La superstición de los asturianos en busca del Gordo: «Te piden la fecha de la dana o la terminación en 24»
GIJÓN
«Lo del número 13 es una pasada, lo quiere muchísima gente. Luego también vienen buscando la terminación en 22 o 69», relatan los trabajadores de administraciones sobre las peticiones más habituales de los clientes
20 dic 2024 . Actualizado a las 05:00 h.La cuenta atrás para la celebración del sorteo de la Lotería de Navidad 2024 encara su recta final. Mientras algunos apuran las últimas compras de décimos en busca de la fortuna, otros desempolvan ahora la superstición para lograr que este año, por fin, les caiga el Gordo. Los empleados de las administraciones de lotería están ya más que familiarizados con las extrañas peticiones que pueden llegar a hacer los clientes, desde quienes buscan una terminación en concreto hasta quienes rechazan, por ejemplo, los números bajos.
«Esta vez te piden la fecha de la dana o la terminación en 24, como el año que acaba», cuenta María del Rosario Martínez, quien atiende en la ventanilla de la administración número 20 de Gijón, ubicada en la avenida de la Argentina. Según Martínez, los números impares tienen más tirón entre los compradores, especialmente el 5 y el 7, «los que mejor se venden». También las terminaciones con repetición de números gustan a cierto sector del público, cuenta la lotera, con preferencia de nuevo por los impares: «El 99 o el 77 se piden mucho».
Sobre el volumen de ventas este año, Martínez cree que ha habido cierto repunte, especialmente en administraciones: «En ventanilla se está vendiendo más que otros años, aunque parece que aflojó en bares y otros locales que juegan participaciones». La trabajadora cree este sorteo de Navidad es «el más especial» por las fechas y la tradición, que parece contagiarse entre generaciones: «La gente mayor es la que más juega a la lotería, pero este sorteo también mueve mucha gente joven».
Aunque en alguna que otra ocasión ha repartido algún premio de Lotería de Navidad, nunca el Gordo ha caído en esta esquina de La Calzada. Si este fuera el año, Martínez tiene claro que lo celebraría por todo lo alto: «No puede haber mayor alegría para un lotero que hacer feliz a tanta gente».
A pocos metros se encuentra la administración número 27, junto al Ateneo Obrero. María Díaz confirma que ha sido un año de muchas ventas de lotería: «Parece que la gente lo necesita». Como no podía ser de otra forma, cada cliente tiene sus peculiaridades y gustos. «Lo del número 13 es una pasada, lo quiere muchísima gente. Luego también vienen buscando la terminación en 22, 69 o el 15», relata. Algo que se repite cada año por estas fechas y que no pilla por sorpresa a los trabajadores de las administraciones: «Es más o menos lo de siempre», añade. «Como nos toque aquí el Gordo, yo corto la calle. Me tienen que llevar esposada, armo la de San Quintín», bromea Díaz, quien comparte la misma ilusión que todos cuantos han comprado un décimo.
El punto de venta de lotería ubicado en el número 14 de la calle Gran Capitán es uno de los más buscados por los compradores, pues parece estar tocado por una varita este 2024. Hasta dos grandes premios llegó a repartir durante el pasado verano, en un lapso de tan solo diez días, si bien nunca han repartido tanta suerte para el sorteo de Navidad. «Este es el que más gente juega, todo el mundo se reserva para este momento del año esperando que toque algo», cuenta Aylín Torres, quien cree que la tradición también lleva a muchos clientes a «esperar a última hora para comprar el décimo».
La lotera ratifica a sus compañeras de otras administraciones en cuanto a la superstición de los compradores: «El 13 es el primero que se vende. Cuesta mucho conseguirlo, pero nosotros todos los años lo solemos tener en máquina», sostiene, aunque añade que «se agota al poco de salir a la venta». Torres también cuenta que algunos clientes buscan décimos asignados a poblaciones donde han ocurrido catástrofes «porque piensan que ahí van a tener más suerte». Tras haber repartido un quinto premio en 2023, la lotera vaticina que este es el año del Gordo: «El domingo tenemos aquí una charanga, voy a traer champán», comenta entre risas.
No muy lejos, entre los bloques de El Cerillero, se encuentra el punto de venta número 35630, en un comercio donde se venden artículos de decoración y bisutería, además de poder participar en todos los juegos de Loterías y Apuestas del Estado. Allí, Paula Martínez manifiesta que el éxito de este sorteo de Navidad reside en su longevidad y arraigo: «Es algo de toda la vida. Es un premio que se comparte, que juegas por si acaso». «Si por ejemplo vas todos los días a un bar a tomar el café y tienes allí el décimo, te da palo no comprarlo. Aquí igual, siempre tenemos un número de la casa», dice la dependienta. Sobre las creencias y peticiones de sus clientes, considera que los números que empiezan por 0 «a la gente no le suelen gustar» aunque matiza que «el 0 sale mucho». «También hay muchos que buscan números repetidos. Tengo unos clientes que siempre me piden terminación en 777, para todos los sorteos», relata, para finalmente sentenciar que «hay manías de todo tipo».