Un tribunal juzgará por «corrupción moral y social» a Sahar Tabar, que usa el Photoshop y maquillaje para publicar imágenes en las que se parece a la actriz
07 oct 2019 . Actualizado a las 19:44 h.La iraní Sahar Tabar saltó a la fama por sus fotos en su cuenta de Instagram: parecía una especie de caricatura de Angelina Jolie. Pómulos afilados, labios gruesos, lentillas azules, extremada delgadez... Gracias al maquillaje y a Photoshop lograba unas imágenes en las que parecía que habían pasado a la intérprete por el filtro de Tim Burton. Llegó a tener que desmentir que no se había sometido a cincuenta operaciones de cirugía estética para parecerse a la estrella de Hollywood, sino que utilizaba los retoques fotográficos y la caracterización para divertirse y entrener a sus miles de seguidores. «Es solo para pasarlo bien», afirmó. Pero la agencia iraní Tasnim informa ahora que Sahar Tabar ha sido arrestada por orden de las autoridades locales, que la acusan de blasfemia. La misma fuente señaló que un tribunal de Teherán la juzgará por «crímenes culturales y corrupción moral y social», pero no aclara fechas ni del arresto
Al parecer, las autoridades consideran que esta mujer incita a la violencia, obtiene ingresos usando medios inapropiados e incita a los jóvenes a la corrupción. Ella ha estado publicando numerosas fotografías que se inspiran en la exmujer de Brad Pitt. En alguna de ellas incluso mostraba un vendaje en la nariz, supuestamente porque acababa de someterse a una rinoplastia, una operación de cirugía estética que es muy popular entre las mujeres de Irán, donde cada año se realizan decenas de miles de intervenciones de este tipo.
Instagram es la única de las grandes redes sociales del mundo que todavía no ha sido prohibida por el Estado iraní, que sin embargo sí mantiene vetado el acceso a compañías como Facebook, Twitter y Telegram. Pero frecuentemente se publican informaciones que indican que el Gobierno del país está planteándose cerrarles también el grifo a los instagramers para impedir que continúen difundiendo ideas y mensajes occidentales que se desmarcan de los preceptos defendidos por el régimen, como ocurre con Sahar Tabar.