time de la TVG.
Ahora, con unas medidas de alivio que han hecho un poco más llevadera la situación de la pandemia del covid-19 en España, Supervivientes ha tenido que improvisar una recta final nunca imaginada para el reality estrella de Mediaset, que supera en numerosas ocasiones el 30 % de cuota de pantalla en sus galas y que ya logrado que trasvasar a Cuatro parte de esa audiencia en una estrategia que bautizó hace un año como televisión transversal. Los concursantes fueron repatriados una semana antes de lo habitual, tras la aprobación por parte del Gobierno de la cuarentena obligatoria de catorce días para todo aquel que llegue a España desde cualquier país extranjero. Desde Exteriores justifican esta medida, que al parecer está previsto que se mantenga hasta el próximo 1 de julio por la finalización del confinamiento para los residentes en España y para controlar que el virus no se expanda.
Todo el equipo de Supervivientes en Honduras, con Lara Álvarez a la cabeza, junto a Ana María Aldón, Albert Barranco, Rocío Flores, Jorge Pérez y Hugo Sierra, además de Elena Rodríguez, la última expulsada, llegaron a Madrid ayer martes entre grandes medidas de seguridad y con numerosos fotógrafos que les esperaban a su llegada. Se vivieron momentos de mucha tensión en el aeropuerto. Los concursantes sabían desde hace semanas la situación que se vivía en España, pero vivieron con cierto shock la situación que se encontraron al aterrizar, perpetrados con mascarillas y guantes, al igual que la policía nacional que velaba por su seguridad, medios de comunicación y todo aquel con el que se cruzaba. El país al que volvían es muy diferente al que dejaron a finales de febrero.
La noche del martes se emitió la última gala de Supervivientes: Tierra de Nadie, que presenta Carlos Sobera, primero en Telecinco y luego en Cuatro. El presentador aseguró que se trataba de la última que se emitía en esa edición del reality y en la pantalla se anunciaba la semifinal del programa el próximo jueves, donde o Jorge o Barranco serán expulsados.
Con estos datos, no dejan de sucederse las preguntas sobre cómo será la final de Supervivientes. Y sobretodo cuándo. La última expulsada y los que aún concursan en el reality no son los únicos en cuarentena obligatoria. Ivana Icardi y José Antonio Avilés, que llegaron a España hace apenas unos días, también están en sus casas confinados sin poder salir a la calle, como han tenido que ir haciendo todos los expulsados semana a semana. Solamente Bea Retamal pudo acudir al plató cuando llegó de Honduras. El resto han ido llegando a cuentagotas, cada vez con más complicaciones a medida que aumentaban las restricciones en las fronteras.
¿Cuándo será la final de «Supervivientes»?
Mediaset se ha tenido que enfrentar al repatriar a los concursantes antes de lo previsto (eso sí en un avión privado de Air Europa, como mostró el programa de ayer) a algo insólito y con numerosas incógnitas. Las primeras se empezarán a despejar el próximo jueves, cuando uno de los dos nominados sea expulsado y se quede a las puertas de la final. Sin los concursantes en Honduras habrá qué ver donde se encuentran y si conectan con ellos. Se sabe que están juntos en un complejo hotelero, pero no se conoce cual (lógicamente por medidas de seguridad y para preservar las condiciones de aislamiento) y en unas condiciones de alimentación parecidas a las que vivían en Honduras, dentro de lo posible. El concurso ya ha tenido que adoptar este tipo de medidas en anteriores ocasiones, por ejemplo cuando María Jesús Ruiz tuvo que acudir a España durante el reality por un juicio con el padre de una de sus hijas.
Carlos Sobera dio una pista de que la final podría dividirse en la varias partes. «El próximo jueves comienza la primera parte de la final de Supervivientes. No se sabe si habrá dos partes, tres partes,...», decía en tono jocoso.
Mediaset ha adelantado que en la gala del próximo jueves 29 de mayo, los concursantes recibirán la visita sorpresa de sus familiares más cercano, unos emotivos encuentros que se llevarán a cabo de «un modo original y respetando siempre los protocolos de seguridad». Además tras la expulsión, deberán volver a luchar por la inmunidad y se enfrentarán a una prueba con una jugosa recompensa.
Lo que está claro es que el programa tiene que contar dos semanas para que los concursantes aterrizaron en España, el 26 de mayo, hasta que terminen la cuarentena obligada de quince días. Con esas cuentas, la gran final de Supervivientes (o al menos una final como las de los últimos años, con los concursantes en plató y recibiendo el maletín con el jugoso premio del ganador el año pasado) no podría celebrarse antes del 10 de junio, un miércoles.
A los concursantes de Supervivientes se les ha visto fugazmente en el aeropuerto de Barajas, en unas imágenes que generaban cierta angustia con el ataque de nervios que sufrió Ana María Aldón, al parecer y según comentaban ayer en el programa, porque escuchó (a pesar de llevar cascos) un comentario de uno de los reporteros que estaban esperándola. Allí se subieron en un microbús y con el equipo de Supervivientes, incluida Lara Álvarez, rumbo a un complejo hotelero donde pasarán la cuarentena.
Algunos fans de realities con que los Supervivientes especulaban con que pasasen la cuarentena en la casa de Gran Hermano, situada en Guadalix de la Sierra. También hubo quien elucubró con la teoría de que ellos fuesen los primeros habitantes de La casa fuerte, el concurso que ocupará el lugar en la parrilla de Supervivientes, que presentará Sonsoles Ónega y el omnipresente Jorge Javier Vázquez. Es probable que muy pronto se emitan algunas imágenes de los concursantes, ya que sería complicado estirar dos semanas más el concurso con las imágenes de lo ocurrido en Honduras. Aunque bien es cierto que en Mediaset saben bien generar tramas entre los personajes y retroalimentarlas de un programa a otros.
Los más seguro es que el próximo jueves el programa conecte con los concursantes y con Lara Álvarez desde el complejo hotelero y el concurso se desarrolle de una forma parecida a lo que se haría en Honduras, salvando las distancias. E incluso que puedan desarrollar pruebas como hacen en cada gala. Lo que está claro es que ha puesto aún más el foco en Supervivientes, uno de los programas más vistos de la televisión generalista.
La reflexión de Lara Álvarez
Al poco de aterrizar en España, Lara Álvarez colgaba una reflexión en Instagram. «Hasta pronto Honduras. Gracias un año más por tu generosidad y por tratarnos tan bien. Hola de nuevo España. Ya estamos aquí. Y aunque aún no te reconozco y verte así me parte el alma, sé que volveremos a recuperarte. ADMIRACIÓN absoluta por todos vosotros, aquellos que de manera responsable y consciente, os protegéis y nos protegéis día a día, desde hace meses, ante esta nueva realidad. GRACIAS», escribía.