Las redes sociales cuestionan los métodos de crianza de la presentadora, que algunos tachan incluso de «maltrato infantil»
06 sep 2016 . Actualizado a las 07:41 h.Primero fue su peso, después el peculiar nombre que escogió para su hijo y ahora su calidad como madre. Tania Llasera vuelve a estar en el centro de la diana. ¿Qué ha hecho esta vez que tanto ha indignado a sus seguidores y, por contagio, a los charlatanes de Twitter, que de todo saben y de todo entienden? Dejar llorar a su pequeño Pepe Bowie. «Tranquilas que se queda dormido en nada. Esta sobreexcitado hoy, pasado de rosca», escribía la presentadora el pasado viernes en su Instagram junto a un primer plano de su cara y su perro. De fondo, su retoño berreando.
El pasotismo de Llasera ante el llanto de su hijo ha desatado una oleada de criticas, que van desde el disgusto hasta la condena más rotunda. Las más crueles han llegado a tachar a la presentadora de «mala madre» e incluso de «maltratadora».
Tania, acostumbrada ya a las reacciones airadas, ha respondido tranquilamente, con otro vídeo en el que Pepe aparece feliz, poco afectado por el poco caso que su madre le hace a su llanto.
Hace unos meses, la presentadora estalló. Consciente de estar expuesta públicamente, tanto por su profesión como por la cantidad de información sobre su vida privada que suele colgar en las redes, se confesó cansada de soportar «enzarzamienros y gente gris que piensa que piensa mal», harta de que sus seguidores cuestionasen cada uno de sus movimientos. «Basta», pidió. «No puedo ni quiero dar ya más explicaciones».