El confinamiento nos está permitiendo entrar en lugares a los que nunca habíamos podido llegar hasta ahora. Hace unos días pudimos conocer el sofisticado despacho de la reina Máxima de Holanda y ahora hemos podido echar un vistazo poco frecuente a otro lugar de trabajo: el de la reina Letizia. Aunque el despacho del rey Felipe VI, con sus librerías y paredes de madera noble, lo tenemos más visto, la reina no se deja ver frecuentemente el lugar donde desarrolla su labor fuera de los actos públicos. Igual que sucede a la hora de vestirse, el estilo de las reinas holandesa y española a la hora de decorar también son radicalmente opuestos. Aunque en sus comienzos empezó a trabajar en un entorno más clásico y tradicional, el despacho de Letizia es hoy un lugar luminoso y completamente blanco, desde la mesa y las sillas a las paredes y los cuadros. Sin apenas adornos, el mobiliario y las lámparas son de diseño sencillo, moderno y muy funcional, lo que revela un rasgo de su personalidad. Y ahora, en tiempos de pandemia, está presidido por una enorme pantalla de televisión a través de la cual se reúne por videoconferencia.
Aplauso
El príncipe Guillermo no ve programas sobre realeza. Los duques de Cambridge y sus hijos están confinados en su residencia de campo Anmer Hall, en el condado de Norfolk, a cuyas puertas salieron estos días con sus tres hijos para aplaudir a los sanitarios. Desde allí, el príncipe Guillermo apareció a través de videollamada en el programa del humorista Stephen Fry The Big Night In, de BBC One. En él habló de las series y programas que le gustan y, sorpresa, confesó evitar ver «cualquier programa sobre realeza».