Cabueñes organiza un curso de urgencias pediátricas de la Academia Americana de Pediatría

E. G. B. GIJON

GIJÓN

Hospital de Cabueñes
Hospital de Cabueñes

Tiene como objetivo complementar la formación de los profesionales en el abordaje inicial de los casos de niños graves

20 feb 2019 . Actualizado a las 02:03 h.

El hospital de Cabueñes organiza los próximos días 21 y 22 de febrero un curso de urgencias pediátricas de la Academia Americana de Pediatría, que tendrá lugar en el hotel Silken. El director del curso, Ramón Fernández, pediatra en Urgencias de Cabueñes, explica que es la tercera vez que se celebra en Gijón y que tiene como destinatarios a pediatras, médicos de familia, personal de enfermería o sanitarios de emergencias.

«La Academia Americana de Pediatría lleva muchos años impartiendo estos cursos y, de hecho, en Estados Unidos hay que superar este curso para ser pediatra de urgencias, que es una titulación específica. En España, somos una decena de directores acreditados y llevamos haciéndolos desde 2005 en varias ciudades como Bilbao, Madrid, Zaragoza, Sevilla o Barcelona», indica, explicando también que los de Gijón se celebran en colaboración con la sede de la Academia Americana en Valladolid, cuyo director acreditado es Roberto Velasco, que codirige este próximo curso. «Somos los mismos instructores y solo cambia la sede y quién lo organiza».

El objetivo de este curso es complementar la formación de los profesionales que atienden las urgencias pediátricas ahondando en el abordaje y manejo inicial del paciente grave, a través de casos clínicos, simulaciones y diversas conferencias en las que se tratarán temas como las urgencias respiratorias (que son las más comunes), neurológicas, trauma, la medición de la capnografía o el maltrato.

«Queremos dar una visión de lo que hay que hacer si te llega un niño a urgencias. Primero, y lo más fundamental, es ver si está grave y, lo segundo y función de la gravedad, saber qué medidas hay que abordar», indica Fernández, que explica que la Academia Americana de Pediatría tiene, para estos casos, una sistemática común de abordaje y manejo. «Los pediatras no tenemos tantas situaciones urgentes graves como en el caso de los adultos. Tenemos que reciclarnos, formarnos y estos cursos constituyen una forma de estar todos en lo último que se está haciendo en urgencias y además permiten que vayamos en la misma dirección a la hora de actuar con el niño, con una sistemática establecida para que no se nos olvide nada y no se nos pasen cosas que podrían ser importantes», explica Fernández.

Como novedad respecto a otros años, el curso incorpora ecografía a pie de cama para el paciente crítico, que se emplea por ejemplo en casos en los que los pacientes pediátricos presentan por ejemplo un neumotórax o un derrame pleural, realizándoles una ecografía torácica para diagnosticarles y poder tratarles en el momento.