¿Qué le pide Gijón al proyecto de Tabacalera?

Marcos Gutiérrez GIJÓN

GIJÓN

Futuras instalaciones del Centro de Arte Tabacalera, en Gijón
Futuras instalaciones del Centro de Arte Tabacalera, en Gijón Ayuntamiento de Gijón

Vecinos, asociaciones y miembros del entramado social de la ciudad valoran el impulso definitivo a un proyecto por el que se lleva «muchos años esperando», si bien creen que en su desarrollo y dotación de usos se debe contar necesariamente «con la colaboración del tejido cultural y asociativo»

21 jul 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

El Centro de Arte Tabacalera está cada vez más cerca de ser una realidad. Si todo marcha según lo previsto, en algo menos de tres años abrirá sus puertas un edificio que proporcionará a Gijón una nueva dimensión en lo que respecta a su oferta cultural y artística, así como a la estructuración de algunos de sus servicios públicos y administrativos.

Las opiniones en torno a la iniciativa son eminentemente positivas entre la clase política y más cautas entre vecinos y entidades culturales. Estos últimos creen necesario un mayor diálogo con los diferentes actores de la ciudad a la hora de determinar los usos finales del edificio, así como la manera en la que va a interactuar con Cimavilla.

El proyecto

Las obras del Centro de Arte Tabacalera estarán en ejecución en 2025 y se podrá inaugurar el equipamiento en 2027. Este anuncio se produjo el pasado viernes durante la presentación en sociedad de este equipamiento, que será un «referente cultural» para la ciudad y la región, en palabras del concejal de Infraestructuras Urbanas y Zona Rural de Gijón, Gilberto Villoria.

El equipamiento contará con 13.000 metros cuadrados construidos y 10.000 útiles, fruto de un esfuerzo inversor de casi 21 millones de euros. Se estructurará a partir de dos áreas diferenciadas: la conformada por la restauración de la fábrica de tabacos y la antigua iglesia, y otra zona de nueva construcción destinada a administración. Estos espacios estarán conectados por una cubierta vegetal y 1.500 metros de zona verde.

El equipamiento administrativo de nueva construcción permitirá acceder desde el recibidor al auditorio soterrado, que contará con 400 plazas de capacidad. La primera y segunda planta serán el nuevo hogar de la Fundación Municipal de Cultura, mientras que la tercera servirá para reubicar el Museo Nicanor Piñole.

Futuras instalaciones del Centro de Arte Tabacalera, en Gijón
Futuras instalaciones del Centro de Arte Tabacalera, en Gijón Ayuntamiento de Gijón

En lo que respecta al edificio histórico, el sótano servirá como almacén de obras. En la planta baja estará el Museo de Gijón. Los otros niveles acogerán exposiciones y la iglesia servirá como emplazamiento para diferentes representaciones y actividades culturales.

Una apuesta «de ciudad» por la cultura

Los representantes políticos de la región han valorado el Centro de Arte Tabacalera como una apuesta por la cultura en el que se pueden apoyar futuras iniciativas que tengan lugar en Gijón. Sin ir más lejos, el presidente del Principado, Adrián Barbón, celebró el avance de un proyecto que, explicó, nació siendo Paz Fernández Felgueroso alcaldesa y que continuó durante el mandato de la también socialista Ana González.

En su opinión, «todo lo que sea apostar por la cultura» y por la recuperación de espacios para la ciudadanía «es una buena noticia».

Durante el acto de presentación del proyecto, la alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón, valoró la iniciativa como «una apuesta que mereció la pena» por parte de su equipo, y «un triunfo de todos». Moriyón insistió en que se trata de un «proyecto de ciudad», así como un modelo en el que apoyarse para emprender otros «decisivos para el Gijón del mañana».

Futuras instalaciones del Centro de Arte Tabacalera, en Gijón
Futuras instalaciones del Centro de Arte Tabacalera, en Gijón Ayuntamiento de Gijón

Más consenso con los vecinos

Pese a que los vecinos de Gijón han recibido el proyecto de manera positiva, matizan que sería deseable un mayor consenso a la hora de definir la manera en la que el equipamiento se imbricará en una zona como Cimavilla, en la que el Gijón de ayer y el de mañana se dan la mano. Manuel Cañete, presidente de la Federación de Asociaciones Vecinales de Gijón, resalta que se trata de un proyecto que «aparentemente suena bien», si bien matiza que la sociedad gijonesa lleva «muchos años esperando» por él, en el sentido de que «ya hace dos mandatos que se planteó».

