Los colectivos de representación de los ciudadanos creen que el documento peca de «falta de concreción» en varios puntos y no resuelve el problema de la falta de plazas de aparcamiento
31 mar 2022 . Actualizado a las 10:35 h.La presentación y salida a información pública del plan de Movilidad de Gijón continúa generando reacciones entre la ciudadanía. Las entidades de representación vecinal de la ciudad consideran que el documento presenta «propuestas muy interesantes», si bien en algunos casos «sustentadas más en deseos que en realidades». Del mismo modo se observa «falta de concreción» en proyectos como el plan de vías, el metro-tren o el vial de Jove, así como interrogantes acerca de cómo se va a poder aparcar en las diferentes zonas tras la supresión de plazas a pie de calle.
Desde la Federación de Asociaciones Vecinales de Gijón (FAV) se celebra el hecho de que «se abre un debate sobre la movilidad», con una serie de «propuestas muy interesantes y con otras, muy necesarias, sustentadas más en deseos que en realidades».
La entidad considera que «la mejora de espacios para el peatón y la movilidad ciclista, así como los Caminos Escolares Seguros o la presumible mejora de la Red de EMTUSA, son propuestas interesantes». Por contra, el Plan de Movilidad pone, a su juicio, en solfa «modelos de movilidad defendidos hasta el momento como favorables». Es el caso de las «avenidas de sentido único, para las que se propone volver a doble sentido en algunas de ellas», tales como Marqués de San Esteban, Manuel LLaneza y Pablo Iglesias.
También observan una cierta falta de concreción en «obras tan importantes como el plan de vías y metro-tren, el vial de Jove, la solución de la avenida de Portugal o la deficiente conexión de la zona Oeste más allá del Arbeyal y Nuevo Roces, con sus problemas generales, son carencias significativas del documento».
Sorprende también a la FAV la propuesta de «ampliación sistemática de la ORA cuando a la vez se plantea la construcción de 7000 plazas para compensar las 1400 que se perderán». «Y sorprende aún más la propuesta de áreas de preferencia residencial en zonas tan diversas como Moreda, Poligono y Viesques. Tres barrios que no presentan problemas serios de aparcamiento hasta el momento», continúa. «En el caso de El Poligono, incluso se plantean 2 aparcamientos futuros en la zona», concluye la FAV.
Muchas «preguntas e interrogantes»
Desde la asociación vecinal de El Coto explican que se observan varias actuaciones en el barrio, tales como la «aparición, en el apartado de aparcamiento, de la zona azul y la zona naranja de residentes», así como la creación de un carril bici bidireccional que transcurrirá por la calle Feijoo, sin pérdida de aparcamiento, y pasando de tres carriles a dos.
«En esta línea, se asienta el ciclocarril en la calle Ramón y Cajal en sentido descendente y de un carril bici en sentido ascendente. A su vez, se plantea un carril bici en la calle Balmes, también sin pérdida de aparcamientos», continúa. Otro aspecto es el cambio de sentido de la calle Usandizaga, «motivado por la modificación de Anselmo Solar que pasa a ser de única dirección». Se presentan también «las zonas escolares seguras, estando dentro del proyecto, el colegio público Ramón de Campoamor».
Desde la entidad reconocen tener «muchas preguntas e interrogantes, sobre todo sabiendo lo que se acerca con la pegatina medioambiental y que sólo se proporcionará una tarjeta de residente por vivienda. Al igual que el coste que esto puede conllevar al conjunto vecinal».
«¿Dónde vamos a aparcar?»
Desde la plataforma Esto ye Ciares se resalta que, a la vista de la documentación presentada, «parece que, de repente, Gijón se convierte en ciudad de cuento, donde sus vecinos pasean y se divierten en la calle y donde apenas hay tráfico en las avenidas». En lo que afecta a Ceares, «que es la reforma integral de Pablo Iglesias», avenida que parcialmente recorre el barrio, la plataforma se pregunta si «¿una vez sean suprimidas las plazas de aparcamiento en Pablo Iglesias, dónde vamos a aparcar?». En esta línea se cuestionan si, desde el Ayuntamiento, «tienen pensado intervenir en el barrio para habilitar plazas de aparcamiento que mitiguen el impacto de dicha intervención».
Esto ye Ciares recuerda que, según los estudios municipales, el barrio «cuenta con menos plazas de aparcamiento, públicas y privadas, que vehículos».
Un modelo recaudatorio
Fuentes de la Asociación Vecinal del Polígono reconocen que «cuesta entender las directrices que se siguen para plantear una Área de Prioridad Residencial en todo el barrio y a la vez proyectar un aparcamiento disuasorio para 500 vehículos y los actuales de la estación provisional». La asociación considera que «da la sensación de que el único sitio donde hay problemas para aparcar es en el Polígono, Moreda y ¿Viesques? y tal parece que en El Llano, Pumarín o Laviada, la cosa está bien».
Creen que se trata de eso «o lo que de verdad hay detrás es un modelo recaudatorio al margen del sentido común». Consideran que, en toda propuesta de estas características, «han de estar encima de la mesa los condicionantes que intervienen en ella y uno de ellos, importante, es la renta per cápita y la capacidad real para disponer de un aparcamiento. Minusvalorarlo aduciendo que son 45 o 50 euros, es una presunción alejada de la realidad social del barrio».
Estiman que otro de los condicionantes «es si la medida beneficia o perjudica». Indican que en el barrio hay una situación «singular» de centros educativos que provocan «centenares o miles de desplazamientos diarios de profesores y alumnos, cuya alternativa modal no siempre es posible en bus, bici o a pie».
