
La tienda gijonesa confecciona trajes tradicionales para grupos de baile y bandas de gaitas. Además, elabora instrumentos asturianos como panderetas, castañuelas o panderos cuadrados
23 jun 2024 . Actualizado a las 11:09 h.Desde grupos de baile hasta bandas de gaitas, Vezos y Costumes es uno de los pocos talleres del Principado que les sigue confeccionando su indumentaria tradicional. El folklore asturiano continúa siendo uno de los grandes signos de identidad del Principado. Sus bailes y su música tradicional encandilan a todo aquel que los descubre. Aunque, esta tradición no podría continuar su legado si no fuera por la labor de talleres textiles como Vezos y Costumes, una popular tienda gijonesa ubicada en el centro de la ciudad.
En 1998, el matrimonio conformado por María Gloria Roza y Ángel Vega abrieron las puertas Vezos y Costumbres, un gran proyecto de artesanía asturiana al que años más tarde se uniría su hija Raquel Vega. María Gloría comenzó su andadura en el mundo de la confección desde joven, «siempre se dedicó a coser, desde cometas, bolsas de deporte, etc. También cosía para colegas. Después, empezó a ir a un curso de baile tradicional de la Universidad Popular, fue entonces cuando empezó a hacer indumentaria. Desde ahí, se especializó y fue poco a poco aprendiendo observando piezas testigo, fotografías, grabados, artículos y testamentos», comenta su hija. A su vez, Ángel se dedicaba a la talla de madera, lo que le llevó a elaborar panderetas. «Comenzó haciéndolas para casa y luego para grupos. Con el tiempo, gente que ya no era amiga, las comenzó a demandar». Fue entonces cuando ambos decidieron abrir la tienda cara al público. Hoy en día, es el único local de Gijón que se dedica en exclusiva a la confección de la indumentaria tradicional asturiana.
En el 2004, tras años aprendiendo el oficio a través de su madre, Raquel se unió al proyecto. Aunque estudió hostelería, a la salida del instituto «venía con mi madre a coser. Al principio, me daba cosas sencillas para hacer y cada vez iba haciendo más. Fue como aprendí; todo fue a través de ella». En el 2020, tras la jubilación de su madre, Raquel se quedó al mando de Vezos y Costumes y, desde entonces, es la encargada de dar forma a los trajes tradicionales que se lucen por algunas partes de Asturias.
El taller se centra principalmente en la confección de la indumentaria tradicional que se utilizó en Asturias desde mediados del siglo XVIII hasta finales del XIX, lo hacen basándose en piezas originales, testimonios gráficos y orales. Para su confección utilizan materiales como el lino, la estameña, el sayal y los paños. Su objetivo principal es conseguir reproducir de manera rigurosa la vestimenta de aquella época, una indumentaria que habitualmente «se confunde con el traje regional», explica Raquel. «Mucha gente todavía confunde el traje regional, que tiene unos 70 años, con la indumentaria tradicional. La indumentaria tradicional es la vestimenta que usaban a diario los asturianos y las asturianas, ya sea en un ámbito más rural o trabajo, o más festivo. La mayoría de las documentaciones se refieren a días más señalados en los que la gente se vestía un poco mejor; igual que ahora vamos de diario o vamos para una boda. El traje regional popularmente conocido, que es rojo, negro y blanco, es un uniforme que se impuso cuando la dictadura. La hermana de Francisco Franco instauró ese uniforme para toda España, con algunas diferencias en cada región, para hacer concursos de coros y danzas. En esa época, la indumentaria era otra totalmente diferente. Yo hago la indumentaria con la que se vestía la gente llana».
La vestimenta asturiana continúa atrayendo a todo tipo de público. No hay mes en el que Vezos y Costumes no tenga la agenda llena. Y, aunque según explica la joven costurera, «ha habidos años mejores y peores, ahora mismo hay bastante demanda. Tengo muchísimo trabajo y las listas de espera cada vez son más largas». Gente de todas las edades acude al taller para confeccionar sus trajes, desde los que empiezan de jóvenes hasta quienes han decidido retomar la tradición años después. «Hay gente de 60 y pico que se jubila y decide retomar el baile». Las panderetas, los panderos cuadrados y las castañuelas son otros de los artefactos más vendidos de la popular tienda gijonesa. Además, cuentan con una Guía Práctica de la Indumentaria Tradicional en Asturias.
Además, Raquel imparte cursos de confección en los que la gente aprende a crear sus propios trajes tradicionales. «Ahora mismo, estoy dando uno en Grao los jueves. El séptimo año que lo impartimos, antes lo daba mi madre y ahora he tomado el relevo. En Grao se celebra una vez al año, el día del traxe, por lo que allí mucha gente, sin necesidad de estar en un grupo, se confecciona su propia indumentaria para esa celebración». Durante el taller, Raquel dedica las primeras clases a contar la historia de la indumentaria y posteriormente enseña a sus alumnos y a alumnas a confeccionar.