Es por esto que, pese a todo, «cuesta trabajo creerse que va a ver la luz». Cañete habría deseado «una información más exhaustiva para los vecinos» por parte del Ayuntamiento acerca de un proyecto que, a su juicio, «tiene que estar imbricado en el proyecto de reforma integral del barrio de Cimavilla».

En este sentido, echa en falta una «reflexión conjunta como ciudad y barrio» en torno a «un proyecto ambicioso», con 21 millones de inversión total. En esta línea, el presidente de la FAV apunta que no deja de sorprenderle el hecho de que «esas mismas cantidades no se barajen para otros proyectos que serían interesantes para la ciudad».

Un debate en torno a los usos

El presidente del Ateneo Obrero, Luis Pascual, destaca que «el edificio como contenedor es espectacular y cualquier rehabilitación que se produzca va a dar lugar a un espacio físico de muchísima presencia». En esta línea cree que va a generar «un impacto visual positivo como edificio» en la zona.

Pese a todo, al igual que el presidente de la FAV, Luis Pascual considera que «como proyecto cultural y de ciudad le falta una parte de consenso sobre los usos». Y es que, desde su punto de vista, «no puede ser solo un Gobierno municipal, sea cual sea, el que decida el plan de usos».

Futuras instalaciones del Centro de Arte Tabacalera, en Gijón
Futuras instalaciones del Centro de Arte Tabacalera, en Gijón Ayuntamiento de Gijón

Estima que sería más que saludable «un debate para consensuar, porque es algo que va a quedar ahí y no debe hacerlo a disgusto de nadie». También el proyecto le genera «varias dudas en cuanto a contenidos». El presidente del Ateneo Obrero no está «del todo convencido de que el Museo Piñole tenga que ir allí, a una tercera planta».

Por otro lado cree que «las salas de exposiciones deben existir» y ve el uso de la capilla como espacio de eventos culturales como «una buena idea». Sin embargo plantea sus reservas «sobre si las dependencias de la Fundación Municipal de Cultura tienen que ir allí».

También considera que el auditorio, «que visualmente es de una presencia importante, tiene que ser polivalente», en el sentido de que en su programación quepan «desde charlas y conferencias a proyecciones de cine, actuaciones musicales, mini conciertos o teatro de pequeño formato».

En otro orden de cosas, le ha llamado la atención la «ausencia del Festival de Cine» en la presentación del proyecto, ya que «en su día se habló de la posibilidad de albergar la parte administrativa y la de proyecciones». Explica que «otras Tabacaleras, como la de San Sebastián, si tienen estas dotaciones».

Un espacio para la ciudadanía

Pedro Roldán, presidente de la Sociedad Cultural Gijonesa, opina que es «importante que los proyectos estratégicos que llevan largo tiempo bloqueados empiecen a reactivarse». En este sentido, con el anuncio del inicio de las obras de este equipamiento, «se empieza a ver la luz al final del túnel».

Roldán considera que «la parte del modelo arquitectónico parece muy interesante» y tiene elementos que son «muy positivos», como el espacio de salón de actos, «ya que Gijón adolece desde hace mucho tiempo de un espacio polivalente de un tamaño importante, pues hablamos de unas 400 plazas».

Futuras instalaciones del Centro de Arte Tabacalera, en Gijón
Futuras instalaciones del Centro de Arte Tabacalera, en Gijón Ayuntamiento de Gijón

También considera muy interesante «la parte del proyecto más ligada a unos usos polivalentes, como es la de la antigua iglesia, con una mayor flexibilidad, incluso de horarios, lo cual es importante». En esta línea, resalta que es necesario «seguir desarrollando el proyecto y contando para ello con la colaboración del tejido cultural y asociativo de la ciudad».

Y es que, a su juicio, Tabacalera «no solo es algo para el barrio, sino para la ciudad». El presidente de la Sociedad Cultural Gijonesa apunta la necesidad de que Tabacalera «más que un motor de atracción de turismo, sea un espacio que desarrolle y dinamice la vida cultural de Gijón para la ciudadanía».

Asimismo, considera el edificio como «uno de los espacios más adecuados para albergar la futura Filmoteca de Asturias», a la manera de la que se ha tejido «el ecosistema cultural de la Tabakalera de San Sebastián». No obstante, admite que «el traslado del museo Piñole no tengo claro si es una buena idea o no».