Un torturador se cuela en el Palacio de Kensington con los niños dentro

la voz REDACCIÓN

INFORMACIÓN

Darren Benjamin, que ahora es repartidor de muebles, fue condenado por torturar con agua hirviendo y puñaladas a su víctima

30 jul 2019 . Actualizado a las 20:30 h.

Las alarmas de seguridad han saltado en la familia real británica. Según han informado medios ingleses, un expresidiario llamado Darren Benjamin, que es ahora repartidor de muebles, ha podido acceder al Palacio de Kengsington para descargar una serie de objetos que habían sido encargados por la realeza. Darren Benjamin, condenado a siete años de prisión después de haber torturado a su víctima, Anthony Powell, clavándole varias puñaladas y lanzándole agua hirviendo, habría accedido al recinto cuando los Duques de Cambridge estaban en el interior con sus hijos: Louis, Charlotte y George.

El medio The Sun asegura que Benjamin consiguió entrar en las dependencias privadas de los Duques de Cambridge e, incluso, acercarse a los pequeños de la familia, George, Charlotte y Louis, quienes se encontraban jugando en el patio al cuidado de su niñera, María Teresa Turrión Borrallo.

A raíz del suceso, los miembros del equipo de seguridad ya están revisando todos los protocolos de control y seguridad, aunque un representante directo del palacio ha explicado públicamente que todas las entregas a los estados reales operan bajo estrictas normas, lo que implica la admisión solo de paquetes conocidos, la verificación de identidad al ingresar y el acompañamiento del conductor y vehículo por la fuerza de seguridad del palacio.

Esta es la segunda vez que se da un caso de alarma dentro de los muros de una residencia de la familia real solo en este mes. El pasado 11 de julio un hombre consiguió burlar la seguridad del Palacio de Buckingham con la Reina Isabel II dentro. El joven de 22 años no consiguió llegar hasta las dependencias de la Reina, pero consiguió saltar las vallas y llegar hasta el edificio.

En el caso del Palacio de Kensington, que tiene una parte abierta al público, las medidas de seguridad se han indo incrementando con el paso de los años, especialmente tras el nacimiento de los hijos de los Duques de Cambridge. La principal medida tomada para proteger la intimidad de la familia ha sido aumentar las vallas que rodean el palacio e incrementar el número de árboles del jardín, creando así un espacio impenetrable para los mirones. Además, todas las entradas cuentan con avanzadas medidas de seguridad, que funcionan las veinticuatro horas del día. Aun así, anualmente se siguen conociendo casos de altercados en los palacios ingleses, que dejan el sistema de seguridad de la realeza en entredicho.